Efectos anestésicos

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Despertaba y lo primero que me llegaba a la mente era ella. Era esa hermosa cara y mucho más esa sonrisa.
Me vestía pensado en que tal vez le gustará mi outfit. Salia y caminaba directo a mi trabajo (por cierto, estoy trabajando en un despacho de abogados) tomaba el bus y era hay dónde escribía, era hay dónde las ideas llegaban y llegaban de a golpe. Solía sentarme hasta atrás en la esquina de las puertas. Poder observar todo, los árboles., las casas, las personas caminando y claro muchas cabezas. Sus peinados y el lugar donde siempre les gustaba sentarse. Hay dónde las ideas crecían más y más. Amaba subirme en los camiones que tenían ventanas sin ningún estampado. Me hacían inspirarme más y ahora mismo. Estoy en uno dónde las ventanas me hacen sentir libre.
Llegaba a mi trabajo, encendia la computadora dónde suelo trabajar y después el módem. Habría la puerta del despacho y a empezar a trabajar. Archivaba  facturas de clientes o si no hacía sus pólizas de diario o cosas que el cliente hiciera. Barría fuera del despacho porque hay había un árbol muy lindo y siempre tiraba hojas (que logica). Pero no dejaba de pensar en ella. Estaba viva en mi mente, pensando que tal vez estuviera dormida, comiendo, haciendo tarea o pesando en mi.
Salia, iba de vez en cuando a un comedor comunitario donde la comida aquí en México cuenta  diez pesos. Caminaba hacia mi escuela un bachilleres, aproximadamente me hacía veinte o veinticinco minutos. Llegaba y solía esperarla a fuera de la escuela con muchos chavos y chavas que conocía. Ella bajaba de una combi. Recuerdo bien sus movimientos,  siempre tenía su mochila en la mano izquierda detrás de espalda colgando por su hombro y me miraba al hacerlo. La observaba y decía como puede gustarme ella, como es que la amo y al estar muy cerca de mi la besaba, la abrazaba y la amaba cada día más.
 
Solíamos entrar tomadas de la mano, sentía las miradas de los demás me daban igual. Lo primero que revisaba era dónde le tocaba para ir a dejarla pero como siempre era bien berrinchuda ella me iba a decir dejar y eso era muy lindo.
Llegaba la hora de entrar a clases, tenia esa maña de rayas las bancas con sus iniciales.
Quiero que sepan que la quiero mucho, que habrá alguien que marque una parte de su vida. Dejará una huella en su corazón y jamas podrá ser borrada.

El Amor A Una ManeraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora