4:"Los Independientes"

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El día martes Matew se despertó temprano, se vistió sin apuro y salió del dotmitorio. Camina por los pasillos intentando llegar al comedor, los alumnos se estaban levantando, la luz empezaba a entrar por el gran ventanal que había al lado del comedor. Entró decidido al comedor, se sentó en una de las mesas esperando a Alex. Estaba pensando si contarle lo del colgante y su charla con el director Sebastian, después de todo el director no le había dicho que no podía llevar compañía. Pero por otro lado era un asunto personal, a Alex le diría que a las 5:00 tendría que ir a ver al entrenador para hablar sobre cambiarse de área. En ese momento entraron dos personas, un chico y una chica, los dos parecían más grandes que él. Al chico lo reconoció enseguida, era Rolf Kengel, el que lo había golpeado el día anterior, las ganas de intentar golpearlo crecieron en él, pero tenía que mantenerse al margen. A la chica no la reconoció, era pelirroja, el pelo un poco rizado en los extremos, algo de pecas en las mejillas, y la tez pálida. Parecía algo incómoda, pues Rolf le estaba hablando. Terminó rápidamente su desayuno y salió por la puerta con paso decidido, se crusó con Alex quien lo saludó con una palmada en el hombro, parecía que se había quedado dormido, la corbata estaba desarreglada, tenía las mangas desparejas y el pelo enmarañado. Ese look no le quedaba mal del todo.
El día pasó más rápido de lo que Matew pensaba, las 5:00 llegaron volando. Ni bien terminó la segunda clase fue directo para rl despacho del director. Tocó la puerta y la misma vos grave le indicó que pasara. Entro y encontró al director sentado en su escritorio.

_ Buen día Matew.-dijo alegremente- no te preocupes por tu tercera clase, ya arreglé todo con tu profesora. Iremos a la planta baja.

Sin más pretextos se encaminaron a la planta baja. Pasaron por delante del ventanal que estaba al lado del comedor, el sol ya se estaba poniendo. Bajaron más escaleras hasta llegar a la planta baja. Allí doblaron por una esquina que Matew nunca había notado y llegaron a una pared que tapaba el paso. Sebastian tomó de su pecho un colgante muy parecido al de su padre, pero este era de plata y marfil. Un símbolo se dibujó en la pared, y brilló tanto que cegó a Matew, tuvo que taparse la cara con las manos. Cuando volvió a abrir los ojos la pared ya no estaba y mostraba una elegante escalera de puedra que descendía. Sebastian continuó caminando y Matew lo siguió adombrado y en silencio. Cuando Matew cruzó y miró para atrás se alzaba de nuevo el paredón. Bajaron por las escaleras unos minutos en silencio hasta que llegaron a un subsuelo, también de piedra. Dentro había un grupo de personas, reconoció a cuatro de ellas; una de ellas era el profesor que los había accompañado a la entrada del "AIM", otra su profesor de "Educación Física Independiente" las otras dos eran Jeorge Maxwell, su profesor de química y Silbya Morryson su ptofesora de Ciudadanía política. Todas las otras oersonas, dedujo que serían también profesores. Entonces Sebastian habló:

_ Matew este es el grupo "Independiente".- dijo alegremente- ellos te ensañaran todo lo que sabemos del "Taoismo". Somos defensores de la libertad y peleamos contra lad fuersas que viven en las sombras

Entonces el anillo de su padre empezó a brillar en la mano de Sebastian, que se lo estaba entregando.

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