Oh Dear Partner.

Capitulo 4

La campanilla sonó tras pasar por la puerta. Avisando que otra persona había llegado,ladridos y demás sonidos se escuchaban en aquella tienda,todo tipo de animal estaba ahí,una señora se acercó y le sonrió cálidamente,tal y como su madre lo hacia,esto le trajo demasiados recuerdos de cuando pasaba todo el tiempo del mundo con ella, JungKook no tardo en sentirse frustrado por aquellos recuerdos que hasta la fecha y para siempre dolerán.
–¿Buscaba algo en especial,jóven?– ella seguía parada frente a el,sin mover algún músculo, esperando alguna respuesta de el.
–Perros.– ella camino hacia una gran vitrina,donde tenían a varias razas y él solo se dedicaba a observar con atención a cual llevaría con el.
–Por ahora solo tenemos a estos,como por ejemplo este.– señalo a uno– es un perro muy fiel,y estoy segura que no se arrepentirá de llevarlo.

Ella volvía a dar esa sonrisa,que para Kook era algo insoportable. El pequeño animal movía una y otra vez su cola, indicando que estaba feliz. Dejo de mirar al ser vivo para observar a otros,este primero había llamado algo su atención que los demás no.
–Lo llevaré. – habló y la señora aplaudió a lo bajo.
–Buena elección muchacho.

Llevaba a Donut en sus brazos,y este no dejaba de moverse ya que quería lamer la cara de JungKook. Al ir distraído cayó al suelo chocando con alguien,el se aferró al cachorro para que no se escapara.

–¡Hombre! lo siento.– se levantó y le extendió una mano a JungKook para que igual se pusiera de pie. El dejo al tipo misterioso con la mano extendida y se levantó por su propia cuenta sujetando bien a su nueva mascota. Quizá el fuera malo con las personas,pero con los animales era lo contrario ya que ellos no le habían hecho el daño que hasta ahora lo tenía en un trance. 
–Soy TaeHyung,un gusto.– el chico nuevo esperaba respuesta del joven,lo cual no quería responder,sin embargo TaeHyung aún seguía esperando alguna palabra.
–JungKook.– el sacudió su trasero removiendo todo el polvo que había quedado en su ropa.
–¡Mira que preciosura!– el chico tomo a Donut en sus brazos y el perro movía alegremente la cola pasando su lengua por el rostro de TaeHyung.– ¿cuál es su nombre?– el seguia acariciando a Donut con esa sonrisa que provocaba el perro.
–Donut.
A JungKook nunca le gusto hablar con las personas desde lo ocurrido,es como su toda la felicidad que antes invadía todo su ser fuera exprimida en un dos por tres. Todo su mundo había muerto desde ese día.

Habían pasado varios minutos y por fin le había devuelto a su mascota,el lo tomo en brazos y Don paso por primera vez su lengua por la mejilla de el. El hizo una mueca. Al parecer a su compañero se le hacia tarde para algo,ya que se le veía la cara de preocupado.
–Un gusto JungKook,nos vemos luego.– TaeHyung le dio una sonrisa y poco a poco se alejo del lugar. Por un lado el joven seguía su camino, Donut estaba muy inquieto,moviéndose de un lado a otro y rasguñando sin querer a su amo.

Cerro la puerta dejando libre a la nueva alegría del hogar,el salio corriendo por la casa olfateando todo lo que se le ponía en su camino. Kook sólo miraba a Donut moverse como un rayo, por último este se orino en la alfombra que adornaba la sala. Jungkook miro impaciente al perro y se toco la frente.

