A/N: Lamento mucho que aún no actualizo mis historias... sé que están ansios@s por saber cuándo voy a actualizar pero es sorpresa jijiji Mientras, en estos días, he tenido unas ideas para un OS pero no uno como los que he escrito. Este es uno distinto, ustedes dirán.
Era una noche lluviosa.
Las calles estaban silenciosas y las luces nocturnas estaban encendidas.
Había una chica, le encantaba los días lluviosos, le encantaba el sonido de la lluvia tras su ventana. Esta chica está sufriendo, tiene un corazón roto, hecho pedazos por un chico que no la valoró. El incidente era tan reciente que aún le duele en el alma todo lo que ha ocurrido.
Era de noche. La chica esperaba que sus padres se fueran a dormir, para robar una botella de su colección y tomar hasta salir el Sol y romper en llanto. Esta noche es distinta.
Era una noche lluviosa.
La chica había llorado por estar leyendo conversaciones antiguas de ella y su ex... cuando las cosas iban bien. Ella solía leerlos todas las noches antes de dormir, antes formaba una sonrisa en su rostro, ahora solo llora por tan dolorosa pérdida.
Tantas promesas que nunca serán cumplidas, tantas declaraciones de amor que tristemente, fueron lanzadas a la basura. Tantos desvelos y momentos lindos, que ahora deja un vacío en el corazón de la joven. Se acabaron los ''Buenos días amor'' todas las mañanas, y también los ''Sueña conmigo'' en cada noche.
Sus amigas le advirtieron muchas veces que iba a sufrir y la joven se había cegado tanto, que no hizo caso a sus advertencias y tomó el riesgo de amar. Dentro de su corazón, sentía que debía terminar porque algo iba a pasar, pero fue egoísta... no hizo caso. Mientras, no se preparó para el doloroso fin de la historia... el fin de su relación.
Sintió como su corazón se fue rompiendo en pedazos. Sintió como su mundo fue destruido y cómo ella bajaba de las nubes, para caer en la Tierra de un golpe. Era como si le faltase el aire para respirar, de repente sintió el enojo apoderarse de su ser pero de nada sirvió, porque el daño hecho está.
No había vuelta atrás...
Esta noche esperó que sus padres se fueran a dormir. Cuando vio que las luces ya estaban apagadas y todos se fueron a dormir, la chica cambió su ropa, tomó su botella y salió a la calle.
Era una noche lluviosa, y a la chica no le importó. Salió y caminó por las calles, descalza. Mientras caminaba, tomaba su botella y en su otra mano, tenía su calzado. Sentía como la lluvia caía sobre ella, humedeciendo su cabello, caían por su rostro y mojaban su ropa. En una noche cualquiera, se enojaría... pero ésta noche, no le importó.
Mientras las gotas caían por su rostro, la joven comenzaba a llorar. Mientras tomaba la botella, los recuerdos llegaban a su mente y lloraba. Le dolía en el corazón todo lo que ha pasado entre ella y su ex. Ella le había dado todo, le entregó todo y a cambio, recibe un golpe. Una herida que estaba sangrando dentro de ella, una herida interna que solo el tiempo lo podía curar.
-No volveré a amar- fueron sus palabras, con lágrimas en los ojos.
Pensó en cerrar su corazón, poner un cerrojo para no dejar entrar a otra persona por miedo a sufrir. Seguía lloviendo y ella aún caminaba por las calles, hasta que llegó a un parque y se sentó sobre una banca y miró la luna, que se encontraba escondida entre las nubes. No estaba muy visible pero estaba presente.
-¿Por qué a mí? ¿Qué hice para merecerme esto?- Preguntaba a la Luna y tomó otro sorbo más de la botella.
Continuaba lloviendo y cuando iba a tomar otro poco, cae en cuenta que ha acabado. De repente se enoja y lanza la botella a unos metros, haciendo que el objeto se rompa en pedazos y la joven cubre su rostro con sus manos, llorando y gritando por la herida que tiene en su corazón.
Minutos más tarde...
La chica saca su celular, no le importó si la lluvia mojaba la pantalla de su celular, sólo quería leer una vez más las conversaciones con su pareja. Volvió al primer ''hola'' y comenzó a leer. El comienzo de su historia, cuando estaban conociéndose, cuando planearon verse por primera vez, cuando él confesó sus sentimientos por ella y ella aceptó, cuando iniciaron su relación... sus celos, peleas, muestras de cariño, los detalles... hasta su final.
La chica no paraba de llorar.
Era muy doloroso.
Sus amigas le habían advertido que ésta persona solo iba a traer problemas. Lo que nadie sabía es que ella sí lo sabía, pero aun así pensaba que valía la pena. Luchó hasta el final, pero la forma en que todo terminó, le hizo pensar que todo fue en vano.
Le aconsejaron que eliminara esa conversación que solo le estaba causando dolor e hizo que su herida sangrara más. Los primeros días, la chica no hizo caso. No quería levantarse de su cama y solo quería llorar. Al 4to día, comenzó a borrar cosas de su ex, incluso sus fotos que tenía guardado en su celular. Al 5to día, borró sus conversaciones. Al 6to día, decidió borrar a su ex de las redes sociales.
Al 7mo día, en una noche lluviosa, en medio de un parque, después de tomarse una botella de vodka. La chica mira el celular y observa las conversaciones, con lágrimas en los ojos, lo arrastra a la izquierda y le da la opción de ''Eliminar''
''¿Eliminar el chat con....?'' Apareció en su pantalla.
La chica lloró una vez más. Toma una decisión dolorosa, pero que en un futuro le hará bien.
Decide eliminar la conversación.
''Eliminado''
Fin
A/N: Bien triste, lo sé... pero en un futuro le hará bien. Sean honestos, mis queridos lectores... ¿Qué opinan?
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El Adiós.
General FictionUna chica. Una noche lluviosa. Una botella de Vodka y una vieja conversación.