¡¿Tengo un Harem?! - YS (RivalesMasculinos y Tu) [actualizaciones lentas]

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Ganó que Rayis busque sus audífonos. No tendrán su bonus v:
sorry, but not sorry >:3

Rayita POV

Apenas salir del baño volví a mi misión anterior, la cual era la de encontrar aquella cosa importante para mí.

Pregunté primero a un grupo de chicas reunidas en círculo cerca de las máquinas expendedoras, a lo cual estas con voces animadas y MUY chillonas hicieron todo un lío de comentarios para luego de casi veinte minutos decir que no sabían.

Logré escabullirme de esas mariposas sociales luego de que tratarán de integrarme en su conversación.

Gracias por hacerme perder mi tiempo, fresitas.

Después fui hacia el patio central con la fuente, dónde pude ver a 2 chicos de cabello negro y a la chica pelinegra de mi clase.

Uno de los chicos se encontraba leyendo tranquilamente sentado al borde de la fuente. Mientras que los otros 2 estaban observando al que estaba en la fuente.

Me acerqué a ambos adolescentes "escondidos" detrás del árbol. El chico junto a mi compañera de clases se veía menor, seguramente de algún grado inferior.

La morena se encontraba sumida en sus pensamientos, y el pequeño moreno tenía apariencia de nunca poder parar de hablar o al menos tener mucha energía. Hay posibilidad de que sea un shota :v7

Sonreí con algo de malicia, acercándome a ellos con cautela ya que aún no se percataban de mi presencia.

- ¡Hola! - exclame con una gran sonrisa en mi rostro, haciéndoles sobresaltar a ambos y que el pequeñín soltara un grito, muy, muy, muy, MUUUUY, afeminado.

No mentiré, me reí feo.

El chico en la fuente con aura de "puto" levantó la mirada de su libro hacia dónde nos "ocultábamos" y rió levemente causando un gran sonrojo en la pelinegra.

- ya pensaba que era raro no encontrar a Hanakō parloteando a mi lado - dijo el pelinegro mayor haciendo que el chico shota se sonrojara de la vergüenza. Calme mis risas.

- ¡n-no digas eso, nii-chan! - exclamó el pequeño, tapando su ruborizada cara con sus manos.

¡Basta, moriré de ternura!

- No pensé que estarías en compañía de 2 lindas chicas, hermano.

El comentario hizo que mi compañera de clases se sonrojara mucho más de lo que ya estaba, pero luego por alguna razón empezó a verme con ganas de sed asesina. Yo ni reaccioné.

Aaahh vale, a ella le gusta el "puto". Le ayudare un poco.

- sólo venía a preguntar ¿de casualidad no habrían visto unos auriculares inalámbricos de color morado con una nota musical blanca? - cuestioné, a lo cual todos negaron con la cabeza, resople con frustración - bueno, gracias de todos modos.

- podemos ayudarte a buscar, si quieres - dijo con amabilidad el chico con el libro en sus manos. Ahora a la pelinegra la rodeaba un aura de "te mataré lenta y dolorosamente".

- no, no, no, tranquilo, no hay necesidad de eso - sonreí y tomé a Hanakō del brazo - sólo pediré prestada la presencia de tu hermano para saber dónde queda la sala de profesores, chau~

Pasé al lado de mi pelinegra compañera de clases con una sonrisa pícara en los labios.

- de nada~ - susurré cerca de su oído, haciéndola cambiar su expresión de "te voy a matar" a una de "¡madre mía, matenme o me volveré un tomate!"