Amor a décima vista (Gertown)

12. Adiós.

Fue muy intenso el momento que pase con mi primo, decirle que a mi me gusta un hombre no fue sencillo para mi y mucho menos para el, que ya tenía una impresión clara de mi, pero lo entenderá, en unos meses no tendremos que preocuparnos Germán y yo de tener una relación a la vista de todos, igual tenemos que dejar pasar tiempo para que las cosas se relajen entre el y Lenay cuando terminen, no podemos de la nada ser novios enseguida de que cortó con ella.
En fin Germán se tendría que ir el día de hoy, preparo su equipaje, hicimos un último vídeo colaborativo y se despidió de mi.
-Alvaro, me voy..... Te extrañare mucho.
Me dió un beso en la frente, otro en la mejilla y el último en la boca, al besarme me abrazo fuertemente y yo a el.
Podía sentir el sabor salado de sus lágrimas en mis labios, me apretó el corazón saber que el estaría triste pero no tanto como yo, al menos el tenía a Lenay como compañía, yo tenía a Kyle pero no es lo mismo que una persona que te pueda entender y este al tanto de ti.
Cuando se separó acarició mi barba y me quito la gorra de la cabeza.
Entre sollozos, con voz triste sonrió y dijo.
-Te falta un corte de pelo, y afeitar esa barba.
No sabía si reír o llorar, sufrir una mezcla de ambos sentimientos es bueno algunas veces.
El amor no se sabe lo que es hasta que se siente en verdad, puedes creer que estás enamorado alguna vez pero no es así, es diferente.
Salí con el de la puerta, tomamos un taxi y nos dirigimos al aeropuerto, en todo el camino no lo pare de abrazar, quería que se quedará conmigo.
Yo quiero que el viva conmigo.
Las despedidas son difíciles pero no queda más remedio que darlas y esperar volverlo a ver. Cuando llegamos bajo las maletas del taxi y las llevo hacia la entrada.
Compró el boleto del vuelo, este salía en 5 minutos, se tenía que apresurar, acercó su boca a mi oído.
-Te amo.
Se fue lo más rápido que pudo sin girar la cabeza, lo ví hasta que desapareció entre desconocidos. Solo me quedé parado esperando como si volviera en minutos, sabía que no volvería a verlo en un tiempo y que solo pensaría en el en su ausencia.
Pase por una tienda de helados de camino a casa para intentar eliminar la tristeza.
Lo mejor sería no desanimarme y buscar otras cosas que me entretuvieran.
El helado era de menta uno muy dulce y refrescante que me alegraría el dia, pero este es el favorito de Germán, que curioso es la primera vez que lo pruebo y me gustó mucho.
Parecía que mis intentos por animarme eran vanos, pensé en el a la primera, tire el cremoso postre al bote y regrese a casa, lloré, en el camino lloré, me veía tonto llorando como si fuera un niño que perdió a su mamá en el centro comercial, pero lo extrañaba con toda el alma.
Ya en casa prepare unas palomitas y me senté a ver algo AuronPlay en la tele, hasta que me quedé dormido.
-Town tienes que comprender que no puedo quedarme contigo, no es correcto.
-Pero Germán tú dijiste que me amas.
-Si, te amo, pero igual a Lenay y a YouTube, perdón.
Dicen que los sueños contienen en cierta parte cosas del futuro, yo no creo mucho en las supersticiones pero no quiero que sea realidad.
Mejor manos a la obra, fui al baño, tome la máquina y empeze a afeitar mi barba, parte por parte hasta que mi piel quedó lisa y un poco irritada, hace mucho que no me veía sin ella, creo que Germán tenía razón.
Me senté frente al ordenador y me puse a grabar.
Grabar me haría bien, pero aun así no dejaba de pensar en el.
Cuando escuché que tocaron la puerta, era Bers, venía a ver si todo estaba bien conmigo. Le conte como me sentía y lo que hacía, en el mundo solo había 3 personas que me comprendían, una era mi hermana, Germán igual lo hacía y por último mi primo favorito, ellos lo son todo para mí.
-Espero ver a Germán pronto, no se que pasará cuando el le diga a Lenay que terminarán, quizá ella acabe destrozada o quizá el no sea capaz de decirle. Dije
-Chiri déjame decirte que no se que pasara, tampoco sé si tú eres un arruina hogares y no se que estás haciendo.
-Crei que tú me apoyabas.
-Si te apoyo pero esto es una locura.
-Pero me apoyas en mi locura. Dije
-Vale, pero sabes que todo tiene consecuencias, sabes que te quiero y todo, ¿no chiri?
-Si lo sé, dejemos el tema, vamos a jugar algo.