Bolsas y vampiros ¡! #BlackFlugWeek

d a y t w o🌹

“día libre”

—tu siempre serás de mi pertenencia.

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En lo que iba de semana, el Dr. Flug había notado que su jefe, Black Hat, estaba encargando al adorable y tierno osito, 5.0.5, a hacer trabajos pesados, siempre lastimándose en el proceso. Al pasar esto, 5.0.5 no dudaba en ir al laboratorio y tan solo con una mirada de dolor, pedirle que le “sanara” las heridas con un pequeño beso.

Para el Dr. Flug no era novedad, se había vuelto una costumbre verlo siempre a la misma hora.

[…]

Ya eran las seis de la tarde, hora de que 5.0.5 viniera a recibir sus mimos. A Flug le avergonzaba un poco, se supone que él era malvado. Aún así no se quejaba, el oso era sumamente abrazable, y le relajaba acariciar su pelaje cuando estaba estresado, y esta semana si que lo ha estado.

Escuchó el chirrido de la puerta siendo abierta, y los pasos del gran oso azul con una chistosa flor amarilla en la cabeza.

Sonrió cuando sintió su presencia al lado de él y giro en su silla.

—Oh, te has lastimado de nuevo—el oso levanta una de sus patas, enseñándole con una mueca triste el raspón—, dejame ver.—la levantó hasta acercarla a su bolsa.

—Vaya, se ve doloroso—el científico se pregunta, ¿que le habría puesto a cargar el jefe para que la herida se viera así?—, ¿quieres un beso para que esté mejor?—vio como 5.0.5 asentía con la cabeza.

Levantó un poco su bolsa y acercó su boca hasta la pata del oso, depositando un pequeño beso y una caricia con su mano.

Se separó y lo abrazó fuerte, sintiendo como el otro lo rodeaba con sus patas—vamos, no estés triste—se separó del abrazo y el animal posó una pata en su mejilla descubierta—, ¿ves? mucho mejor.

El oso apartó la pata y Flug bajo su bolsa, se levantó de su silla y caminó hasta la salida.—Lo siento, 5.0.5, me debo ir. Tengo que pedirle permiso a Black Hat para poder ir a descansar... ugh, como lo odio.—el de la bolsa se retiró del laboratorio, dejando al oso con una mueca de enfado.

Su cuerpo empezó a deformase, hasta tomar el tamaño y silueta de Black Hat.
Un gruñido molesto salió de sus labios—odiame todo lo que quieras, Dr. Flug. De todos modos eres de mi propiedad—su mirada bajó hasta su mano realmente lastimada y su expresión se suavizó, lanzando un pequeño suspiro—. Aún puedo sentir la calidez de sus labios.—frunció el entrecejo al sentir su rostro caliente y salió rápidamente del laboratorio.

—¡BLACK HATT!—chilló Demencia lanzándose encima de él.

—¡DEMENCIA, SUELTAME DE INMEDIATO!—gritó, deformando su rostro hasta hacer que la peliverde diera un salto hacia atrás riendo.

—Uhhh, ¿que hacías en el laboratorio del cerebrito?—preguntó con curiosidad.

—Nada que te interese.—se acomodó el chaleco y la empujó a un lado.

Demencia rió con picardía—Alguien se está enamorando.—murmuró riéndose más fuerte.

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N/A: He aquí el día dos. Lo he subido más temprano, yay. Es corto ya que debo estudiar y agh, kill me. Bueno, debo aclarar que me basé en un cómic que vi en una página por facebook, está súper lindo y quise hacerlo para el día libre. Bueno, es todo, bye.