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Hoy fue un día neutro.

Al llegar el descanso, Sebastian entro a mi salón para decirme que no podría quedarse hoy, no tengo idea por que, pero imagino que fue por sus amigos.

Salió y yo me quede junto con 2 de mis mejores amigas.

Casi al finalizar el descanso, vi a Sebastián por una de las ventanas y acto seguido entro a mi salón, cuando me vio su rostro cambio, y pregunto que pasaba, por supuesto conteste lo que todos "Nada", pero el no lo creyó, y acertó, pues si me pasaba algo, estaba triste puesto que el no se había quedado conmigo pero no puedo pedirle y mucho menos obligarlo a eso, el tiene amigos y no puedo alejarlo de ellos solo por mis tontas ideas.

Comenzamos a platicar, y el como todo el tiempo me hizo enojar recordándome una historia que no me enorgullezco de haber vivido, pero no me arrepiento de mis actos.

Pienso que no es justo dejarlos así, les contare de que historia se trata.

Veran, cuando comencé a darme cuenta de que tener una relación de mas que amigos con Sebastian se estaba volviendo casi imposible, sentí la necesidad de buscar a alguien mas, y justo en ese momento, cometí la estupidez de fijarme en Martín, el mejor amigo de Sebastián, si como lo leen, soy una Perra lo sé, el punto es que las cosas se comenzaron a dar entre Martín y yo, nos hablábamos frecuentemente, nos saludábamos a diario por los pasillos y nos sonreíamos.

Un día como todo los demás, yo me paseaba por el salón de clases de Martín, el se encontraba en una de las ventanas y decidí acercarme a hablarle y fue lo peor que pude haber hecho, pues pasamos de estar peleando divertidamente por un objeto a un beso, así es lo besé, sin importarme absolutamente nada, me despedí y salí casi corriendo de ahí. Lo peor de todo, es que esa no fue la única vez, lo repetíamos cada vez que se nos presentaba la oportunidad, ¿que estaba pensando?, ni siquiera yo lo se.

Después de un tiempo, comencé a darme cuenta de muchas cosas, nuestros besos ya no eran lindos ni tiernos, sino llenos de morbo, en pocas palabras eran asquerosos, esto no era lo que yo en realidad quería, yo quería una linda relación, y ahí empezaron los problemas, Martín comenzó a comportarse extraño, siempre quería besarme e incluso a la fuerza, intentaba tocarme y fue ahí cuando reflexione, me di cuenta de todo lo que estaba pasando y lo que estaba haciendo.

En ese momento estaba mas que confundida, y me sentía sucia, me daba náuseas observar mi reflejo, me sentí una idiota, como una basura.

Decidí contarle a Sebastián sobre todo lo que estaba pasando, pero esto solo empeoró las cosas, cuando dije Lo besé, su rostro cambio completamente, antes sonreía y ahora solo estaba neutro, y eso me preocupaba. Nuestra relación como amigos empeoró y yo sentí que ese era el fin, estaba segura de que jamás me volvería a dirigir la palabra, en ese momento me sentí la peor persona del mundo, me sentí triste y decepcionada de mi misma, me sentía como una maldita perra.

Pasó el tiempo y deje de tener comunicación con Martín, yo lo odiaba y aún lo hago, me causa náuseas verlo por que el es una persona totalmente desagradable.

Es por eso que no me gusta recordar que lo hice y que pude haberlo evitado.

Pero Sebastián, cada vez que puede me lo recuerda, y eso me hace enojar, pero eso es lo peor, el dice que hacerme enojar lo hace feliz, que es su deber y que tiene cumplirlo.

Hoy le pregunté por que lo hacía, y su respuesta fue, "Por que Hacerte Enojar Es Una Forma De Demostrarte Que Te Quiero". Lo dijo de una manera tan dulce y con una sonrisa en el rostro, que hizo que mi enojo se esfumara.

Hay veces que lo odio, por que el tiene el poder de causar ese efecto en mi.

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Espero les haya gustado mucho.

Les doy permiso de que me odien por lo que hice. (Pero sigan leyendo jsjs).

Esta fue una lección de la que aprendí mucho y eso me hizo cambiar. 



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