–¡Aquí no,sucio!– exclamó llamando la atención al animalito. Seguido con una cara de tristeza,la criatura fue hacia su nuevo amo. Se posó en sus pies,como si estuviera pidiendo algún tipo de disculpa. El sabía que con esa cara tan tierna no se podía enojar con el,y mucho menos castigarlo ya que el no sabía. Era como un bebé (bueno lo es) y tenia que estar a su cuidado,para siempre.
–Vamos amigo,no pongas esa cara.– Tomó a Donut en sus brazos y lo llevo hasta el patio y explorara más de lo que ya había hecho. Sin más, llegando,el perro salió disparado para de nuevo olfatear toda la casa. Las plantas,las sillas y todo lo que se encontraba ahí,estaba siendo olfateado por el cachorro. Miró unos minutos la alberca que tenia JungKook, metió una pata al agua y rápidamente la saco. Kook solo miraba con algo de alegría ese acto,de nuevo hizo lo mismo. Y repetidas veces hasta que por fin se lanzó hasta ella.
–¡Donut!– Salio corriendo hasta su mascota tratando de sacarla del agua,sin embargo,la cabeza de Donut estaba saliendo a la superficie, dejando ver al perro todo empapado. Un ladrido de su parte se escuchó.
–En serio,que susto contigo.– se sentía raro al estar hablando con un animal que quizá no podría entenderle al cien por ciento.

No había escuchado esas voces en todo el día,su felicidad aumento,quizá era porque estaba sólo, pero esperaba que Donut pudiera llenar el vacío que invadía su corazón. El perro mordía un pequeño peluche que JungKook le había dado,estaba tan entretenido que parecía que no había nadie en casa. El solo lo miraba y saco una fotografía del momento,Donut al parecer le gustaba la idea de que lo fotografiarán, ya que este posaba cada que veía la cámara de JungKook.   

Horas después,el perro y su amo se encontraban en el sillón,el cambiando de canales ya que no había nada interesante... de nuevo. Se puso de pie para ir a la cocina,Donut solo miraba ya que le daba miedo bajar de donde estaba,miraba indeciso a su amo hasta tomar el valor suficiente para saltar. Cayó al suelo,dándose un leve golpe,un chillido sonó por muy poco tiempo hasta incorporarse de nuevo para seguir a JungKook.

Miraba con atención el refrigerador,no había nada que llamara la atención del chico. Una y otra vez pasaba su mirada por cada rincón y nada,optó por salir de casa y comer comida rápida.

Ponía su vista en el camino,había dejado a Donut en casa, no saldría con el a todos lados,quizá algunas veces pero no todas. Su destino estaba cerca,por lo que la velocidad del auto iba bajando poco a poco. Un cartel gigante anunciaba que había llegado,estacionó su mueble y bajo de este para seguir con lo que quería. Abrió la puerta y todos fijaron su vista hacia el,sintió un escalofrío recorrer su delgado cuerpo y por fin entro por completo. Todo el mundo siguió con lo suyo y el fue a ordenar su comida.

Masticaba una y otra vez su alimento,para poder pasarlo por su garganta. Así paso todo el tiempo que estuvo en el restaurante,sentía que lo observaban pero cuando volteaba no había nadie. El chico revisaba su celular,más bien: sus redes sociales. Sintió de nuevo esa mirada,pero esta vez si alcanzó a  mirar quien era el responsable. Era el tipo de la tarde,TaeHyung.
JungKook igualmente lo miro,incomodando a Tae. Este se acercó al pequeño JungKook, agitando su mano tímidamente.
–Al parecer si eras tu.– este se rasco su nuca,su mirada seguía fija sobre el. No la apartaba para nada,noto el nerviosismo de el chico de la calle.
–Si.– por fin habló, y la cara del chico se fue tranquilizando.
Se sentó frente a el,y ahora los dos se encontraban mirándose. El aburrimiento se hizo presente,el menor se paró decidido a irse,pero TaeHyung lo detuvo.
–¡Espera! Hay que conosernos más ¿qué dices?– este chico le ofreció una sonrisa sincera,Jungkook tenia mucho tiempo de no ver alguna así, lo cual el chico le transmitió una confianza.
–Esta bien.– volvió a sentarse y puso sus manos en su cara apoyándola.