Capítulo 1

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Mi nombre es Rocío, para una mayoría Ro, para mi madre en temporada cursi y cuando quiere hacerme pasar un poco de vergüenza Rociito. Tengo 19 años y acabo de mudarme a Madrid, nací en Las Palmas y he estado viviendo durante 10 años en Sevilla así que ya podéis imaginaros la mezcla de acentos tan extraña que tengo. Esta vez me he mudado sola, empieza una etapa de mi vida muy esperada: La Universidad, obviamente el piso lo estoy compartiendo con una chica llamada Carmen ella es de la capital pero necesitaba independizarse. Por un lado yo estoy estudiando el grado de veterinaria y ella diseño de moda o algo parecido creo que me comentó.

 En Sevilla he dejado a todas mis amigas, a mi madre, a mi hermano y a lo más importante, mi perro. Realmente pensé que iba a pasarlo muchísimo peor pero gracias a dios he conocido a gente maravillosa tanto en mi facultad como gracias a mi compi de piso. En este mes que llevamos viviendo juntas nos hemos hecho inseparables, me ha unido a su anterior y nuevo grupo de amigos, lo que ha hecho que me sienta genial en esta enorme ciudad.

- Ro vamos que nos están esperando tía!- repetía Carmen; eso sí tengo que decir que es de los más puntual que existe, tiene que llegar 1 hora antes sino se siente mal y en eso chocamos yo soy la típica que llega justa o unos minutillos tarde- Joder para ponerte una sudadera has tardado tanto... el día que te arregles te voy a dar un trofeo

-VAMOS CARMENSIA QUE LLEGAMOS TARDE!- chillé mientras salía por la puerta de una manera pamplinosa

Vivíamos cerca de la Complutense y habíamos quedado en la otra punta de Madrid peeero yo tenía carnet y Carmen coche así que no había ningún problema ni agobios de metro.

 Iba a conocer a  varios chicos que por lo visto se les había olvidado presentarme, justo cuando iba a aparcar Carmen empezó a chillar y a señalar a un grupo de chavales curiosos y cuando digo curiosos quiero decir interesantes, buenorros, y todo lo bueno que se os venga a la mente. Ah si! Como habéis comprobado no tengo pareja y Carmen lleva buscándome una desde el primer día que nos conocimos, ella es así de pesada, aunque yo no quiera una relación ella me la tiene que encontrar por sus santos ovarios.

 -RO! Ellos son Daniel, Francisco, Eduardo, Juan Carlos , Rubén, Carlos y Pepito-decía Carmen a la vez que uno por uno me daban dos besos cuando oían su nombre

- Vale entonces sois Dan, Fran, Edu, Juanca, Rube, Carlitos y Pepe ¿no?- dije mientras señalaba y todos se reían, no entiendo que hacía tanta gracia pero bueno la vida

- Que simpática oye la rubia y tu eres Rociito ¿no?- ea ya he descubierto quien era el gracioso de turno pero no me acordaba de su nombre bueno es que me confundía con su hermano

- Para ti Rocío, mis nombres especiales son para gente especial- dije con una cara de orgullo- lo siento Carlitos

- UUUU-dijeron los demás mientras me miraba desafiante

- Carlos es mi primo, yo soy Pepe chula- toma ya la primera en la frente, empiezo bien.

Estuvimos dando una vuelta por el centro y haciendo planes para el jueves noche. Para hoy tenían pensando ir a un Japo que hay por el paseo de la Castellana, justo detrás del Santiago Bernabéu

 - Carmen y yo venimos y obviamente vamos en coche, con nosotras caben 3 así que ya me diréis

 - ¿de verdad piensas que íbamos a ir andando? Venimos en coche también, si te puedes llevar a 2 pues mejor porque antes hemos venido un poco ajustados- dijo Dan mientras miraba al resto del grupo

 - Vale pues veniros 2 me da igual quienes, me caéis igual de mal todos 

- Le encantáis, hacedme caso- aclaró Carmen por si no habían pillado la cosa- Pepe y Carlos veniros vosotros que vivís cerca nuestra y después a la vuelta os dejamos en casa sin tener que dar tantas vueltas

 No se si vivían cerca o no pero lo que si se es que Carlos y Carmen tenían algo y que tramaban algo para mi también.

LLEGASTEWhere stories live. Discover now