El Ente

Preguntame

Voy subiendo a mi cuarto y me quedo en seco parado frente al final de la escalera...
Es la niña otra vez, esa pequeña de blanco de nuevo y tengo miedo porque se que no es una coincidencia, no es posible que de una manera lógica ella se encuentre parada frente a mi en este mismo instante y... Oh no me señala la pared detrás de mi y entiendo a que porque siente como un viento frío recorre mi cuello y toda mi piel se eriza al escuchar:
"Jonathan, pobre Jonathan"
Me paralicé y solo podía rezar en mi cabeza luchando por no dejar que el miedo me nuble la mente y va funcionando, de a poco voy sintiendo el cuerpo menos tenso aunque el aire sigue  tenebroso y mi respiración no deja de parecer motor en marcha, ¿Que hice?, ¿Por qué me llama? ¿Que quiere?, son preguntas que recorren en mi cabeza entre los espacios después de cada Padre Nuestro y solo quiero llorar porque no aguanto la presión que siento, pero entonces se detiene y me siento libre pero no calmado, como si me hubieran empujado hacía delante bruscamente como si se hubiera desprendido de mis hombros con tal violencia que mis rodillas cayeron en un estallido de dolor contra el suelo y se fue...
No sin antes dejarme un extra de terror con su frase de despedida "Preguntale a ella"
Me levante de inmediato y corrí hacia la habitación de mis padres por ese instinto fallido de buscar protección, estaba solo en casa ¿Quien podría abrazarme entonces?
Solo lloré y lloré por mucho tiempo porque sabía que esto solo era el comienzo y no estaba listo para enfrentarme a lo que por herencia me tenia  que pasar...