五美元 → cb

车票

La mañana de Chanyeol de nuevo comenzaba con apuros, sus huevos revueltos en la sartén se estaban quemando, su café estaba frío, mientras él aún planchaba su camisa, además de tener que bañarse debía alimentar al gato o por lo menos dejarle un plato con leche o atún. Aquel pobre felino, apenas era una pequeñez; de camino a casa Chanyeol lo vio acurrucado en una caja ya casi rota, se veía que el animal no había comido pues estaba todo flaco, sin embargo aún lucía tierno es por eso que lo recogió llamándolo Eomji.

A pesar del gesto de caridad y de tomarle aprecio al animal ahora mismo se estaba arrepintiendo de recogerlo, lástima que no había vuelta atrás. Sin pensarlo dos veces Chanyeol se dirigió a bañarse. Cuando salió, se vistió con la camisa a cuadros planchada, unos jeans negros, zapatos cerrados, metió su celular en su bolsillo y así salió de su habitación. En la sala, tomó su chaqueta, fue a la cocina en busca de un plato y puso ahí atún, puso este en el suelo atrayendo inmediatamente a Eomji.

Salió de su casa y se apresuró a tomar un taxi, consiguiendo este rápidamente, subió y le dijo al conductor a donde se dirigía. Chanyeol veía pasar por la ventana árboles, niños con sus mamás dirigiéndose a la escuela además de perros callejeros, cuando el taxi hizo una parada en un semáforo la vista de Chanyeol se detuvo en un chico delgado, castaño, que vestía de negro, con unos lentes que le hacían ver más guapo de lo que era, Chanyeol no pudo apartar su vista de él, es por esto que no se dio cuenta de que el conductor le estaba diciendo que ya habían llegado, un apenado Chanyeol salió del taxi buscando su cartera en sus bolsillos, oops, no la encontraba por ninguno de éstos, al alzar la mirada se encontró con el chico de negro que había robado su mirada, sin pensarlo mucho dijo:

- ¿Me prestarías cinco dólares? - el chico era más bajo que él y era mucho más lindo de cerca, al parecer se veía distraído, sin embargo eso no evitó que sacara con rapidez un billete de su bolsillo trasero del jeans que vestía, se lo tendió a Chanyeol.

- Muchas gracias - le pagó al conductor y el taxi se alejó. - Te los pagaré - dicho esto Chanyeol le tendió a el misterioso chico una tarjeta la cual tenía su nombre y teléfono, muy apresuradamente continuó su camino, yendo hacia la entrada del gran edificio que manejaba, que ironía ¿no? Ser jefe de una de las compañias más grandes, tener mucho dinero en tus bolsillos pero olvidar tu cartera para no poder pagar cinco dólares; más tarde se las arreglaría para salir temprano y llegar a casa caminando.

Subió al elevador, no sin antes regalarle una sonrisa a la secretaría de unos treinta años, apretó el botón que tenía el número treinta, en cuanto pudo pensar, procesó lo que había hecho anteriormente, le pidió a un chico desconocido cinco dólares, también le dio su tarjeta para que lo contactara lo cual obviamente había sido estúpido, ¿Quién llamaría a alguien para cobrarle cinco dólares?, era decepcionante lo que había hecho, pues no vería nunca más al bello chico castaño, lo que le hacía sentir aún peor eran los cinco dólares, a Chanyeol no le gustaba deberle algo a una persona, mucho menos a una a la que no conocía, • Lo mejor era subirme de nuevo al taxi y pedirle que me llevara de regreso aunque me cobrara lo doble • pensó Chanyeol inútilmente, pues pensar y pensar en el asunto no arreglaría nada.

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Annyeong☆
Nueva historia, constará de tres únicas partes^^
Espero te guste♡