Mauerfall

Gott Mit Uns I

1224-1947

Todos parecían felices pese a no haber demasiado, eran pocos los reconocidos como países en esas épocas de antaño, no había nadie con quien hablar y aún así las guerras no se detenían, sólo un solitario Prusia es quien piensa más en todo lo que nadie más reflexiona, ¿qué hacía ahí?

Podría hablar desde hace mucho antes de este año, pero aquí empieza la historia del pequeño Prusia, un Caballero Teutónico tan asombroso como la misma palabra, lleno de energía y con todos a su merced; o eso es lo que pretendía con un especial interés es Rusia, una nación tan vieja como la mencionada -sin entrar más a fondo en los países existentes en esa época-. Era una riña constante, choques entre ambos y ese no sería el fin de los conflictos del joven Prusia, cuyo nombre humano era mejor conocido como Gilbert Beilsmictch y que de un momento a otro fue adoptado como vivienda de un ave que pasó totalmente desapercibida para aquella asombrosa personalidad, o mejor dicho, celebridad.

En 1224 fue el año en el que se formó el Estado de la Orden Teutónica debido a las Cruzadas Bálticas después de conquistar a los Baganos Prusios, se enfrentaron a un sin fin de conflictos bélicos en donde la victoria podía variar durante la Edad Media y el gobierno de Prusia empezaba a tomar la seriedad del asunto. Uno de sus gobernantes, Federico II, logró tener el afecto de su país.

Pero ahora no hablamos de eso, venimos desde mucho antes, cuando se creó un nuevo Imperio por Prusia, el solitario país.

—Alemania... Ese será tu nombre —Planteó el albino ante aquella, su pequeño hermano estaba frente a él, ya no estaría solo nunca más. Se tenían el uno al otro —Debes tener esto —Sonrió al momento de entregarle la Cruz de Hierro.

Ese era un símbolo de deconderación militar originaria del Reino de Prusia y posteriormente heredada a Alemania, popularizada en su época Nazi y descontinuada después de que finalizara la Segunda Guerra Mundial.

El pequeño alemán ajeno a todo lo que pasaba, aceptó la Cruz. Era nuevo en el mundo, su hermano se encargó de mostrarle todo lo que debía saber como nación... Como Imperio, también debía saber que nada iba a faltarle, no debería preocuparse por nada, sino que Gilbert en su lugar lo haría. Se enfrentaron a varios eventos juntos, luchaban hombro a hombro como buenos hermanos hasta lograr conseguir sus momentos de paz para convivir como hermanos.

Ludwig, o como Gilbert solía llamarlo, West logró apegarse a su hermano más de lo que hubiera deseado y sabía que estaba mal aquél afecto según su superior decía. El representante de Prusia, también conocida como Alemania Oriental, Federico II tampoco era muy blando con sus hombres, aunque cabe mencionar que a pesar de eso, logró convertirse en el gran mando de los mismos, siendo como un padre para Gilbert y quedando devastado ante su deceso en 1780; nadie debía verlo llorar, encerrado en una habitación terminó de romperse. Sin duda esta nación vivió mucho, pasó tras tantas cosas que impreciso sería decir en qué año fue su nacimiento, pero sí podemos saber cuándo fue disuelta por orden de los Aliados.