Capitulo 1

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Capitulo 1:

-Llegas antes de las…– dijo mi madre antes de que pudiera abrir la puerta.

-Si, si lo se, antes de las 10:00 p.m.-dije interrumpiéndola, rodee los ojos, no se ni para que se molestaba en ponerme una hora de llegada si sabia perfectamente que nunca la cumplía

- adiós mama- dije antes de cerrar la puerta.

-¡Adiós!- escuche que grito desde el otro lado de la puerta.

Y allá vamos, esta mañana me llamaron y me dijeron que había una carrera y como todo el mundo sabe no me la perdería por nada, mi pasión son las carreras de autos y para ser sincera soy muy buena en ello, desde que mis padres se separaron empecé a correr y aunque ninguno de ellos sabe (ni se enterara) practico muy a menudo. Llegue al lugar de encuentro que era a las afueras de la ciudad, una carretera desolada y nuestro lugar desde hace años. Aparque y pude ver a Ian uno de mis mejores amigos y colegas, baje de mi Porche Turbo Amarillo sintiendo una mirada sobre mi, pero no le preste atención a eso y camine hasta donde mis colegas.

-Hola agente Broggie- Me dijo Seth.

-Ja, ja muy gracioso- dije *nótese el sarcasmo*

- puede que mi nombre sea Sya, ríanse si quieren, pero al menos no soy una marca de calzoncillos –Seth dejo de reír mientras que Ian soltaba una carcajada.

-Pues tú tiene…-fue interrumpido por el megáfono el cual anunciaba que la carrera empezaría en pocos minutos.

-¿Estas lista?-me pregunto Seth

-Siempre- Mientras caminaba hacia el auto sentí muchas miradas sobre mi, y pude notar que el auto de Ian y Seth estaban preparados para correr. Me voltee hacia ellos.

-¿Van a correr?- pregunte, sabia que ni en un millón de años me ganarían

-Si, ¿problema?- pregunto Ian frunciendo el ceño

-No para nada, suerte, la necesitaran- me voltee y me encontré con alguien que no reconocí ya que su casco me impedía ver su rostro, iba a seguir derecho pero este me detuvo.

-Oh, no sabía que también habían porrista.

-¿Disculpa? -mire para atrás como diciendo ¿me hablas a mi?

-Oh lo siento, eres la que trae las bebidas ¿verdad?

-¡¡ ¿PERDON?!!-grite mas duro de lo que hubiera querido, por lo que todos voltearon a mirarnos

-Si mira tráeme una Coca-Cola fría. Gracias.- me ordeno mientras que de fondo se escuchaban cosas como “oooh”, “¿quien será ese tipo?”, “en la que se metió” y cosas por el estilo.

- ¿Qué no sabes quien soy yo?- pregunte mas que indignada

-¿Debería saberlo?, oye pero en serio tengo sed, es para hoy- dijo apurándome

-Mira como sea que te llames. Primero, si quieres una bebida te la traes solito porque para algo tienes piernas. Segundo, para tu información este un lugar para correr, practicar y divertirse, así que si no vas a hacer ninguna de esas cosas puedes perfectamente irte que nadie te esta obligando a quedarte. Y tercero, yo estoy aquí porque soy una de las mejores corredoras que hay, no para obedecerle a un idiota que se cree la última Coca-Cola del desierto.- dije extremadamente molesta.

-¿Con que te crees que eres una de las mejores corredoras que hay? Cuanto te apuesto a que te gano con los ojos cerrados.- dijo desafiándome el muy iluso

-Jajajá, ¿Qué quieres perder?-dije muy confiada de mi misma pues sabia que ganaría -No, ¿Qué me darás cundo gane?

-¿Qué quieres?

-¿Qué quieres tu?

-Las llaves de tu auto- dijimos al mismo tiempo

-Entonces ¿es una apuesta?- pregunto extendiéndome la mano para que la estrechara.

Por un momento pensé ¿Qué tal si no gano?, me esforcé mucho para conseguir ese auto, trabaje por meses en una horrible cafetería y tuve que rogarle a mi padre que me diera la mitad de lo que costaba ya que era un Ferrari Enzo y aunque reuniera todos mis ahorros y mi sueldo no alcanzaba a recaudar ni la mitad de lo que valía. Pero como yo soy una dura, experta (y sobre todo orgullosa) eso no me impidió apostar a mi bebe.

-Es una apuesta- dije mientras estrechaba nuestras manos.

(…) Estábamos por empezar la carrera, eran diez vueltas, diez corredores y un solo ganador (quien tenia que ser yo, por que ni loca le doy a ese viejo engreído mi bebe). Estábamos todos listos en la línea de salida, cuando se escucha el megáfono: En sus marcas, listos, ¡¡FUERA!!

Presione el acelerador con todas mis fuerzas, y tome la delantera, sonaron las ruedas de los demás detrás mio, las cuatro primera vueltas fueron normales todos detrás (como siempre), la quinta vuelta era demasiado cerrada y pude ver por el retrovisor a ese idiota, acelere tanto que podría jurar que iba a mas de 200 km/h, al parecer al señorito no le pareció la idea ya que al llegar a línea recta tomo velocidad e intento sobrepasarme. Estuvo pisándome los talones por la sexta y séptima vuelta y en un descuido ya estaba delante mio.

-¡¡Hijo de puta!!- acelere aun mas y durante las dos siguientes vueltas (la octava y novena) no lo perdí de vista, estaba buscando un descuido por su parte pero al parecer este imbécil si sabe correr; en la ultima vuelta, y para mi suerte vi la oportunidad de adelantarlo, íbamos a la par, a toda velocidad y justo llegamos a la línea de meta.

!!!!MIERDA!!!!

Frene en seco y pude oír las campanas que significaba que había terminado la carrera, baje de mi auto y espere ansiosa a que dieran los resultados. Parecía un empate pero siempre se aseguraban revisando la grabación. Camine hasta el lado de las grandes pantallas que pasaban los últimos minutos de la carrera, (mientras rogaba para que no tuviera que darle mis auto a ese). Todos esperaban alrededor de estas a que anunciaran al ganador.

-!!! Y DENUEVO NUESTRA GANADORA SYA BROGGIE!!!!

Sonreí, ahora no solo conservo a mi bebe también tengo ¡¡auto nuevo!! Mis amigos gritaron y me fueron a abrazar.

-De nuevo ganadora- grito Seth, me abrazo.

-Ya deja lo maricon, ¿quieres? Cuando me soltó divise al ese creído sacándose el casco.

Y NO LO PUEDO CREER ES…

Passion,vitesse et vengeanceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora