•1• Arkham

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Anteriormente estaba colgando de un grueso alambre de metal mientras se reía con locura a casi diez metros de altura de caer y estrellarse contra el pavimento, pero Batman llegó a arruinar la diversión. Él río, Batsy tan honorable. Después de todo él no lo dejaría morir. Ahora una patrulla lo llevaba a un lugar llamado Arkham Asylum. Sus puños estaban encadenados a unas esposas de metal que irritaban a sus muñecas. Odiaba no tener las manos libres, al no tener el control de su actual situación.  Él conocía al nombre no por qué allá estado encerrado si no porque muchos de los con quién trabajan con él, ¿cuál era su nombre? Oh, Sky o era Steven, pensó no lo recordaba nunca recordaba el nombre de sus trabajadores con tan nunca le duraban más de un par de meses y si tenían suerte duraban menos de un año. El Joker recordó cuándo Sky, le dijo que era un loco y ya no trabajaría con él y sería enviado a Arkham Asylum que allí iría una vez y jamás saldría, todos terminaban muertos y con una sonrisa tallada en sus mejillas. Y él pensaba que Arkham sería sus vacaciones, por ahora.

El oficial que tenia la patrulla de cabello negro lo miraba de reojo cada tanto con nerviosismo y su otro compañero de cabello rubio se mirada inquieto, al Joker le gustaba dar esa sensación de miedo a las personas era interesante y poderoso. No supo cuanto tiempo tardaron pero llegaron hasta un lugar que parecía un castillo cómo el de las películas de terror, estaba hecho de piedra y cemento, con un gran letrero que decía Arkham Asylum habían dos guaridas fornidos con un traje como el de las fuerzas armadas con una inscripción de número y letras clave en la puerta de metal de la entrada con armas, el Joker supuso que eran unas ametralladoras AK-45 y le gustaba. Los guardias se a cercaron a la patrulla y él policía de cabello negro habló.

—Les hemos traído un nuevo paciente—dijo nervioso.

Unos de los guardias bajo la mirada hacia al pasajero de el asiento de atrás. Los ojos obscuros y maquillados del Joker se enfrentaron con los del Joker. Y algo no le gustaba de él
Frank Boles era un guardia desde hacia seis años en Arkham, un hombre fornido y aspecto algo atractivo, su cabello peinado hacia atrás de color negro que masticaba un chicle.

El Joker miró al otro guardia éste tenía el aspecto menos atlético, era castaño de igualmente que él otro guardia su cabello marrón estaba hacia atrás. Y a ese le gustaba. Jhonny Frost tenía más de cuatro años de ser guardia y dos años que era un antiguo policía.

—Bien, pasen—

Sacaron al Joker de la patrulla y lo llevaron a un con las esposas hasta la entrada de el asilo. La entrada era grande de cristal con las iniciales del lugar A. A (ARKHAM ASYLUM), una pregunta apareció en la mente del Joker si eran aprueba de balas , y más a dentro estaba una ventanilla de cristal a pruebas de balas y una mujer de cabello obscuro en un bollo, era linda pero estaba muy maquillada y él se río entre dientes porque él se maquillaba más.

Fue llevado entré pasillo del lugar, todo estaba pintado de un aburrido color blanco hueso y eso lo odió, era tan... Aburrido. Después pasó por un lugar dónde estaban unas regaderas y le quitaron las esposas, él guardia de cabello marrón le entregó unas ropas de color naranja brillante con una toalla blanca, un jabón y algo de champú en un envase sin marca.

—Tienes diez minutos y saca toda esa mierda de tu rostro —dijo el otro guardia.

Lo dejaron soló, y se quitó la ropa que traía. La ráfaga de agua tocó su cuerpo y sólo un suspiro cansado, ¿desde cuándo se había bañado la última vez? Él no lo recordaba, cuándo buscaba un escondite no le importaba si había una ducha o no, sólo buscaba una cama para descansar. Miro las gruesas gotas de agua que intentaban limpiarlo agarró el jabón e hizo espuma con sus manos y ayudó al agua a limpiarse la cara, no por qué ese guardia idiota le dijo si no porque ya tenía un tiempo sin versé sin aquel maquillaje. El Joker miró al champú y lo olió era tan limpio y eso le enfermaba. Colocó un poco de aquel líquido y se lo puso en su cabeza, casi como su cara el tinte verde salió aunque no del todo. En broma dejo caer el jabón y se río.

—Ups, esperó que nadie intentó tener su propio diversión conmigo —dijo con una pequeña risa.

Al vestirse miro con odió la ropa era tan simple, sin embargo el color pasaba, un naranja brillante y se lo puso. Después de la ducha fue llevado a un nuevo lugar en otro pasillo directamente a una habitación con una mesa de metal atornillada en el piso juntos mesas a cada extremo de la mesa y allí estaba un hombre de edad avanzada.

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El asilo mental Elizabeth Arkham Asylum,  fue fundado por el bisabuelo de Jeremy Arkham, actual dueño y director, un hombre de apariencia ya agotado por su trabajo y las responsabilidades, de cabello obscuro con canas y ojos color café. El asilo era uno de los más temidos de toda la ciudad Gótica y en los Estados Unidos por su rica colección de villanos internados. Y en frente de él estaba aquél hombre con imagen de payaso, el Joker, él nuevo paciente y más llamativo de el asilo. El Joker  un hombre perturbado mentalmente sin embargo el doctor Arkham creía que él era un genio - algo cómo uno loco -, con una mente  que era un enigma y llena de misterio.  Enfrentarse a alguien cómo él parecía un suicidio no sólo por su aspecto físico aterrador, si no por su siniestra mente, Jeremy Arkham nunca pensaría que de tras de esa máscara de pintura facial habría un hombre joven a finales de sus veinte y al principio de sus treinta, con una horrible cicatriz que comenzaba desde sus labios y terminaba hasta sus mejillas, también tenía unos cuántas más pequeñas en su labio inferior, casi podía decirse que anteriormente era castaño, pero ahora era una extraña mezcla de castaño sucio y verde musgoso.

—Primera sesión, con él paciente número 801, nombrado así mismo Joker. Buenos días paciente 801, soy  él doctor Arkham, y desde ahora comenzará su recuperación para su ingreso a la sociedad—

El Joker soltó una risa irónica.

—¿Algo gracioso, paciente 801?— preguntó Arkham con una ceja alzada.

— Ahora que lo dice sí doc. ¿Cómo puede reparar algo que ya ésta roto? Y no estoy interesado en recuperarme. Y no es paciente 801, es Joker, aunque también aceptó agente de caos — respondió mientras lo miraba con intensidad.

—Me está diciendo que no desea ser una persona sana...— preguntó con su ceño fruncido.

—Yo creo doc, que no hay personas realmente sanas, si no algunas muy enfermas, digo quien es realmente sano —, en cierta manera Arkham vio su lógica retorcida.

— Así que piensa que usted esta sanó —

—Mmm... Muy buena pregunta, pero yo tengo una de para usted, sí.  Miró todo y veo lo que la gente normal y sana no lo hace —, él se estiró el cuello. Ya se había aburrido, en un principió pensó que Arkham sería interesante, pero no, sólo aburridas preguntas.

—¿Aburrido paciente 801?— preguntó molesto Arkham.

Joker hizo una mueca y lo miró.
— Sí — respondió con una sonrisa torcida

Y con eso Arkham dio terminada por la sesión molesto.

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Después de aquella decepción de Arkham fue llevado a otro lugar donde aparecieron unas celdas y decidió aprender aquéllos pasillos, aquellas celdas eran cada una de metal reforzado y una pequeña ventanilla de metal, miró a las otras celdas cada una decían unos número y los nombres. Edward Nigma, decía uno, él acertijo pensó, otro decía Waylon Jones, Cocodrilo asesino... No alcanzó a verlos todos pero era interesante.
Adentro había una cama de cemento con un colchón nuevo al parecer, un baño, un lavamanos con un pequeño tubo de pasta dental y un cepillo de color púrpura, al menos tenía algo de color, por excepción de las paredes blancas y aburridas, deseaba pintarlas con sangre de alguien y él primero iba a ser ese guardia de cabello negro.

Arlequín |Joker & Harley|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora