Admiradora secreta (Park Jimin)

Nota 3 (narracion)

(Jimin)

Llegue temprano al aula.  No era una costumbre,  pero...  No tenia otra alternativa. 

Era mi única escapatoria.  La relación con mi padre cada día se iba deteriorando mas.  Era imposible estar en casa.

Discusiones,  una tras otra,  no existía día en la que estuviéramos bien.  Eso ya no existía desde hace mas de dos meses.  

Me senté en medio del aula y deje caer mi mochila aun lado. 

Recoste mi cabeza en la mesa de la silla,  y empecé a cantar en una de las canciones en las que estaba trabajando. 

Butterfly.

Me recordaban a mi madre.

Era una canción muy hermosa, la había escrito para ella,   que ahora ya no esta junto a mi,  pero si en mi mente y corazón.

Recordé las notas que desde hace dos días habían aparecido en mi casillero,  y aun no se ni como,  ni quien lo hizo.

Me acomode en mi silla y tome mi mochila,  y en una de las bolsas,  saque las dos notas y las leí. 

Quien quiera que fuera,  sus notas me hacían sonreír.  Decía cosas tan lindas, no como los de siempre,  que traían un numero y el típico "Llámame". 

Eso ya me tenia aburrido.  Pero ella...  Lo que decía en esas pequeñas notas,  esas pequeñas notas de color rosa,  adornadas siempre con un corazón,  me hacían sonreír,  me hacían sentirme bien. 

Ella hablaba de todo lo lindo que había en mi. 

Aunque es difícil aceptarme. 

No me gusto. No me gusta mi cuerpo,  ni mi sonrisa,  pero ella hace que empiece a tratarme bien.  Le gusta mi sonrisa,  así que intento sonreír mas,  aunque por dentro...  No quiera hacerlo. 

Veo la nota y observo su caligrafía. Tan clara,  tan suave.

Siento que es una chica dulce,  cariñosa,  que disfruta de la vida. Eso es lo que me da a entender la manera en la que escribe.

Seguía cantando en voz baja,  hasta que sentí mi celular vibrar en mi bolsillo izquierdo,  lo saco y observo la pantalla.

Atiendo la llamada mientras sigo observando las notas.

-Hey,  Park- dijeron al otro lado de la linea.

-Hey,  Yoongi ¿Que tal? - respondí.

-Podría irme mejor...  ¿Y tu?-

-Podría irme mejor...  - repetí

-¿Donde estas? -

-En el aula de Literatura...  -

-Bien,  voy para allá. - dijo y me colgó. 

-Okey- dije mirando la pantalla de mi celular y nuevamente lo guarde.  Mire por ultima vez los papelitos y los guarde,  con sumo cuidado,  en mi billetera. 

~•~

Cuando vi a Yoongi en la puerta,  me hizo una seña para que lo siguiera.  Mire mi reloj,  ya habían pasado 20 minutos de la hora,  por lo que llegue a la conclusión de que no habría clase.

Me levante,  tome mi mochila y me acerque a Min, al cual salude chocando nuestras manos.

-¿Que sucede,  Jimin? - dijo mientras acomodaba su cabello.  Yoongi siempre se debe ver bien.  #VivaElSwag

-Lo mismo de siempre,  Min,  ya sabes.  - suspire algo triste.  -No sabes como extraño a mi madre...

-Lo siento,  Park,  en serio- puso su mano izquierda en mi hombro.  Yo solo mire hacia mis pies,  era un gran dolor,  desde que ella se fue... No siento ser el mismo. 

-¿Que clase tienes?- dijo intentando cambiar de tema. 

-Ingles.. ¿y tu? - le mire mientras acomodaba mi gorro.

-Igual-

-Bien,  acompañame a mi casillero,  necesito recoger el libro y mi cuaderno. 

-Claro,  claro.  Vamos.

Caminamos en silencio por los pasillos.

-Hey,  ¿Iras a la fiesta que esta organizando Jooheon?

Oh cierto,  lo había olvidado.  Jooheon es también uno de mis mejores amigos. También juega en mi equipo de fútbol.

-Eh..  Creo que si.  No lo se...

-Hey,  vamos.  Sabes que es el que hace las mejores fiestas del instituto. 

Bueno,  tiene razón. No había nadie mas que hiciera fiestas mas geniales que Lee.

-Esta bien,  iré.  ¿A que hora es? - dije mientras caminaba hacia mi casillero y lo abría. 

-A las 8... -frunció el ceño- ¿Jimin?  ¿Estas bien?

No respondí. Otra nota, otra nota color rosa.  Sentí como se formo una sonrisa en mi rostro.

-¿Jimin? ¿Pero que...?  Oh,  ahora entiendo.  -dijo con una leve sonrisa- tienes una admiradora,  ¿eh,  galán? -dijo en tono burlón.

-Callate, Min. Pero si,  creo que es así. 

-¿Otro numero telefónico? -dijo mientras me quitaba el papel de las manos.

-¡Hey!  -intenté quitárselo. En vano.  Maldito azúcar,  no se como lo hace,  pero siempre evita mis movimientos.

-Demasiada ternura,  me da diabetes,  asco.  -dijo dándome la nota. 

-Idiota.  -rodé los ojos y la nota la guarde junto con las demás,  la leería luego. 

Saqué mis cosas y las metí en mi mochila. 
Cuando me di vuelta,  choque con una chica haciendo que sus cosas cayeran al suelo. 

-Lo s-siento t-tanto...  -dijo en un tono timido.

-No,  yo lo siento,  fue mi culpa.  -me agache y la ayude a recoger sus cosas,  en un momento,  nuestras manos rozaron,  y ella alejó su mano. No levantó la mirada en ningún momento. 

Sonó la campana,  y el sr.  Lewis,  no era muy paciente que digamos. 

Así que me apresure a ayudarla,  no la iba a dejar ahí sola. 

Cuando le pase el ultimo libro,  se levanto y sin siquiera mirarme dijo un pequeño -Gracias- yo solo me limite a sonreír levantandome y corriendo hacia el salón de ingles,  jalando a Suga del cuello de la camisa.