Los primeros cambios

402 38 8
                                    

Hoshitani no podía entender muy bien lo que había comenzado a suceder a su alrededor. Nayuki parecía haberlo reemplazado por Ugawa, mientras que Tsukigami, Tengenji, Tatsumi y Kuga habían comenzado a acercarse más a él.

Era bastante extraña la forma en la que se tornaba el ambiente.

Al despertar, Nayuki había salido a encontrarse con Ugawa, en lugar de despertarlo a él, como siempre hacía; esa pequeña acción había sorprendido bastante al castaño. Después de eso, antes de poder encontrarse con Ageha, Kuga lo había retenido con una larga conversación sobre lo mucho que habían avanzado; terminó yendo a clases en compañía del azabache y del pelimorado.

Durante el entrenamiento, Tatsumi no había dejado de estar cerca de Hoshitani. Alabándolo por sus avances e invitándolo a salir a algún lado; mientras lo hacía, Sawatari había permanecido detrás de él en total silencio, como si fuera la sombra del rubio.

Tsukigami había vuelto a repasar lineas con él después de los ensayos, y luego Tengenji le pidió practicar con él por un rato. Ageha estuvo a su lado después de eso.

No era como si a Hoshitani le molestara la repentina atención, pero no podía evitar que era bastante extraño. Incluso se atrevía a decir que, durante los ensayos, Hiragi parecía haberle estado poniendo demasiada atención, aunque posiblemente sólo era idea suya.

También había sentido que alguien lo había estado mirando con recelo la mayor parte del día.

—Oh, Hoshitani-kun —Kuga llegó con una bolsa de papel en una de sus manos. Seguramente planeaba invitarle algún dulce al castaño, pero apenas se acercó, Ageha se acercó más al susodicho, como diciéndole al pelimorado que mantuviera distancias.

Por supuesto, Hoshitani no notó las intenciones de la acción del azabache.

—Kuga-kun, qué bien que estás aquí —dijo alejándose del azabache, quedando a misma distancia de él y el pelimorado—. Riku-kun, ¿no te parece divertido estar con Kuga un rato? Me había olvidado de que tenía cosas por hacer, los veo en un rato —se despidió sin darles tiempo de contestar a los otros dos.

Hoshitani agradecía la aparición de Kuga, ya que no se le hubiera ocurrido una forma de decirle a Ageha que lo dejara solo por un rato. 

Estar rodeado de sus amigos le gustaba, pero no se podría sentir tranquilo con Nayuki ignorándolo todo el rato. Lo había pensado desde el inicio del día, debía de disculparse por lo que fuera con él. Si estaba enojado, haría lo que sea para pedir su perdón.

Como todo el tiempo, Hoshitani había estado en compañía de él, no podía evitar sentirse extraño sin éste a su alrededor. Se sentía contento de que sus amigos fueran amables y todo, pero poco importaba eso si su mejor amigo estaba enojado con él.

Siguió corriendo durante unos minutos más, hasta que por fin dio, por pura casualidad, con Nayuki. Quien, como era de esperar, estaba al lado de Ugawa; riendo.

—¿Puedes sentirlo?

Hoshitani se sobresaltó al oír de repente una voz detrás de él.

—¿Hachiya-kun?

—¿Puedes sentirlo? —preguntó nuevamente con una extraña mirada en los ojos—. El vacío que se siente cuando la persona que siempre está a tu se va con alguien más.

El castaño lo miró sin entender, pero antes de poder preguntar, éste se alejó precipitadamente. Hoshitani se quedó parado en el lugar que estaba, sin poder dejar de pensar que todo en verdad era bastante extraño.


——

–––––––

-----------

Hola~ Bueno, tengo mis dudas sobre éste capítulo ya que, bueno, no sé. No me siento satisfecha por cómo quedó (la narración en especial) pero ya ustedes me dirán.

Gracias por leer, y no se olviden de dejar sus opiniones, consejos y votos

Nos leemos luego ^^)/

El fugaz romance de la mariposa negra (Starmyu) (Yaoi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora