◦•●◉✿ Todo en totalidad es narrado por JungKoook ◦•●◉✿
Perder el amor de tu vida no debe ser fácil para nadie, y menos si lo amaste con locura y deseo, y debe ser aún peor que sólo tu hayas amado de esa forma, y que la otra parte sólo jugo, y que vivas cada día siendo siempre un amorío más de aquella persona.
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Jimin, su simple nombre me hacía caer rendido, su cuerpo era una de las maravillas de este mundo que yo había tenido la suerte de descubrir, así como también había tenido suerte de hacerlo mi novio durante 5 años hermosos, aunque en realidad fueron 7 años, pero en los últimos 2 todo parecía confuso, parecíamos extraños viviendo en una misma casa, compartiendo una cama llena de incomodidades y pesares.
Empezó a dormir fuera de casa cuando teníamos duras discusiones, y de alguna manera inocente, yo pensaba que de esa forma él calmaba la molestia que yo le hacía pasar con mis frecuentes quejas sobre lo mal que veía nuestra relación.
Hablaba con mi mejor amigo, Jin, sobre lo que estaba pasando, y él siempre me decía lo mismo; ojala le hubiera creído todas las veces que me lo repetía.
— Mh, JungKook, ¿No te has planteado la posibilidad de que Jimin tenga a alguien más? Puede que él haya dejado de amarte con la fuerza que lo hacía antes, y esto último no está mal, las parejas no duran para siempre y es parte de la vida aceptarlo. No quiero que salgas lastimado pequeño, así que deberías tratar de hablar sobre ese tema seriamente con él.
Me negaba a creer que mi Chimchim tuviese a otra persona, era imposible que de un día para otro dejara de amarme como siempre me había demostrado; pero todo era cada vez peor y yo seguía sufriendo en silencio.
Antes de que todo se fuera a la mierda, celebramos nuestro 7to año juntos, fuimos a la playa, llevamos comida e incluso compramos un pequeño pastel para ambos, me obsequio hermosas flores incluso.
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Todo parecía ir tan bien, compartimos besos y caricias mientras las olas tocaban lentamente la orilla y el sol poco a poco se ocultaba, ese día yo hice el amor como la primera vez con la persona que más amaba en el mundo, ese día quizá una parte de mi se fue a su lado y aún lo sigue protegiendo como siempre lo hice. Regresamos a casa poco después, y como saber que algo tan simple como una llamada podría arruinar años de relación, años de un amor infinito. Su teléfono comenzó a sonar, él respondió con rapidez, salio de la habitación y yo simplemente no pude soportar mi curiosidad. Me pegue con cautela a la puerta para escuchar.
— Te he dicho muchas veces que no me llames a esta hora...— Su voz era por muy poco molesta a pesar de reclamar aquello. — Hey, te veré mañana donde siempre... Sí, no te preocupes... Vamos, sabes que te quiero, no faltaría por nada del mundo... Nos vemos. — Jimin termino de hablar y yo terminaba de odiarme por ser tan ingenuo; regresa a la cama donde me envolví con las sabanas, donde deje salir silenciosamente lágrimas que quemaban mi ser. Se recostó a mi lado y me abrazo por la cintura, pegando su cuerpo al mío, matándome poco a poco.
