Amor Prohibido [Completa]

Capitulo 6: Agua Fria

Narra Alexis

- ¿Su novia? -- pregunta y Steven se levanta.

- Le gusta hacer bromas, madre ella es la hija de Franklin -- dice Steven caminando hasta la que ahora se que es su madre.

- Oh entonces ellas es la niña de Franklin -- dice ella, odio que me digan niña ya no soy una niña.

- Si, pero no soy niña tengo 17 años cumpliré 18 -- digo y la señora sonríe.

- Da igual lo importante es que eres la hija del gran amigo de infancia de mi hijo -- dice y yo asiento.

- Vine avisarle a Steven que iré de compras con mi nieto -- dice.

- Si llévalo contigo estará feliz eso sí no lo consientas demasiado -- le dice y ella ríe.

- Hijo es mi único nieto así que no me pidas eso, bueno Alexis un gusto -- dice dándome una tierna sonrisa para después irse.

- Estas loca -- espeta Steven mientras yo camino hasta la silla en la que el estaba.

- Algo parecido -- respondo y el camina hacia mi.

- Levántate y no vuelvas hacer un chiste como ese, no quiero meterme en problemas por los coqueteos de una mocosa -- dice y me levanto de la silla.

- Escúchame bien -- digo y me acerco a él tanto que siento su respiración en mi rostro -- Yo no tendría que hacer chistes si de una vez aceptas que te mueres por mí -- escupo y solo me mira más no dice nada -- Habla ¿por qué no dices nada? -- le pregunto.

- Por que ya te vas -- dice y toma mi mano.

- Suéltame -- digo y me jala hacia la sala -- Que delicado eres -- digo irónica tratando de soltarme.

- Tu mocosa,  me estás volviendo loco -- dice y abre la puerta.

- Y tú a mí, por que eres así tan idiota -- le digo y el bufa.

- Acaso soy un idiota por no caer bajo tus encantos -- espeta.

- Eres un COBARDE -- digo remarcando la palabra cobarde.

- ¿Por que? -- pregunta y cierra la puerta.

- Por nada sabes que, mejor me voy -- digo y me acerco para abrir la puerta pero el me detiene.

- No te vas sin antes escucharme -- dice y lo miro sería.

- Y quien me lo va a impedir ¿¡Quien!? -- le grito y el solo me mira.

- Yo te lo voy a impedir, no saldrás de aquí hasta que desistas el estar acosándome, ya ha pasado mucho y no te rindes -- dice cerca de mi rostro.

- Te odio -- murmuró y el sonríe.

- Pues estamos iguales -- responde y lo miro fijamente al igual que el a mi.

Mis ojos pasan a sus labios y unas ganas de besarlo me invaden. Subo mi vista de nuevo a sus ojos que aún están mirándome.

Nada pierdo con hacer esto, lo tomo de la cabeza y uno mis labios con los suyos. El raramente responde, estamos molestos y sin embargo nos besamos que tóxico es esto.