🌺Y Llegaste Tu: Vondy🌺

🌺Capitulo.7🌺

Nuestros labios seguian unidos, en un beso lleno de pasion... Senti como con una se sus manos acariciaba mi trasero... Imagenes en mi cabeza denuevo, No! Fue en ese momento cuando pude reaccionar y apartarlo.

Dulce: Nunca mas vuelvas a besarme!
-dije para despues correr hasta mi recamara-

Cerre la puerta y comence a llorar desesperada. Me sentia sucia, asquerosa...
Los recuerdos me atormentaban y me queria morir. Me quite la ropa y me meti en la ducha... Es inreible como con tan solo el minimo contacto con un hombre vuelvo a revivirlo todo, a sentir cada sensacion, el mismo asco y la misma angustia.

Las horas pasaron, ahora estaba con Dieguito en su habiacion, jugando con el y dandole de merendar.
En ese momento la puerta se abrio despacio.

Maira: Dulce!

Dulce: Dime maira -conteste lipiando la carita del bebe-

Maira: acaban de llegar unas muchachas, dicen que son amigas tuyas y que pasaban a saludarte.

Dulce: Ahorita bajo Maira -dije con una suave sonrisa-

Carge al bebe y baje junto a el a ala sala.

Dulce: Niñas! -grite al verlas para despues correr a abrazarlas-

Maite: Y quien es este bebe hermoso? -dijo hablandole al bebe-

Dulce: Es Dieguito, un amor de niño.

Anahi: Vinimos porque te extrañamos amiga...

Dulce: Y yo las extrañaba a ustedes...

En ese momento aparecio Chris, su semblante era serio. Venia de la calle, mi miro unos segundos y despues subio para el piso de arriba.

Anahi: Oyeme Dulce, y ese papasote quien es?

Dulce: Quien? -me hice la disimulada-

Anahi: Como que quien, el hombre hermoso que acaba de entrar!

Dulce: El cuñado de la mujer que me contrato. Otro de los dueños de esta casa.

Maite: Oye... Y se traen algo? Porque esa forma en que se miraron no es normal...

Dulce: obvio no nos traemos nada, estan locas paranoicas.
Y ya acompañenme a llevar a Diego al parque.

Salimos a pasear a Diego, el niño se reia mucho con ellas y la pasamos muy bien.
Despues de dos horas ellas se marcharon y yo regrese a la casa.
Era un poco tarde a si que subi ala recamara de Diego para acostarlo, ya que estaba dormidito.
Baje a la sala, no habia nadie, a si que camine hasta la cocina.
Maira no estaba, pero quien si se encontraba alli era Christopher, Me tense, no sabia como actuar ante el.

Dulce: Hola -dije para despues servirme un vaso de agua-

Christopher: Hola -contesto sin tan siquiera mirarme-

Dulce: Y Maira? -Pregunte-

Christopher: Le di la tarde libre, no regresara hasta mañana...

Dulce: Okey. Quieres que te prepare algo de cenar?

Christopher: Dulce, como ya te dije no estas aqui para hacer de sirvienta, simplemente para cuidar de mi sobrino.
-dijo cortante-

Dulce: No me importa hacerlo de verdad. Ademas yo tambien tengo un poco de hambre.

Christopher: Esta bien, pero solo con la condicion de que me dejes ayudarte...

Dulce: Sabes cocinar? -pregunte sorprendida-

Christopher: No, pero puedo hacer de pinche -despues de todo esto alfin me regalo una sonrisa-

Sonrei, y recoji mi cabello en una coleta alta.
Abri el frigorifico, que estaba repleto de comida.

Dulce: Que te apetece?

Christopher: Confio en ti, escojelo tu.

Dulce: Esta bien.

Agarre carne, y algunas verduras.
Comence haciendo la ternera ala parrilla.

Christopher: Y yo que hago? -dijo mirandome-

Dulce: Mmm... Porque no mejor vas poniendo la mesa!
-dije mientras troceaba las verduras-

Me miro resignado y accedio. Minutos despues la cena estaba lista. Habia preparado algo rapido y liguero.

Christopher: Listo. Ya prepare la mesa en el jardin.

Dulce: En el jardin?

Christopher: Si, me gusta cenar mirando las estrellas.
Que preparaste, huele delicioso...

Dulce: Filete de ternera con salteado de verduras y pure de patata.

Christopher: Que rico-contesto con una hermosas sonrisa-

Salimos al exterior de la casa, concretamente a uno de los jardenes junto a la alberca.
Hayi habia preparada una pequeña mesa blanca, con dos sillas a juego. En el centro un jarron con una rosa roja y justo al lado una cubitera con una botella de vino.
Dejemos los platos sobre la mesa y con alluda de Chris me sente.
Ahora estaba frente a el, miandolo mientras se disponia a dar el primer bacado a la comida.
Comence a comer yo tambien, mientras le veia disrutar.

Christopher: Sin proponernoslo tubimos nuetra primera cita romantica.

No pude evitar reir ante su comentario. Pero si, era cierto. Parecia una autentica cita romantica, bajo la luz de la Luna y las estrellas. Y mejor compañia no podia tener.

Christopher: Te quedo riquisima la cena, de verdad, gracias.

Sus ojos se clavaron sobre los mios.
Como podia ser tan guapo? Esos preciosos ojos brillantes serian capaces de iluminar la laguna mas oscura. Sus labios rosados y carnosos podrian hacer perder la cabeza a cualquier mujer.
Aunque fefinitivamente esa mujer no seria yo...