1.Escena.

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"Justo en ese momento encontré el diario.Su diario.
Gracias a él comenzaría todo.

Samuel De Luque."





-¿Puedes dejar de hacer malos chistes?-Expresó Josh dándole una buena calada a su cigarro.

-Tú deberías dejar esa mierda,te quema los pulmones.-Samuel suspiró y rió.-Mejor vamos adentro.

Josh lanzó el ya casi consumido pitillo y siguió a Samuel hacia el interior del departamento de policías.
No tardó mucho la paz,cuando Andy corrió hacia ellos.

-Josh,Samuel..-Paró en seco y acomodó sus lentes.-..emergencia.

Siempre usaban esa palabra.Básicamente engloba todo lo que se venía.
El piso se alborotó.Los oficiales comenzaron a dispersarse,al igual que algunos agentes y a lo lejos se acercaba el director ejecutivo con pasos largos,como sus piernas,con su vestimenta formal y sus canas ya obvias a la vista.

-Pons y De Luque,vamos.

(...)

El edificio ya se encontraba rodeado de patrullas y las calles estaban semi cortadas,prohibiendo el paso de los autos y peatones con una cinta amarilla.

Los dos agentes bajaron de la patrulla y el director ejecutivo,Thiago Pérez de otra.Él ultimo levanto la cinta para que los otros pasen.
Los tres caminaron hacia la entrada del edificio con paredes grises,ventanas altas y anchas.

-¿Qué pasó?.-Pregunta De Luque con el entrecejo fruncido.

Subieron por las escaleras,ya que el ascensor también contaba como una posible escena,aun que eso mucho no importaba,el crimen había sido cometido en el segundo piso en el departamento D7.
Los oficiales no paraban de salir y entrar de ese lugar.

-Según me informaron llamaron porque escucharon unos gritos y varias cosas estrellarse al suelo.Un vecino.-Así era siempre,el tono de voz de Pérez era neutral,casi sin ánimos y una seriedad profunda que a veces aterrorizaba.

Josh asintió e ingresaron a donde se encontraba el cuerpo.
El ambiente era una completa imagen digna de una película de terror.Libros de todos los colores,con distintas tapas abiertos y otros cerrados,dos lamparas en la miseria,vidrios,vasos,trozos de porcelana,saumerios,plantas,tierra y pedazos de macetas esparcidas por todo el suelo de alfombra.El salón contenía muebles contra todas las paredes.Algunas de estas estaban dañadas con rasguños y otras tenían salpicaduras de pintura.Todo era lúgubre.Los muros blancos estaban manchados con sangre y la alfombra que era verde,se había convertido en un verde sucio,por toda la plasma que había absorbido.

Samuel rodeó el cuerpo.

En estos trabajos ni un minúsculo detalle podía pasarse.

-¿Hace cuanto esta aquí?-Preguntó a uno de los médicos forenses que revisaba el cuerpo.

-A juzgar del color de la piel..-Con sus manos protegidas con guantes de látex tocó con extremo cuidado el cabello negro con algunas ondas.-...hace unas dos semanas.-Inmediatamente Samuel llevó su vista al director.

-¿Dos semanas?¿No que una vecina había llamado?

-Iré a hablar con los demás,seguro hoy les toque interrogar.-Salió Perez del departamento con sus manos escondidas en el pantalón elegante.

-Esta vez me toca interrogar.-Replicó Josh.Samuel revoloteó los ojos.-Es que sabes que soy el maestro de sacarle cosas a los testigos.Además que soy un buen actor y me meto muy bien en el papel de poli malo.

-Bueno,yo solo iré a ver a la testigo.-Josh asintió con una sonrisa.

El agente Joshua Pons era un hombre de treinta dos años,alto,con ojos verdes grandes,de cabello moreno y piel blanca con algunas pecas.Desde ya diez años él y Samuel trabajan juntos.Ambos habían comenzado en el puesto de investigadores en  narcotráfico y ahora estaban como agentes de asesinatos,y como buenos amigos.

Samuel caminó a los pies del cuerpo y desde arriba,de pie,lo observó.

El cadáver era un joven de alrededor veinticinco años,de estatura alta,al igual que él o quizá más,espalda ancha,pecho curpulento,brazos poco musculosos,con el cabello negro,desordenado,tenía tez palida,muy blanca,mejillas abundantes,labios gruesos,ojos pequeños y pestañas largas.

-Según su dentadura tenía entre  veinticuatro y veintiséis años.-Habló el forense.Samuel hizo una mini sonrisa.Él era muy bueno en esto y sacar la edad de cuerpos muertos era una tarea fácil.-Tenía una muy buena dentadura,que lastima.-Negó y se levantó del suelo para hablar con los demás.

El castaño dejó pasar el comentario poco indicado para las circunstancias y tomó su lugar.Flexionó las piernas y ladeó su cabeza.Le llamaba la atención que el cuerpo este casi recto contra el suelo.Lo único doblado eran sus brazos.Ambos estaban en forma de V.Una de las mejillas estaba apoyado al piso.

O alguien lo había matado y dejado casi de forma perfecta o él mismo se había matado.

-Necesito guantes.-Uno de los médicos de turno le dió un par y este se los puso.

Tomó con las dos manos el rostro y lo movió.La mejilla que estaba contra el suelo tenía un corte y parecía profundo.Volvió a dejar la cabeza en el lugar y se dedicó a ver los brazos y manos.Las muñecas estaban cortadas.Había cicatrices rosas,lo cual decía que eran realizadas hace no mucho tiempo,ya hasta estaban sanando.
En su brazo derecho había otra marca,una desde el antebrazo hasta la muñeca y en la izquierda había una cortada honda.Ambas se encontraban rojas,recién hechas.Esta ultima era  especial,porque circulaba en toda la muñeca,como una especie de pulsera.

Se enderezó y se puso nuevamente de pie.

-Samuel.-Josh se paró a su lado y suspiró.-La inmobiliaria nos dijo su nombre.

-Ajá.-La cabeza le comenzaba a doler.Se sacó los guantes.

-El chico se llamaba Guillermo Díaz.

Samuel llevó sus orbes marrones otra vez al cuerpo sin vida enfrente suyo y su pecho se oprimió.

-Hay que seguir viendo el lugar.

Los dos se dirigieron a otro de los cuartos de la escena.

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