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Capítulo 7

POV'S SUELI

Me sentía fatal, le juré, le juré que no lo volvería a hacer y lo hice.

- Tengo que hablar con él.- Ryu negó con la cabeza.

- Él lo entenderá. No volveré a perderte.

- Yo...

Miré por donde se había ido, Ryu me abrazo poniéndome su chaqueta la cual él tenía, sus manos frías tocó mis mejillas y me alzó obligándome a mirarlo.

- Mañana puedes hablar con él.- su voz era sería y con mucha seguridad, siempre a tenido seguridad.

- Ryu es mi mejor amigo, no lo perderé, no quiero.

Me solté de su agarré y corrí tras donde últimamente lo había visto, no quería mirar atrás, estoy completamente segura que él me está mirando.

- ¡Sueli, No olvides que te amo!

Me quedé en un callejón, el aroma de Ryu llegó a mis fosas nasales, me di cuenta que tenía aún su chaqueta, era grande por lo que parecía un vestido, me puse la capucha y comencé a caminar entre las calles oscuras o más bien solitarias, me comenzó a dar miedo. En segundos dos chicos aparecieron en el callejón, uno parecía un brócoli y el otro una veterraga, tragué saliva con el miedo y sobre todo estaba con asco pensando en que me harían daño.

Sentí a otro chico agarrarme los brazos y juntarlos dejándome sin salida. Maldita la hora en que dejé a Ryu.

- ¡Suéltame! ¡Te juro que te arrepentirás de esto!

- No sentirás nada, Chiquilla.

El Brócoli se acercó a mí, y el chico de atrás me lamió el cuello, el asco volvió a mí y tenía una inmensas ganas de darle su merecido y lavarme mi cuello con clorox.

- ¡Suéltame! ¡Maldito hijo de puta!.- grité.

La veterraga se agachó y desabrochó mi pantalón, estaba llorando y trataba de patearles. Sabía que de aquí ya no podía salir y es más saldría talvez hasta embarazada y por el resto de mi vida no olvidaría este momento, talvez nunca podría tener hijos y Ryu no estará conmigo.

¿Ryu?!

No, él tiene que estar con Shin.

- Suéltala, mierda.

Los dos voltearon antes de bajar mi pantalón y Dai tenía los puños cerrados a cada lado de su cuerpo. Su mandíbula estaba muy tensa y hablaba entre dientes.

- ¿Tu novio?

- Si, Así que déjala o estarás en graves problemas, bendito hijo de Dios.- Dai comenzó a acercarse hasta el punto de golpear al señor brócoli, la veterraga se acercó para darle un puñete haciendo que Dai se tambalee un poco, recordó la cordura y siguió para devolver su ataque. El chico de atrás me comenzó a jalar y yo me resistía.

- No se juega con las mujeres.

- Mira quien lo dice.- El chico de atrás contra atacó, al parecer lo conocía.

- Suéltala, Ryan.- dijo entre dientes.

- ¿Que me darás a cambio?.

- ¿Dinero? Eso es lo que quieres, no?.- Dai se acercó un paso y se limpio la sangre que salía de su ceja.

- Eso no es suficiente - Según el chico, su nombre es Ryan, me soltó tirándome al suelo, inmediatamente me abroche el pantalón y me limpie las lágrimas.- Luego habló contigo, Dai.

Ryan desapareció, parpadee al sentir como dos brazos me cargaban como tal princesa. El camino en la calle era diferente, no le tenía miedo a nada de esto, pasábamos por las calles oscuras lentamente y sin temor.