Extraños

extra parte 1

Hola después de tanto tiempo aquí por fin esta el final alternativo de este mini-fic. Muchas gracias por todos sus votos y comentarios .

El encuentro no fue como esperaba. Victor había llegado con un hermoso peluche para su hijo y un ramo de rosas para el. Yuuri reprimió el impulso de tirarlas y dio un falso gracias y se dirigieron a la sala.

-¿Porque no quieres firmar el divorcio?-pregunto Yuuri una vez sentados.

-Porque te amo...porque estoy arrepentido de haber cometido la estupidez de engañarte...de haber abandonado a nuestro hijo...por favor perdóname...yo no puedo vivir sin ti.

-Deberías haberlo pensado antes de haberme engañado...no sabes las veces que te espere como un tonto...pensando que estabas atareado con tanto trabajo cuando la verdad me estabas engañando...dudo mucho que solo te hallas acostado una sola vez con el...fueron muchas noches en las que me pregunte en que falle...que falto para que me engañaras y me di cuenta que tu no me amabas lo suficiente...nunca me amaste suficiente.

Yuuri yo te amo...te adoro...por favor perdóname...ya no veo a Yurio...el se fue después de que cancele el contrato te juro que remediare todo el daño que cause pero por favor no me dejes-rogó Víctor acercándose a el y poniéndose de rodillas abrazó el abdomen de Yuuri.

El cuerpo de Víctor se sacudía debido a los constantes sollozos, el sufrimiento de Víctor se comparaba al de Yuuri al saber que la había cagado, había lastimado a su pareja, el único que había estado siempre allí para el. Dándole su amor, su apoyo incondicional y el le había pagado engañandole de la manera más cruel.

Yuuri dejo que las lagrimas calleran y sus manos temblorosas se alzaron y empezaron a acariciar el cabello de Víctor como muchas veces anteriormente lo había hecho.

-Esta bien Víctor, pero es la única oportunidad que tienes para demostrarme que vale la pena perdonarte.-dijo Yuuri apretando mas el rostro de Víctor a su cuerpo.

Víctor asintió aun abrazandose a el, aun llorando pero esta vez había una pequeña esperanza se que todo saldría bien.

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Al principio nada había sido fácil, Yuuri le ponía las cosas difíciles a Víctor, peleaban mucho y Yuuri muchas veces se arrepentia de haberle dado esa oportunidad a Víctor cada vez que se acordaba de que lo había engañado, pero Víctor hay estaba, invitandole a cenar, saliendo con su hijo como hace varios meses no lo hacía.

Le regalaba flores, sus chocolates y pasteles favoritos incluso varias noches le hizo Katsudon, la verdad es que Yuuri aun amaba a Víctor pero aun no quería hacérselo fácil, el Rusia le había demostrado amarle pero aun tenia miedo...

-Entonces ¿que vas a hacer? Sabes que ha hecho de todo para que vuelvas con el-dijo Pichit comiendo su pastel de fresas.

-Lo se, pero aun tengo miedo.

-Yuuri, siempre vas a tener ese miedo, pero no pierdes nada en intentarlo, si no arriesgas no ganas y tienes mucho que ganar y poco que perder, sabes que ese tipo esta loco por ti, y si, cometió la estupidez de engañarte con ese maldito...pero te ama y esta arrepentido.

-Lo se, yo también lo amo, solo que no quiero volver a sufrir.

Esa misma noche Víctor volvió a su departamento, Yuuri tenia en brazos a Haru que recién se había quedado dormido y Víctor sonrió y siguió a Yuuri al cuarto del niño.

Estaba pintado de azul y tenia varias lucecitas en forma de estrellas que adornaban las paredes, en el centro había una pequeña cama con resguardo a los lados y Víctor bajo uno y abrió las mantas para que Yuuri acostaré al niño.

Víctor beso la frente del bebe y lo arropo antes de volver a mirar a Yuuri que sonreía.

-Ha estado mas tranquilo ahora que te ve mas seguido-confeso Yuuri mirando a su hijo.

-De verdad Yuuri, lo siento mucho. Te juro que jamás voy a volver a abandonarnos como lo hice... Te amo mas que a mi vida y doy gracias a Dios por que me hallas dado otra oportunidad.

Yuuri tomo la mano de Víctor y los llevó a la otra habitación, el corazón de Víctor latio de manera frenética cuando Yuuri se acerco a el después de haber cerrado la puerta, sus manos se fueron a las caderas del menor cuando Yuuri se inclino hacia arriba y conecto sus labios con los suyos.

Gimió ante el dulce contacto, tantos meses sin besarle le hacían sentir que por fin podía respirar en paz y la opresión en su pecho desaparecía.

Gimió desesperado y pudio la entrada a su boca, metiendo su lengua en la boca de Yuuri, sintiendo su saliva mezclarse con la suya, Yuuri fue de apoco dependiendo los botones de su saco y acarició sus hombros para quitaría. Callando al suelo. Besándose como si fuera la primera vez, tocandose con deseo y amor esa noche se volvieron a entregar en cuerpo y alma, afirmando su amor bajo palabras susurrantes, con besos y caricias.

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