Car ride [Taekook//Kooktae]

Huída

Jungkook y Taehyung era la pareja-no-pareja más envidiada del campus, porque eran tiernos juntos y por separado. Todos veían al frío Jungkook salir a veces con Taehyung para ayudarle a aprovechar mejor el tiempo de estudios. Nadie sabía que eran pareja, ellos tenían que ocultarse desde que un chico salió del armario y a parte de llevarse una paliza por los idiotas de turno fue expulsado. ¡Sólo porque amaba a alguien de su mismo género!

Jungkook era un estudiante de último año con unas notas bastante buenas pero no de sobresaliente, pero destacaba por estar apuntados en diferentes actividades y ser el mejor en todas ellas. Aún así era callado, tenía su grupo de amigos y un novio al que amaba con locura.
Por otro lado teníamos a Taehyung, un casi niño de segundo año más social que un cachorrito en un parque. Sacaba unas notas por encima del promedio de clase, a pesar de que la gente le tome por medio bobo y está apuntado a la orquesta universitaria porque toca el saxofón.

Sus clases estaban en pabellones diferentes, pero a la salida siempre se iban juntos a almorzar e iban juntos a la residencia porque, esta vez si compartían pabellón.
A veces agradecían que sus respectivos compañeros de cuarto se llevaran bien y les dejaran intercambiar habitaciones para poder darse mimos todas las noches hasta dormirse en brazos el uno del otro. Se llenaban de besos, de palabras de amor, de promesas eternas donde nunca nadie les haría daño.

Pero no todo puede ser bonito siempre.

Se había entendido el rumor de que había una pareja homosexual en la universidad y el director se negaría a tenerles allí.
Las familias de ambos sabían de su relación y la aceptaban gustosos, pero ellos tenían miedo. Ya habían llorado lo suficiente como para ahora recibir golpes y una expulsión permanente por amar.

Esa noche estaban en el dormitorio de Jungkook, que estaba en la cuarta planta.
- Kookie. - Llamó Taehyung al bello chico de sonrisa de conejo que tenía a su lado. - ¿Qué deberíamos hacer? -
El rumor había llegado a oídos del menor, sus compañeros de clase no dejaban de comentarlo y los abusones del curso insistían en hacerles sufrir a aquellos “maricones de mierda” que se atrevieran a estar entre aquellas paredes.
- ¿Nos escapamos? - Preguntó con ilusión el mayor. - Somos mayores de edad, podemos trabajar y mis tíos tienen una casa de verano que llevan años sin usar. - Jungkook tenía claro que prefería huir con su pequeño novio que tener que ver cómo les maltrataban por mucho que quisiera matar a todos y cada uno de los que se atrevieran a decirles algo.

Estaba todo decidido, Jungkook ya había dejado vacía su parte de la habitación y tenía todo guardado a presión en una mochila de viaje. Ahora estaban en la habitación de Taehyun y deberían haber llamado porque se encontraron a sus compañeros de cuarto besándose, y por suerte, no en la cama de Taehyung.
Entendieron a la perfección que se quisieran escapar, ellos si pudieran también lo harían y por eso mismo les iba a ayudar.

Namjoon, un amigo de Jungkook se ofreció voluntario para darles su coche. Ya le diría a su madre que se lo robaron o algo por el estilo.

Los compañeros de Jungkook y Tae, que eran Hoseok y Jimin, junto con Namjoon les habían puesto todo en bandeja para que se fueran lo antes posible. Tenían las llaves del coche y las maletas guardadas antes de las cuatro de la mañana. Jungkook hizo una llamada urgente a su tía y aceptó gustosamente dejarles la casa, ella tampoco lo tuvo fácil y quería brindarles un lugar seguro.
Sus amigos les prometieron tenerles cubiertos hasta que el papeleo estuviera arreglado y supieran en todo el instituto que se habían ido y que obviamente, ellos eran esa “asquerosa” pareja.

Irónicamente ellos eran bien vistos incluso por profesores y todo se iría a la mierda una relación.

Cuatro y cuarto de la madrugada, iban en coche camino al hogar de verano que ahora sería su hogar, sólo de ellos dos. Tenían la calefacción puesta, Jungkook conducía mientras Tae estaba dormido apoyado contra la ventana del copiloto.
La música estaba suave, aún así a la media hora Taehyung ya estaba despierto hablando con Jungkook sobre lo que deberían hacer cuando lleguen a casa.

- Y deberíamos adoptar un perrito, porque los perritos son geniales. - Decía el rubio ilusionado.
Cada vez que paraban en un semáforo aprovechaban para darse un dulce beso. Seguían teniendo algo de miedo.

Jungkook estaba demasiado enamorado de aquel pequeño bobo que era su novio, tanto que dejaría de momento sus estudios a parte para poder protegerle de cualquier mal. Él quería con locura tener sus estudios terminados, pero amaba a Taehyung y todos sabemos que amar es mucho más significativo que querer.
Taehyung era demasiado despistado y creía tener la culpa de que ese rumor se extendiera y pensaba que Jungkook le dejaría por su amor al estudio. Sin embargo, le acogió en un nuevo hogar, le debía mucho y se lo devolvería en forma de amor.

La primera parada la hicieron en una gasolinera con cafetería a las cinco y media de la mañana, desayunaron tranquilamente entre risas. Eran libres.

Una hora y media más tarde sólo tenían que bajar una larga colina para llegar a la casa, pero decidieron quedarse apoyados contra el capó mirando como las estrellas empezaban a desaparecer para anunciar un nuevo amanecer.

- Te bajaría una estrella, pero no brillan tanto como tú. - Dijo el castaño apoyando la cabeza sobre la de Taehyung.
- Hyung, no necesito el brillo de las estrellas porque la luz de tus ojos iluminaría la noche más oscura. - Dijo el rubio sonriente poniendo la mano en el pelo de Jungkook para acariciarlo.

Así pasaron el rato hasta que la luz de un nuevo día llegó. Un nuevo día dónde estarían juntos para siempre, sin nada que decir sobre su relación.
Huir era de cobardes o eso decía la gente, porque huir para empezar de cero habiendo abandonado tus estudios para proteger al amor de tu vida es el acto más valiente que puedas hacer.

Dos años más tarde.

- Amor, ¿dónde estas? - Preguntaba un rubio que llegaba de dar un paseo a la perrita de la familia.
- ¡En el comedor! - Gritó una voz.

Cuando Taehyung cruzó el arco del comedor se encontró con todo a oscuras a excepción de dos candelabros sobre la mesa. Esta tenía flores en un jarrón y pétalos de rosa rodeando los candelabros. Olía a comida casera recién hecha uniéndose al olor de las flores.
De pronto sintió unos brazos alrededor suya, abrazándole.

- Feliz aniversario, amor. - Dijo Jungkook sonriendo a Tae, aunque este no le vio porque estaba de espaldas a él.

Sí, a veces huir es arriesgar demasiado y más aún si es junto a una persona; pero si es la indicada, sólo quieres vivir el presente como si no hubiera un mañana.

N/a
Este one shot está dedicado a mi Jungkook, mi hyung y una de las mejores personas del mundo pinkchim_loves_kook. Espero que te guste porque he intentado ser lo más tierne para ti debido a la foto que me enviaste. Foto la cual es la portada.