Make A Wish [Soukoku One-Shot]

°Capitulo Único°

—Hoy fue un día muy productivo, Atsushi-kun~ Deberíamos hacerlo más seguido— El peliblanco le respondió con su dedo pulgar en alto, se apoyo en la pared junto a la puertas de la Oficina tratando de regular su agitada respiración.

¿Se le podría definir día productivo caminar por la ciudad sin descanso alguno? Pues para Dazai, ese era el concepto para día productivo.

— ¡Feliz Cumpleaños!—Gritaron todos al unisonó entusiasmados, tirando confeti en el proceso.

Una sonrisa fue plasmada en el rostro del castaño, quien no tardo en reunirse con sus demás compañeros quienes lo abrazaron al instante dándole sus felicitaciones.

Hace ya unos días que habían pensado en hacerle una fiesta sorpresa al castaño; estaban al tanto de que este era un poco reacio al mencionar que su cumpleaños estaba cerca o en decirle que con gusto podrían hacer una pequeña reunión para celebrar entre colegas; pero este siempre se rehusaba diciendo que no era el tipo de persona que le gusta celebrar su cumpleaños o que solo lo veía un poco innecesario, de igual forma eso no los detuvo.

—Solo por hoy podrás hacer lo que quieras—Kunikida le dio dos palmadas en sus hombros, mirándolo con una pequeña sonrisa.

El castaño rio con el comentario. Quiso decir algo como "Si ya todos los días hago lo que quiera y eso te molesta" pero prefirió solo dejarlo en su mente, era mejor aprovechar que Kunikida andaba de ese buen humor y no molestarlo.

Claro que Dazai no se encontraba demasiado sorprendido por la "Fiesta sorpresa", le parecía raro de por si el hecho de que Kunikida no lo estuviera bombardeando con mil y un mensajes, llamándolo cada cinco minutos para exigirle llegar temprano al trabajo y dejarse de sus estúpidas ideas suicidad por un día, o que Atsuhi le llevara para todos los lugares menos a la Agencia. Lo veía venir, pero se sentía feliz y agradecido por el gesto.

—Feliz cumpleaños, Dazai-san— El ultimo en felicitarlo fue el albino, podía notarse lo cansado que estaba por la gran caminata.

Atsushi fue quien soltó la pregunta un día en la Agencia, tenia curiosidad.

Y fue él quien tuvo el entusiasmo de dar la idea y ofrecerse a ser la "distracción".

—Así que, Atsushi-kun, fuiste tú el encargado de distraerme para no llegar a la Agencia temprano. Que inteligente de tu parte. —Revolviendo los cabellos blanquecinos con una mano como gesto cariñoso, decidió unirse con los demás.

Comenzaron a servir bebidas, dándole al anfitrión de la velada un vaso de su sake favorito.

Todos reían alegres haciéndose bromas entre sí, engullendo los platillos de comida hechos especialmente para el castaño.

Yosano no tardo en embriagarse. Kunikida trataba todo lo posible de arrebatarle la botella de vino de sus manos pero esta lo esquivaba o le amenazo diciéndole que si se acercaba unos metros más no duraría en usar su habilidad sin piedad. Claro que a los pocos minutos olvido tal cosa, ya que se puso a hacer comentarios un poco subidos de tono al rubio, logrando que sus mejillas de estas quedaran de un rosáceo casi permanente mientras transcurría la velada.

— ¡Vamos Dazai-san!— Exclamo Naomi, dándole los últimos detalles a la mesa decorada por ella mientas que su hermano mayor posicionaba el pastel sobre esta. — Deje de estar tanto tiempo en el teléfono, parece como si en poco tiempo fuera a recibir alguna clase de llamada avisándole que gano la lotería.

—No seas tontita, Naomi-chan~—Respondió el castaño, riendo por el comentario de la chica. Dejando su teléfono en uno de los bolsillos de su abrigo, sin antes darle una última mirada a la pantalla.