capítulo 1

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Creo que hasta ahora no he leído algo similar a esto así que bueno, espero que sea de su agrado. 😄

Soy ________ Fujiwara tengo 15 años y actualmente estoy en la Academia ninja, tengo cabello largo con ondas pasando los hombros y mi color es castaño claro casi llegando a un rubio, mis ojos son color miel y mi tes de piel es rosada, llevo puesta una remera con hombro descubierto color violeta con rayas horizontales negras, una calza elastizada muy ajustada color negro y larga hasta las rodillas y con sus sandalias típicas ninjas, me describo como chica bastante diferente al resto, por el simple hecho de que no me interesa ser aceptada, detesto seguir modas y odio a la gente superficialmente falsa, así que, tengan una idea de que amigas no tengo pero si puedo decir que me llevo bien con alguna que otra chica.
Soy una persona muy observadora tanto en clase como fuera de clase pero siempre me hierve la sangre, porque parece que antes de comenzar la clase siempre  mis compañeras quieren incluirme en sus charlas,en especial Chocho, que se la pasaba hablando de que tipo de chicos les gusta pero sinceramente para mi es una pérdida de tiempo, también escucharlas a las otras hablar de chicos, ya me estaban hartando, entonces cuando me veo venir esos comentarios me voy directo al lado de Sarada, y me pongo a estudiar con ella, esa es una de las tantas cosas en común que tenemos, hasta que llega la delegada de la clase Sumire san y nos dijo que nos acomodemos en nuestros lugares, por lo cual, me gusta sentarme adelante, en la primera fila para prestar atención, fue cuando entró el Sensei, todos nos paramos e hicimos una reverencia, tomamos asientos y la clase comenzó, para mi nunca es aburrida, me gusta estar escuchando a Shino Sensei explicar y escribir en la pizarra, pero así también acaba rápido la clase. Luego al retirarnos siempre era la última en irme y ¿Por qué?, bueno es simple, me he comenzado a enamorar de Shino san, a pesar de que es mayor que yo, hay algo que me atrae, no puedo evitar ponerme feliz cuando lo veo, aunque trató de no ser tan evidente, pero siempre que me voy a casa, estoy con una leve sonrisa.
De camino a casa, me fui a ver una tiendas, sabía que era algo temprano y no me demoraria mucho, así que me tomé mi tiempo, cuando quise darme cuenta ya se estaba oscureciendo y debía volver a casa, obviamente nadie me estaría esperando, mis padres no están con vida desde hace dos años, por ir a cumplir una misión la cual fue exitosa pero no salieron con vida, así que desde ese entonces siempre me cuidado sola, pero por mi flojera quise acortar el camino a casa y me empecé a meter por lugares muy poco transitados y de los cuales se decía que eran algo peligrosos, jamás tuve miedo, siempre confíe en mi intuición y mis habilidades, por lo que camine tranquilamente. Creo que muchas veces nuestras vidas dependen de un sólo segundo, y por ese maldito segundo me confíe, sentí un golpe muy fuerte en la cabeza como si fuese una jaqueca, quise intentar seguir caminando pero mis piernas no respondían, sentía que mi chakra era drenado de mi cuerpo, caí al piso en seco, sentí que mis ropas fueron rasgadas dejando a la intemperie mi ropa interior, entonces fue cuando mi visión se tornó borrosa, escuchaba las voces de unos hombres, no sabía con exactitud cuantos eran pero no era uno sólo, puede que suene patético pero lo único que pasó por mi mente fue el rostro de Shino..., luego como acto reflejo intente moverme pero no podia, sólo tenía mi boca al descubierto por lo que atine a gritar tan alto como fuera posible, sentía que mi voz iba perdiendo potencia, y en lo único que podía pensar, era en lo patética que me sentía, morir de esta manera, tan débil e insignificante, pero antes de perder el conocimiento sentí como algo se posó en mi mejilla, algo pequeño como ¿un insecto?, luego antes de que mis ojos se cerrarán escuche los gritos de aquellos hombres y sólo pude visualizar una sombra que estaba de espalda a mi, no pude aguantar y me dormí.
Sentí que mi cuerpo estaba relajado y que una mano tocaba mi frente, me desperté y una luz blanca me estaba molestando a los ojos, y lo primero que vi fue a Sakura san, la madre de Sarada, luego mi vista se terminó de acostumbrar a la luz y visualice que estaba en el hospital, acostada en una camilla, con suero en mi brazo derecho y un fuerte dolor de cabeza, a lo que pregunté que sucedió algo confundida.

