Slash Fiction (Destiel One shot)

Slash

...Las embestidas de Castiel eran cada vez más profundas. Dean sabía que su angel llegaría al clímax muy pronto y lo único en lo que podía pensar era en ese semen celestial llenando su interior. Cuando el moment...

-Hola Dean.

-Cass- dijo el nombrado cerrando su laptop a toda velocidad- debes tocar antes de entrar. Mi habitación es un lugar privado.

-Lo siento yo solo...- Estaba a punto de salir cuando el cazador lo frenó.
-Espera Cass, yo lo siento me altere un poco. ¿Que es lo que querias?

-Sam necesita tu laptop ¿puedo llevarmela?

-¡NO!- La negación sonó más brusca de lo que hubiera querido.- el tiene la suya.

- La de Sam no funciona- dijo el angel un poco confuso. Dean estaba muy tenso.

-La estoy usando. Compre una propia para no tener que compartir.- Se dio cuenta que sonaba como niño malcriado, pero no le importó. No podía dejar que nadie vea lo que contenía su laptop.

-Entiendo. Le diré a Sam.- El angel salió de la habitación, dejando a un humano muy nervioso sentado en la cama, abrazando ese aparato como si fuera algo precioso.

Luego de pasar horas con Sam, buscando información en libros, ya que no tenían computadora, el Ángel seguía con la idea de que Dean ocultaba algo.

Cuando ambos Winchester dormían se decidió a ir por la laptop.
Se decía a si mismo que era por seguridad, no vaya a ser que el cazador este planeando ponerse en peligro como acostumbra, con alguna misión suicida. Pero lo que impulsaba los actos del angel era pura curiosidad.

Entró a la habitación despacio, cuidando de no hacer ruido.
Estaba a oscuras, la luz que apenas entraba por la puerta, le mostraba a un Dean dormido, escasamente vestido con unos boxers.
La visión de ese cuerpo semidesnudo y tan bien trabajado, lo hizo olvidarse por unos minutos de la razón de estar ahí.
Luego de tomarse más del tiempo necesario para mirarlo y asegurarse de que dormía profundamente, tomo la laptop que estaba a los pies de la cama y se dispuso a verla sobre el escritorio.

Sus mejillas se encendieron, toda la cara le ardía. Sentía vergüenza pero no podía parar de leer.

... saborear el semen de su frágil humano era su perdición. No había cosa que a Castiel le gustará más...

La laptop fue cerrada de repente. Era Dean que intentaba mostrarse enojado, pero estaba claramente nervioso.
-¿Que haces en mi habitación Cass?- pregunto mientras encendía la luz.

-¿Que es esto Dean?- el angel señalaba el aparato sin apartar la vista del cazador, cosa que a este último lo incomodaba demasiado.

-Una laptop.

-Se lo que es. Me refiero a lo que estaba en ella. Que... porque...- Castiel no sabía como expresar sus preguntas- que.. Nosotros no hacemos eso.

-Es fanficción Cass. Le llaman Slash.- Dean estaba muy incomodo con la situacion, hasta que noto que el angel,aún sentado frente al escritorio, parecia estar muy preocupado por taparse la entrepierna con su gabardina. Eso lo hizo tomar confianza- Lo escriben los fanaticos de los libros de Chuck.

-¿Por que harían tal cosa? En los libros no hay nada de esto.- Castiel quería huir de la situación pero no podía levantarse de su asiento. Si lo hacía, su erección, producto de la entretenida lectura, sería muy evidente.

-Esta en el subtexto-dijo el Cazador acercándose hasta quedar parado frente a él. Con su duro miembro tocando el brazo del angel sin ninguna vergüenza.- y no puedes deletrear subtexto sin decir S-E-X-O.

-Debo irme- Castiel se puso de pie e intentó abandonar la habitación pero el cazador fue más rapido. Logró cerrar la puerta y dejar al Angel aprisionado entre ella y su cuerpo, mientras le sujetaba las manos a la espalda.
Castiel sabía que podía deshacerse fácilmente del agarre. Pero no quería.

-Cass- el humano ahogaba su risa en el hombro del Ángel- ambos sabemos que eres más fuerte que yo, si quisieras irte ya lo hubieras hecho.

Soltó sus manos y le quito la gabardina suavemente.
Castiel, con la frente pegada a la puerta, sólo se dejaba hacer.
El cazador lo desvistio muy lentamente, como dándole oportunidad de arrepentirse.
Sólo cuando estuvo totalmente desnudolo hizo voltearse para verlo a la cara. Las mejillas sonrojadas, la respiración agitada y la mitada deseosa del angel, le parecieron lo más erótico que haya visto en su vida, y ninguna pornografía asiática podía compararse.
Se animo a besarlo, pero Castiel no respondía, se decidió a ir más lejos, lo tomo del cuello con una mano y metio su lengua todo lo que podía en la boca del otro, mientras con la otra mano masajeaba su miembro con un movimiento de vaivén.
Se separó de su boca e intensificó su su masaje de manera brusca. El Ángel gemia de manera descontrolada.

-Tu también puedes tocar Cass- dijo el cazador mientras lo empujaba hasta la cama.
Se quito sus boxers y se acostó sobre el.

-No se como hacer esto Dean- el angel estaba muy agitado- no se como hacer algo que te guste.

-Tu me gustas Cass, no importa lo que hagas, me gustas completo. ¿Que es lo que te gusta a ti?- Dean sonreia, mientras dejaba pequeños besos en su cuello- Se que te gusta lo que leiste. Puedes probar algo de eso.

Castiel tomó a su humano por la cintura y haciendo uso de su fuerza lo dejo debajo de él con un movimiento brusco. Arrodillado entre sus piernas se tomó el tiempo de mirarlo completo. Tocar su cuerpo. Besar su pecho y bajar hasta su abdomen.
Cuando llego a su miembro no pudo esperar para meterlo en su boca.
Al principio lentamente, no estaba seguro de hacerlo bien, pero los gemidos de Dean lo animaban.
Después de varios intentos pudo meterlo en su boca por completo, el humano se quejaba de placer mientra se aferraba a las sábanas.

-Para Cass- Su vos era ronca- por favor. No quiero terminar de esta forma.

Castiel entendió a que se referia y se acomodó entre sus piernas.
Alineo su miembro en la entrada del humano dispuesto a penetrarlo.

-No Cass- Lo frenó- así me harás daño.

-Yo... lo siento... No se como- los nervios lo atacaron otra vez.

Dean se incorporó y busco en su mesa de luz. Sacó una pequeña botella y se la tendió al Angel.

Castiel se froto el miembro con el lubricante y puso otro poco sobre sus dedos, según las indicaciones que Dean le habia dado.
Comenzó a prepararlo muy lentamente, no quería lastimarlo. Pero Dean no tenía tanta paciencia, lo apuraba. Cuando el segundo dedo entraba con facilidad, el humano no quiso esperar.

-Ya haslo Cass- Esta demasiado exitado, no aguantaría más.

Castiel asintió. Se acomodó y entro en él muy lentamente. Demasiado lento para el gusto de Dean. Él lo quería completo y lo quería ya. Cuando lo tuvo completamente dentro, tomó al Angel de las caderas y lo insito a moverse.

Castiel se movía en un vaivén lento y tímido al principio, pero la excitación lo sobrepasó. Sus manos apretaban con fuerza los muslos del humano, mientras entraba y salía de él de manera errática.
Dean gemia y pedía más sin ninguna vergüenza, frotaba su miembro ayudado con la mano de Castiel. Hasta que no pudo más y derramó su semen en las manos de ambos.
Castiel sólo necesito dos embestidas más para terminar dentro del humano que aún no se recuperaba del orgasmo.
Se quedaron en la cama en silencio acostado uno junto a otro con la respiración aún agitada, mirandose.

Dean vio muy sorprendido como Castiel pasaba la lengua por la mano que todavía tenía su semen.

-Cass... que-

-Ahora entiendo- dijo el angel y el humano le dedicaba una mirada interrogante- entiendo porque al Castiel de la historia le gustaba tanto.

Dean no pudo evitar reír. Y lo abrazo acomodandose sobre su pecho.

-Y esa esa es sólo una historia. Tengo más.

-¿Cuántas?

-Muchas. Mi laptop sólo tiene una carpeta: Slash Fiction.