ECLIPSE

# Capitulo 10.

TYLER.

Impactado. Esa era la manera en que quede después de las palabras de Kate. Nunca imagine que Kate pudiera tener esa mentalidad o esa actitud. En ese momento sonó lo más fría e insensible, esa no es la Kate que me imaginé, pensé que al momento de conocernos nos llevaríamos bien y todo eso, pero Nina la abofeteo, no sé en qué momento llegó, pero todo fue muy repentino, y tengo que darle las disculpas que se merece, tanto a Nina como a Kate. Pensándolo mejor; Kate tiene una buena derecha. Y luna, nunca me imagine que tuviera sentimientos por mí, y tampoco imagine que estuviera vigilándome en el restaurant. Todo esto es muy confuso, solo me gustaría estar todo el día durmiendo y poder despejar mi mente, pero solo me encuentro trabajando. Que mal por mí.

El restaurant ha estado algo lleno, se puede decir que es uno de nuestros mejores días, o mejor dicho; es uno de los mejores días para el restaurant, ya estoy lo bastante cansado; tanto de atender como de encontrarme en apuros por las jóvenes que tratan de coquetearme o de tener mi número o una cita.

Vi la hora y solo faltaban 5 minutos para mi turno de salida; ya podría irme al departamento. Qué bien por mí. Atendí a una madre y a su hija; esas serian las últimas personas que atendería en el día. La madre era alta; pelo rizado y una tez de porcelana, ojos verdes y se notaba que debía tener dinero por la forma formal de vestirse, al igual si hija; debía tener unos 10 años; solo que ella tenía el pelo liso, una tez de porcelana y ojos azules y al igual que su madre vestía de forma formal, su olor fue una de las primeras cosas que me llamo la atención. Polvo. La madre es una estrella, pero la hija; su olor no era tan notorio como el de su madre; supongo que su padre debe de ser un humano, por eso su olor no es tan notorio.

-Y bueno, ¿que desean pedir? O ¿desea ver la carta?- les dije ya sentadas.

- Quiero un capuchino con crema y unas galletas. Y tu Renata, ¿qué quieres?

- Un pedazo de torta de chocolate y una taza de café con leche, que tenga dos de azúcar.

- Claro, traeré sus órdenes.

-Chico. Ten cuidado.

- Como?

- Que te cuides chico. Nunca sabes lo que pueda pasar. - decía mientras la niña y ella sonreirán.

- Está bien.

Le pase el papel con las órdenes al cocinero y me quede pensando en lo que dijo. ¿Cuidarme? de ¿qué? O de ¿quién?

Lleve las órdenes a la mesa. La mujer estaba atenta a su celular y la niña miraba por la ventana.

- Solo deja la comida en la mesa- dijo la niña; que al hablar no dejó de ver hacia a la ventana.

Deje las cosas en la mesa para irme luego al departamento. No quería seguir en el trabajo por el cansancio y por lo abrumador de la situación.

- Cuídate camino a casa.- dijo la mujer sacando la mirada del celular- nadie quiere que le pase algo a nuestro dios.

- ¿Cómo?

- ¿Acaso eres sordo?, que te cuides camino a casa, nadie quiere que pase nada malo; no solo cuídate esta noche, sino todas. ¿Quién sabe?, quizás no llegues a ver el sol del otro día.

- Lo tendré en la mente, gracias. Con su permiso, me retiro.

Me retire de la mesa. Y fui a cambiarme, no quería seguir con la situación; en si era sospechosa, si me dice que me cuide, lo primero que pienso es que ella sabe que me va a pasar algo malo. O ella misma cometerá el crimen.

- Marina, puedes llevarle la cuenta a la mesa 6 cuando terminen con su comida?, tengo un compromiso, y creo- mirando el reloj de mi muñeca- que voy tarde.

- Claro, ya tendrías que a verte ido, tu turno termino hace unos minutos, ve. No te preocupes.

- Gracias.

Fui a cambiarme, en realidad no tenía ningún compromiso, pero quería salir de aquí.

En unos minutos ya estaba listo, y Salí para el departamento. Ya estaba oscureciendo, y debía tener cuidado, justo como dijo la mujer. Sé que era una estrella, y ella sabía que yo era el sol. Todo es muy confuso, se supone que debería ir un paso delante de todos, no diez detrás de ellos.

Caminando por la calle me fije en una niña, estaba en la esquina de una calle en cunclillas sujetando sus rodillas y mirando hacia abajo, debía tener unos 12 o 13 años, me acerque y me acunclillé al lado de ella.

- Disculpa, ¿estás pérdida o algo por el estilo?

La niña al escuchar mi voz, miro hacia arriba, eran unos ojos celestes, que al mirarlos parecía ver al cielo llover, su pelo negro estaba suelto, tenía una tés media bronceada, bueno...con la luz que quedaba se podía ver eso.

- Dime, ¿estás perdida?- le volví a preguntar. Tenía un peculiar olor. Olía a perro mojado y a tierra, iugh, bueno, no era malo, pero tampoco era bueno.

- Mi-mi her-ermano, no-no lo encuentro- decía con los mocos colgando, estaba llorando a moco suelto. Valla.

- Bueno, y dime, ¿Cómo es tu hermano?- me pare y le tendí la mano, al ver que le daba la mano para ayudarla a pararse, dudo un poco, pero luego la tomó.

- Es de este porte- poniendo su mano un poco más arriba de sus rodillas, ella medía como 1,40 o menos.- y su pelaje es algo marrón.

- A ver, ¿es un niño o un animal?... ¿que eres?

- Pues...- me empieza a oler o a...Olfatear- parece que tu eres el sol. Yo soy una loba, y mi hermano es un lobo, todavía no se puede transformar, haci que está en su forma de lobuna.

-A ver, llorabas porque tu hermano esta perdido, y me dices que es un hombre-lobo, bueno niño-lobo, dime, desde cuando esta perdido

-No lo sé, hace algunos días o tal vez 1 semana.

-Bueno, tienes madre, padre?

- Tenia, mi padre murió hace mucho, y mi madre murió dos años después que naciera mi hermano.

- Valla. Y tienes algún lugar para dormir?

- No, con mi hermano hemos estado durmiendo en algunos callejones, ¿Por qué?

- Podrías venir con nosotros, ¿Qué te parece?

- ¿Enserio?

- Si, hasta que encuentres a tu hermano, ¿tienes a alguien más?, un tío o tía, o amiga de su madre, ¿o algo haci?

- Pues hay un amigo de nuestro padre, lo hemos tratado de buscar todo este tiempo, peo no hemos dado con él.

- Bueno, ¿qué tal si al llegar al departamento me cuentas mas de é?

Se quedo mirando a la nada, luego ladeo su cabeza para mirarme con una sonrisa- si, está bien. Si tú me podrás ayudar a encontrar a mi hermano, te lo gradecería y te lo agradezco mucho.

- Vamos, hay que apurarse, - dirigiendo mi mirada al cielo- creo que el día se pondrá peor.

Y emprendimos marcha, teníamos que llegar al departamento, ya que se pondría a llover, no se porque el día ha estado algo loco, primero el restaurant, luego la señora estrella, y ahora la niña. Ahora que lo recuero, la mujer dijo que hoy tuviera cuidado, no creo que esta niña-loba me quiera hacer daño, solo está asustada por perder a su hermano, todo se solucionara. Los problemas con Kate, Luna, Nina, y los míos. Todo se solucionara. Eso espero.

Bueno aquí está el nuevo cap; sé que es corto, pero espero que les haya gustado. Gracias por todo, como siempre digo; si les gusta una estrellita, si tienen alguna pregunta comenten, y que agradecería un montón que la recomendaran; espero que el que lea esto le guste. Que tengan una linda mañana, tarde y noche.

#Besos.