-Gracias a Dios que despertaste querida- decía la pelirosa de manera aliviada -Es entendible que por ahí no recuerdes lo sucedido pero intentaron violarte- dijo algo furiosa e indignada.
-Lo único que recuerdo fue que camine por un lugar poco transitado para llegar rápido a casa, después un fuerte dolor de cabeza, caí al suelo y me sentí paralizada, sentía mis energías irse, luego me rompieron la ropa, lo único que hice fue gritar y antes de caer inconsciente sentí que algo se posó en mi rostro- dije algo triste, agachando la cabeza.
-Entiendo, pero tienes que ser más cuidadosa, da gracias que tu Sensei llegó en el momento justo- me acarició el cabello, para luego yo al oír sus palabras la mire inmediatamente.
-¿Hablas de Shino Sensei?- dije sorprendida.
-Así es, es más vino muy preocupado, esta afuera esperando, lo haré pasar- me sonrió y se dirigió a la puerta para abrir y llamarlo a entrar.

No puedo creer, ¿realmente él me salvó?, entonces ese insecto que sentí en mi mejilla era uno de los suyos, no podría evitar poner mi mano en la mejilla y recordar eso, pero cuando me quise dar cuenta él ya había entrado al cuarto, vino un poco desesperado a ¿verme?, podía ver su preocupación, lo cual hizo que mi corazón empezará a latir muy rápido, ver a la persona que me gusta, que me haya salvado y luego verlo preocupado por mi, eso sí que me alegro a lo que una pocas lágrimas empezaron a descender por mi rostro, con la mirada baja pero no tardó mucho en romper el silencio que me habló.

-Fujiwara san ¿por qué llora? ¿cómo se siente? - luego de él también calmarse, y con una de sus manos, tomó mi mano izquierda y con su otra mano seco mis lágrimas.
-Sensei....- le susurre.
-Dime- no quitó su mirada de mi.
-Lo siento, por mi irresponsabilidad casi me pasó algo horrible y sino fuese porque llegó en ese momento no se que hubiese pasado, lo lamento- me largue a llorar, era lo único que en ese momento podía hacer pero él se acercó, sentándose en la camilla, me abrazó y puso mi cabeza en su pecho dejándome que me descargue.

Cuando pare de llorar él me volvió a hablar.

-¿Sabes como fue el motivo por el cual te pude hallar?- me habló calmadamente.
-No....- respondí secándome las lágrimas.
-¿Tu recuerdas de que yo tengo dominio sobre los insectos en mi cuerpo los cuales se alimentan de mi chakra?-
-Si, lo recuerdo, es una de las técnicas de su clan ¿ no es así?-
-Exacto, bueno desde el momento en que te fuiste, cerré el aula y me fui a la sala de profesores, pero de camino allí pude sentir que uno de mis insectos se había ido de mi, eso me pareció extraño, ya que sólo hacen lo que yo les ordenó, por lo que comencé a seguirlo, pero en un momento le perdí el rastro, se que pensarás que es tonto hacer una gran búsqueda por algo tan insignificante pero no importa, el caso es que cuando pude rastrearlo esté me llevo hasta donde tú te encontrabas, y se posó en tu mejilla, al verte tirada en el suelo inconciente pensé lo peor, capture a esos sujetos con mis insectos y luego advertí a las autoridades, que ni bien llegaron te tomé en mis brazos y te traje aquí.
-¿Pero porque será que uno de ellos me siguió? Eso es extraño- me separé de él y lo miré.
-Yo tampoco lo sé pero sea lo que fue, pude salvarte-

Luego de mirarnos unos segundos en silencio entró Sakura chan para traer el diagnóstico de mi, el cual decía que sólo tuve un fuerte golpe y que mi chakra se estará normalizando, pero debería descansar por lo menos una semana, pero yo no podía aceptar estar tanto tiempo en casa, le suplique que no me haga faltar tanto a la escuela, por lo que ella me dijo que con dos días estaría bien pero en menos de eso, no tuve objeción alguna por lo que me alegré, ella me hizo el certificado médico para que él Sensei lo presente mañana al director. Pero ahora debía irme a casa, ya me sentía lo suficientemente bien para caminar por lo que Shino habló.

-Déjame llevarte a tu casa y te cuidaré- dijo muy decidió a lo que contesté de inmediato.
-Por favor no se tome molestias, sólo déjeme en casa y yo está bien- le sonreí pero aún así eso no pareció importarle.
-Tu eres mi alumna y mi deber es velar por tu seguridad-
-Pero se lo digo de verdad, no tiene que ayudarme, voy a estar bien- dije algo caprichosa, pero inmediatamente Sakura interrumpió.
-Dejalo que en la noche se quedé contigo, todavía estás algo débil, pero si quieres de día mandaré a Sarada para que te pase la tarea y este contigo- me miro amablemente, no había otra opción, así que acepte la propuesta de ambos.

Como mi ropa estaba rota tanto en la remera como en la entrepierna de mi calza, y no tenía otra cosa que usar, el Sensei me digo su tapado para que me cubriese, me tomé de su brazo y salimos despacio caminando del hospital.

Bueno hasta aquí :) espero que le guste y bueno espero sus vistos, estrellitas y comentarios ❤❤❤

Sensei, lo amo [Shino Aburame y tú] LemonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora