Viviendo con un Mafioso

Capítulo 9

Alexa

Mi rostros Ardía. Sentí su puño en mi Mejilla izquierda nuevamente y caí al Suelo, quise ponerme de pie pero me fue Imposible, entonces él aprovechó y me dio una Patada directo al Estómago, grité de dolor y el salió encerrándome en la habitación. Así estoy yo, esta es la nueva Alexa, viviendo con un tipo que me obliga a hacer de todo con Golpes, su base de enseñanza es golpearme, y yo no puedo contra él. Aún no he tenido Sexo con el, porque cada vez que quiere me niego y me golpea sin Piedad. Hoy me golpeó porque no quise tener relaciones con él y porque no le hice desayuno para irse a su Trabajo, tuvo 1 noche que llegó sumamente borracho y pues esa noche creí que era mi Ultima con vida, logré escaparme de él y encerrarme en el baño, el gritaba que le abriera la puerta pero no lo hice porque si lo hacía con la borrachera que llevaba me MATABA a golpes. Odio decirlo pero Extraño a Izan, lo extraño y odio mucho.

Cuando se fue al Trabajo, logré llegar al baño con mi Dolor, me miré al Espejo y las lágrimas no tardaron en llegar, mi Rostro estaba feo, golpeado, mis Pómulos estaban rojos e hinchados, mi labio inferior sangraba, y que decir de los Moretones de mis Brazos, ya casi no tengo tiempo de pensar en mis Metas, mi Papá, Oriana y en que algún día pueda volver a ser Yo, la que era ANTES. Lo único que pienso seguido desde que vivo con Luis es como será mi Muerte algún día, porque sí de algo estoy segura es que de aquí no salgo Viva.

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-Alexa, he llegado.- Eran las seis de la tarde y su voz provocó náuseas en mí, un miedo se apoderó de mí y salí a verle, pero me sorprendí al verlo con él, con ÉL. -Quiero que nos prepares 2 copas de Whisky.- Me dijo Luis y yo asentí dándome la vuelta hacia la cocina.

Cuando lo vi tan sonriente y relajado unos cosquilleos en mi estómago me hicieron sentir bien por él, pero cuando se percató de mi Asistencia su cara se deformó, su mandíbula se tensó y sus puños se apretaron. Era él, era Izan.

Izan

Luis me había invitado a su casa luego de unos encargos que teníamos que nos habían salido de maravilla, yo estaba muy contento tanto por la maravilla de los encargos como por las noches que he pasado con Natalie, la pelirroja que había conocido en el Bar, estaba relajado y pues también quería saber que había pasado con Alexa, seguro estaba contenta por su nueva vida pero cuando la vi, la magia se fue al Diablo, todo se volvió rojo ante mi Vista, sus ojos expresaban tristeza, miedo y terror.

Tuve que controlarme ya que ella no me pertenecía, ella era de este Cabrón. Luego de un rato Alexa llegó con las copas de Whisky, puso mi copa frente a mi y cuando iba a poner la de Luis la mano le tembló he hizo que se cayera justo arriba del pantalón de éste, él la miró como si quisiera matarla en ese mismo Momento y ella retrocedió y topó conmigo, que me levanté del sillón de inmediato al ver las Intensiones de Luis.

-Eres una Maldita que no sabe hacer nada.- Le gritó y ella se espantó.

-Lo....L....Lo lam...Lamento- Decía entrecortadamente y con la voz temblorosa.

-A ver Luis, fue un Error, ¿qué a ti no te pasan cosas similares?- Le dije poniéndome delante de Alexa y el relajó el Semblante al ver mis Puños apretados y mi Mandíbula tensa.

-Ok, pero que se me quité de enfrente no quiero verla. VETE ALEXA!- Le gritó y ella subió las escaleras corriendo y con lágrimas en los Ojos. Cuando me miró por última vez, especuló un "Gracias" que solo yo entendí y subió.

-¿Qué demonios pasa contigo, Luis?- Le cuestiono cuando ya Alexa no está. -Para eso querías a Alexa, para maltratarla, mira, es que eres un Maldito Cabrón, no ves lo mal que está, se ve muy pero muy Distinta a Cómo te la entregué. Eres un Cabrón!- le digo con la sangre hervida.

-Querido Izan, yo puedo hacer lo que se me dé la gana con esa Babosa, puesto que ya es Mía. Hasta que Mark no venga por ella si es que la encuentra viva los mataré a Ambos.- Me dice con una sonrisa Malévola.

-Iré al baño.- Le digo y subo buscando el baño de esta estúpida Casa.

De camino al baño, escucho pequeños quejidos y llantos de ella, de Alexa. Sigo hasta donde están los bajos llantos y veo que es de una Habitación. Entro sin tocar y la veo echa un Ovillo en un rincón.

-Alexa.....- Digo y me arrodillo frente a ella. Ella me mira con lágrimas en los ojos.

-I...Izan vete.- Me dice y yo niego con la cabeza.

-No, no Hasta que me digas que está haciéndote ese cabrón.- Le digo y ella sonríe Amargamente.

-Nada, me llena de cariños y mimos, ¿No ves las marcas?- Me dice con gran Ironía y la fulmino con la mirada.

-Alexa, vamos. Te puedo ayudar.- Le insisto pero ella solo niega en decepción y esconde su cabeza entre sus piernas.

-Me ayudarías un montón si te marchas.- Me dijo y asentí.

-Entonces sigue en tu propio tormento Alexa.- Le dije y salí de ahí, escuchando como lloraba desconsoladamente, me partía escucharla así, pero ella no quiere ayudarse.