KIM SEOK JIN
¨Debes de empezar a madurar¨ ¨Empieza a pisar los pies en la tierra¨ ¨Crees que toda tu vida estarás como un cocinero¨ ¨Si sigues con esos sueños absurdos haré que todos tus amigos se olviden de ti¨. Las palabras del padre de Jin le causaba una fuerte punzada en el corazón como si este estuviera rodeado de espinas.
El presidente Kim era un reconocido empresario, tenía a su poderío la mayor parte del país, sin embargo, jamás había presentado a su hijo menor a los medios de comunicación. Jin no entendía la razón, muchas veces pensó que su padre tenía vergüenza de él por la diferencia entre su hermano mayor que si era querido por su padre que lo halagaba por su gran labor como neurólogo en uno de los mejores hospitales de la ciudad.
El sueño de Jin era ser un chef, amaba preparar platillos incluso inventaba los suyos, su meta era conquistar el mundo, pero como en cada sueño siempre hay dificultades. En el lado contrario se encontraba su padre quien pondría todos los obstáculos para que no cumpliera su propósito.
Tras los ruegos de muchos años logro convencer al señor Kim para que accediera a matricularlo en un colegio público, en ese momento se sintió la persona más feliz, las clases personales que su padre le había puesto desde pequeño lo tenían cansado, quería conocer a nuevas personas a amigos con quienes pueda compartir momentos inolvidables.
Lo único que mantenía feliz en casa a Jin era ver jugar a su perro Jjangu, pero hace una semana el señor Kim se lo había quitado y llevado a una perrera. Jin lucho por sacarlo de aquel lugar frío y oscuro, hasta llego arrodillarse frente a su padre y rogarle para que se lo devolviera, pero todo había sido en vano, su padre no acepto.
Jin tenía ganas de llorar, pero jamás lloro frente al señor Kim por la misma razón que no quería que él lo viera como alguien débil y fácil de dominar. Después de estar luchando tanto y yendo cada día a la perrera haciendo un gran alboroto fuera de ella para que le devolvieran a su perro un empleado cansado de sus gritos le informo que sacrificaron a Jjangu el mismo día que unos trabajadores de su padre lo llevaron allí.
En ese momento el mundo de Jin se desmorono, ese día empezó a correr lo más que pudo, ese día se emborracho a tal grado de llegar a su casa y golpear a su padre gritándole todo el rencor que tenía guardado dentro de él. Como respuesta por parte del señor Kim solo obtuvo un ¨lo hago por tu bien¨, los puños de Jin comenzaron de nuevo a golpearlo, pero a los pocos minutos fue separado de él y llevado a su habitación donde fue encerrado. Dentro de ahí se echó a llorar y tirar las cosas que veía con furia maldiciendo una y otra vez por haber nacido.
Al día siguiente el señor Kim entro a su recamara viendo el gran desastre que había causado, vio a Jin echado sobre su alcoba, agarro un vaso de agua fría y le echó encima despertándolo, en ese instante su padre le regaño de su comportamiento de la noche anterior amenazado con separarlo de sus amigos como la misma forma que lo hizo con su perro, le advirtió que esto sería la última vez que lo perdonaría. Las ganas de morir de Jin se hicieron más profundas, pero se preguntaba si tendría el valor de hacerlo.
Tras la pelea con su padre los siguientes días se lo paso dentro de casa. Un lunes a las seis de la tarde lograr oír unos golpes provenientes de la puerta:
-Pueden entrar
Pensó que era una sirvienta que venía a limpiar su recamara por lo que no le tomo importancia hasta que pudo sentir unos olores conocidos, al instante volteo y vio a sus seis mejores amigos mirándolo atentamente aun con el uniforme escolar.
-Pensé que vendrías hoy -hablo Jimin sentándose al costado de Jin sobre su alcoba-. Todos estábamos preocupados por ti.-Paso un pequeño problema -respondió fingiendo una sonrisa sobre sus labios.
Todos se quedaron callados, no sabían exactamente qué había pasado, habían escuchado rumores en el colegio que iba dejar el país, sus amigos sorprendidos fueron a su encuentro, pero la primera vez fueron votados al igual que los días siguientes hasta que con unas cuantas mentiras lograron convencer al guardia que cuidaba la casa de Jin para que puedan entrar.
Los seis amigos veían su cara triste, además no veían a su perro Jjangu ladrándoles cada vez que venían a la casa de Jin a hacer algunas labores del colegio o reuniones entre ellos.
-¿Y Jjangu? -pregunto Yoongi.
-Ya no la verán más -contesto Jin comenzando a derramar lágrimas y echarse a llorar frente a sus amigos.
Jin no resistía más y empezó a contarles lo sucedido a sus amigos desde el principio. Como el comportamiento de su padre le había causado tanto dolor y dejarle en claro lo tan malo que podía ser.
Los seis amigos dejaron de insistir, después de un rato todos se pusieron en plan de salir un momento para animar a Jin, por ese momento después de un largo tiempo Jin había reído mucho.
-¿Qué les parece hacer un viaje hacia el mar? -hablo comiendo una manzana acaramelada.
-A mí me gusta la idea -contesto Jimin-, que les parece a ustedes-miro a los demás.
Todos respondieron un sí, todos querían ir a ver el mar, ese lugar donde pocos iban en la temporada de otoño, lo más sorprende después fue que cada uno de ellos se sentía feliz al salir por unos días sin avisar a sus padres, querían vivir una aventura, pero sin embargo todos querían hacer algo ese día en el mar, algo donde terminarían con todo después de volver a sus hogares.
En la misma noche después de dejar a cada uno de sus amigos en sus casas, entro a su habitación. El ambiente era frío, busco un papel y una pluma entre el desorden que había y comenzó a escribir lo que sentía, tal vez esa era una forma de esfumar los recuerdos y empezar de nuevo.
¨Talvez yo nunca pueda volar¨
¨Talvez yo nunca pueda alcanzar el cielo¨
Padre.
Salió un momento de su recamara hacia el jardín de su casa y arranco una flor de azucena. Entro de nuevo a su habitación y lo coloco al costado del papel escrito ubicando a los dos en la ventana de su cuarto y cerro las cortinas blancas viendo por última vez la luz de la luna que tornaba al cielo un color azul noche.
Cansado de aquel día, se acostó sobre su alcoba y todo se tornó oscuro, al instante se empezó a escuchar un estruendo de un accidente de autos en la calle, pero Jin no le tomo importancia y siguió durmiendo profundamente con una sonrisa en sus labios, esta vez sí era sincera, entre sus sueños logro ver a Jjangul.
❄❄❄❄
Espero que les este gustando el fic, se que es dramático, pero creo que a cualquiera le paso alguna vez en su vida lo mismo o tal vez no.
Si no se dan cuenta el fic tiene que ver con los "short film de wings" o al menos trato de que se vea algo parecido, también quiero tratar en el fic lo que pienso de la realidad de muchos adolescentes en problemas y lo que piensan de la vida, en fin espero que les este gustando y voten en la estrellita, estaría muy agradecida.
ESTÁS LEYENDO
Cartas de suicidio - BTS [One Shoots]
FanfictionIt's very difficult, where should I go? I just want to run away from a dark world.