Capítulo Único

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Los nuevos rumores se esparcen como rayos y de un día a otro, la universidad está llena de ellos; de murmullos en los corredores y las aulas; de habladurias en el comedor y en los baños.
Rumores van y vienen, pero solo son eso, adolescentes hablando sobre adolescentes, siendo de este modo ¿qué tan profundo puede ser el ser humano sin caer en la hipocresía?. Sin embargo, nada nunca dura lo suficiente, es la ley de los rumores; una quizás dos semanas, siendo cosas de nula relevancia "Relleno de una tal ella" y "pleitos de el", noviazgos por aquí e... infidelidades por allá.

Nunca nadie de quien no se pudiera sacar morboso provecho, eso lo sabe Stan Marsh, de quien en las últimas semanas se han propagado quedos susurros sobre su aparentemente perfecta relación con la "implacable señorita Testaburger".

"-¿sabias que le puso el cuerno?
-si, y ¿sabes con quien?...
-...lo se, es una zorra-
-Y ¿el no sabe nada?-
-No y mejor para nosotras, tenemos una oportunidad"

Porque si, cuatro años sin algún problema era demasiado alentador para ser cierto, aunque claro cuando se salia con una de las chicas mas sexys del instituto no se puede esperar menos.

Stan se encuentra seguro de muy pocas cosas, duda de mucho a las que se supone debería tener de ciega fe, pero si de algo sabe es completamente irrefutable, es el de que las cosas cambian, apenas entrar a la preparatoria lo noto. Wendy ya no es la niña que era antes, mirando su silueta fina suavemente curvada a la altura de las caderas adjunto con el carácter fuerte lleno de gentileza y sumado a la nata inteligencia de la muchacha creando un armonioso conjunto de personalidad, le comprobó una única cosa, es posible que ya no esté tan locamente enamorado como cuando saliendo de la escuela, con todos sus compañeros de fondo en el patio, se declaró para una verdadera relación formal ¡a los catorce años!, pero ahora a sus 18, no podría decir que se arrepintiera de absolutamente nada.

Es verdad, problemas los hay de sobra, pero también las soluciones.

Y justo ahora pensaba en una de ellas.

-.-.-

Es viernes por la tarde, está emocionado, mañana temprano tendrá un partido importante contra el pueblo vecino, es el último para pasar a las finales de New York y el director PC le ha ordenado descansar mucho y comer correctamente, pero... ¿De qué manera una estúpida siesta puede serenar el cuerpo como una noche de sexo con su novia?;  una sonrisa surco sus labios de tan solo pensarlo, cerro los grifos y salio de la ducha con el vaho detrás suyo y la toalla en la cintura.
Entré los haces de luz en la penumbra lograba dislumbrar  la negra cabellera de su chica dispersa por la almohada y el pecho mantiene el lento ritmo de una persona profundamente dormida, sonriendo se mete a la cama quedando frente a frente, las delicadas facciones lograban transmitirle una tranquilidad impresionante; al fin de todo por fin está con su amor de la infancia como siempre soñó; ¿acaso existía sensación mejor que esa? ... tal vez; sus pensamientos quedaron quietos, y como todo buen falaz hecho y derecho, se de dedica a reír sutilmente al la vez que niega ligeramente con la cabeza al final, dejando llevarse por el cansancio.

Los primero en invadirle el sueño son los matutinos rayos de sol a través de la delgada cortina violeta, dándole de lleno sobre el rostro, aún es demasiado temprano como para siquiera nota los primeros matices de azul pálido en el cielo y a lo lejos el amarillento sol es la única iluminación del cuarto apenumbrado; palpa el colchon, la mano se le hunde entre las frías colchas, esta solo, suspira incorporándose, no es recibido más  que por la mesita ratonera junto a la cama con una nota encima.

" Siento tener que haberme ido tan temprano, pero tengo  y qué pase a casa de Bebe por unos apuntes para la exposición del Viernes, lo siento cariño juro compensartelo más tarde.

∆Infiel felicidad∆ [Style]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora