WhatsApp Desconocido - Chrisdiel |Terminada|Editando|

Capitulo 25

Narra zabdiel.

¿Nervios?, pff estoy prácticamente al borde de un ataque. No creí que el me volvería a hablar, después de todo yo le pedí que nos alejáramos. Pero lo hizo y no pude evitar gritar de alegría, mi corazón latiendo desbocadamente con cada minuto que pasaba. Estoy fuera de su casa pero tengo un presentimiento, no se si es bueno o malo pero lo tengo.

Veo la puerta abrirse y la madre de chris sale por esta.

-Oh zabdiel, hace mucho que no venias por aquí.- Me dice sonriendo.- portence bien, dile a chris que llegare un poco tarde, adiós cariño.

Y se fue, yo entre en la casa. Mis manos temblaban por los nervios, escuche un ruido desde el segundo piso y luego a alguien bajando las escaleras para segundos después Christopher aparecer frente a mi, le sonreí a modo de saludo la verdad es que no puedo hablar estor estático en mi puesto.

-Creí que no vendrias.- Me dice, para luego dirigir su vista a los dos potes de helado en mis brazos, una henorme sonrisa crese en sus labios, todo en mi tiembla, había olvidado lo que sentía cada vez que el me sonreía.

-¿Quieres?.- Le digo moviendo un pote de helado en su dirección, el aciente feliz, siguiendo el pote cual gato siguiendo una luz, me río por la comparación que eh hecho.

-Vamos, dame a mi bebe.- Me dice estirando sus brazos y haciendo un tierno puchero.

Antes de venir aquí creí que todo seria diferente, que no habrían juegos o temas de conversación o que quizá todo seria incomodo. Pero no aquí estamos, yo molestándolo como siempre y el a mi lado tratando de quitarme el pote de helado, estiro mi brazo para que no pueda alcanzarlo y el comienza a saltar.

-Pequeñito.- le digo, burlandome de el.

Este me mira y enarca una ceja para acto seguido, cruzar sus brazos en su pecho y mirarme completamente serio.

-Yo no soy pequeño, lo que pasa es que tu eres un gigante.- Me dice sacándome la lengua, caminando hacia el sillón y sentándose en este.

Voy a su lado, le entrego su pote de helado y este comienza a aplaudir y chillar de felicidad, yo solo puedo sonreír. Extrañaba estos momentos con el.

-Voy por cucharas, pon la película.- Me dice para levantarse y y caminar hacia la cocina pero antes de salir por completo de la sala se guira y me apunta con su dedo.- Pobre de ti que cuando vuelva mi helado no este donde lo deje.

Dicho eso se va dando salitos hacia la cocina, recuerdo una vez en la que llegue sin avisar con dos potes de helado. Uno con su sabor favorito y el otro del mio, estábamos viendo una película mientras la pizza llegaba. Y cuando chris fue a recibir la pizza yo le escondí el helado. Termine con mi ropa mojada, temblando de frío y un chris riendo mientras comía su helado.

Coloco la película, sin prestar atención realmente, cuando siento el sillón hundirse a mi lado y algo helado en mi mejilla. Veo por el rabillo del ojo y chris tiene la cuchara puesta en mi mejilla mientras ve embobadamente la película que esta comenzando. Una sonrisa formándose en sus labios.

-Yo antes de ti.- me dice riendo.- creó que me traje unas películas de mi prima.

Yo solo le sonrió, y quito la cuchara de sus manos.

(...)

Narra Christopher.

Estoy nervioso, mucho a decir verdad. La película ya a terminado, ahora solo comemos helado y conversamos de cosas triviales, me cuenta sobre la universidad y cosas así.

Estoy tan nervioso que en un intento por quitarle lo poco que le queda de helado le doy vuelta el pote en sima.

-Yo lo siento mucho.- Le digo.- si quieres puedes ir a ducharte yo te dejare un poco de ropa que me queda grande.

El solo se ríe y se para. Sube a mi habitación y yo lo sigo, entro en esta cuando escucho el ruido de la ducha. Busco entre mi ropa unos boxers y una sudadera, justo cuando voy a buscarle un pantalón la puerta es abierta. El vapor sale del baño y luego zabdiel, envuelto con una toalla a su cinturas, gotas de agua caen de su cabello.

Estoy shokeado ante la majestuosa visión, lo miro a los ojos y este me sonríe. No se de donde saco el valor de acercarme a el.

-T-Te tengo un poco se ropa.- le digo, siento mis mejillas arder.

El aciente, me detengo cuando estoy serca de el, llevo mi mano a su mejilla y la acarició, el cierra sus ojos. Me pongo de puntillas y me acerco a su boca, lo beso, no se si se pueda catalogar como beso un pequeño rose. Entonces abre sus ojos y me besa. Sus manos van a mi cintura y mis brazos a su cuello, nos separamos por falta de aire pero sólo pasa un momento hasta que el vuelva a unir nuestros labios

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Las quierooo

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