Mi corazón late por ti

Octubre 6

La verdad no sentí la nesecidad de escribir algo más en el día anterior,nada importante paso. Me hice amigo de Victoria y paso por mi hoy para ir a la escuela, fue muy agradable  de su parte, mientras estuvimos caminando platicabamos sobre todo y nada a la vez, el camino no era largo, así que no paso mucho rato para llegar a la escuela.
Ya ahí dejamos nuestras cosas y seguimos hablando, una chica se acercó a victoria, la típica preguntona de tareas, pero de pronto paso algo extraño, un chico llego se sentó en la banca de adelante de mi volteando a verme y me pregunto
-estas repitiendo materia?- parece que me vio cara de pendejo, pero le respondí muy amablemente
-no, estoy cursando el grado, vine ayer también, no me viste?
-oh, no, la verdad no te vi- se levantó y siguió jugando dentro del salón con otros chicos. Victoria me vio y soltó una lijera risita.
-que es gracioso?
-vas a tener que convivir con los chicos, creerán que somos novios o algo- eso fue muy curioso, la verdad no estaba pensando en eso, y siempre me pasaba, nunca le he correspondido el amor a una chica, pero me parece curioso que pensará eso
- bueno, pareces más sociable que yo, por que no me dices quien era el muchacho que se sentó frente a mi?
- a decir verdad, tampoco he convivido con el, pero te diré para receso.
Las clases comenzaron, nada importante paso, me daba curiosidad ese chico, pero se sentaba atrás en el salón y eso no siempre es buen augurio.
Llego receso y me levante le dije victoria que nos fuéramos y ella simplemente me dijo
-me quedare aqui, puedes comprarme algo?
-Porque? Que pasó?
Me pidió que me acercará para susurrarme 

-puedes hablarle a mi hermana?
La mire y ella simplemente se tapó la cara
-

Es muy penoso, estoy teniendo un problema femenino - asentí con la cabeza y fui al buscarla, la encontré y le dije la situacion, no me dijo nada importante, solo que le diera el dinero.
Emily  es un año  mayor que victoria, pero de igual forma se llevan bien dentro de lo que cabe. Cuando volvió ella me dijo bastante seria- llevasela, y prestale tu suéter- y eso hice, la verdad no pese que fuera así ser algo fuera de lo normal, he visto estas situaciones de chicas antes, así que no es extraño para mi. Llegue al salón , le di mi sudadera y se la amarró en la cintura antes de levantarse.

Salimos, comimos y volvimos al salon, le pregunte a victoria como estaba.
-colicos, así estoy.
-bueno, apuesto a que no duelen tanto como un golpe en los huevos.
- oh no! Voy a diferir de ti esta vez. Bueno, igual no me gusta saber sobre ese tipo de cosas.
- si quieres saliendo podemos comprar algo de comer
-no tengo hambre- vaya! Su tono sonó enojado - segura? Podemos ir al comprar unos dul...
- QUÉ NO QUIERO!- al pesar de que me lo dijo entre dientes y bajito se sintió como un buen regaño.
-bueno esta bien- seguí en lo mio, se que aveces las mujeres pueden ponerse mal, pero me sorprendí con esto.

Al salir de clases un me sentía un poco molesto con victoria, así que sólo me quede esperandola, pero no dije nada. Salimos y caminamos juntos y me dice con un tono muy amable
- oye... sigue en pie lo de los dulces?
-pues no se, ya quieres?- se lo dije algo molestó.
-oh lo siento, de verdad no quería hablarte asi, no me siento bien cuando estoy en, esto - señaló ligeramente hacia abajo
- solo quería que te disculparas, me alegro de que estés un poco mejor, y perdóname por insistirte, me dijiste no una vez y aun así te pregunte de nuevo- mientras platicamos llegamos ha la tienda y compramos solo dos dulces, llegamos ha mi casa y la invite al pasar, pero me dijo que quería llegar temprano con su mama, así que se fue. Mi teléfono detectó el Internet y me llego un mensaje de Acebook.

Marco M. te ha enviado solicitud de amistad

Vaya! No conozco a ningún Marco. Me puse a hacer mi tarea y mi madre llego, ya había terminado pero no había limpiado la casa, por lo que cuando la vi llegar, corrí a mi cuarto y fingi estar dormido. Al entrar me grito unas cuantas veces, no le conteste, subió a mi cuarto y me vio acostado.
- ya llegue mi niño- me beso la frente y me tapó con una cobija de mi cama, al salir dije que me levantaria, pero la cobija se sentía tan cómoda que simplemente me quede dormido.

Cuando desperté no tenia mi teléfono a la mano, pero no sabia si era de madrugada, de noche, el día siguiente o que. Por suerte solo me dormí una hora, justo el tiempo perfecto para bajar y ayudar a preparar la cena.
- Buenos días solecito, que tal tu siesta?
-bien, que tal llegaste tu? No me di cuenta a que hora me dormi, solo termine mi tarea y me senti cansado, asi que me acosté.
- llegue bien, me sorprendió que no respondieras, creí que te habías ido con algún amigo y no me lo habías dicho- mi madre me miró algo molesta por que eso hice una vez en la secundaria.
-bueno, un error lo comete cualquiera, además, yo ya no soy así, yo ya cambie.
-claro niño grande, ya eres muy diferente.
Ayude en hacer la cena, mientras mi mama me contaba su dia, siempre lo hacía de manera cronologica, así que era como una historia, y más por como lo cuenta. Ya para cuando estábamos terminando de hacer de cenar, nos sentamos y era mi turno de platicar, le conté lo que me paso con victoria y me dijo que se alegraba de que fuera tan caballeroso, termine de contar lo mio y nos quedamos callados un poco.
-oh por cierto eddy, vi a un chico de cabello negro un poco alto afuera de la casa, parecía que iba a tocar, pero cuando llegue y me acerqué  a la puerta me pregunto por ti, grite para ver si estabas, me di cuenta que estabas dormido y se lo dije, el solo agradeció y se fue- a medida que mi mama me lo platicaba, me sacaba más de pedo, quien podría venir?
-oye mama, recuerdas algo en especifico de ese chico?
-mmhh, tenia un arete en el oído derecho.
No cabe duda, es el chico de la prepa.