María despertaba de su cama, aún adolorida, todavía resuena en su cabeza las palabras que Alfred le había dicho días atrás. No sabía nada de el, no desde la última batalla, donde perdió gran parte de su territorio Norte. Aún se sentía triste, humillada y derrotada, estaba deprimida con horribles marcas por todo su cuerpo que aún no habían sanado.-Soy una estupida- Dice Maria, en ese momento comienza a llorar, desoladente,como aquellas mujeres que lloran cuando sus maridos se van a la guerra o ven a un hijo morir, aún peor de como lloran los bebés recién nacidos, un llanto que se escuchaba por toda la casa y las sirvientes por no molestar solo se limitaban a escuchar y a prepárale las medicinas que el doctor le recetó para su pronta recuperación.
Tocan la puerta, una sirvienta va y la abre, es Antonio que había zarpado desde el momento en que se enteró que su hija iba a tener su batalla final y en Europa apostaban por quién iba a ganar.
-¿Está Maria?- Pregunto Antonio
- Si pase señor- Dice la sirvienta
-Gracias
-Iré a buscarla señor -
-Okey, gracias -
La criada sube con las medicinas de Maria, toca la puerta y Maria para el llanto.
-Señorita, ya es hora de sus medicinas
- No quiero esas mugrientas medicinas, ya llevo 2 días tomándolas y no pasa nada.
-Es por qué solo a transcurrido 4 días desde la batalla, y solo lleva 2 días tomándolas señorita.
-NO LAS QUIERO!!!- Grita Maria.
-Su padre está abajo señorita- Dice con una voz temblorosa.
-Hágalo pasar por favor- Dice Maria secando sus lágrimas.
-Pequeña, ya se que ese bastardo te hizo daño- Dice Antonio mientras seca las lágrimas de Maria- Me duele verte así pequeña- Le da un pequeño beso en la frente.
María solo se limitó a cerrar sus ojos, seguía pensando en esas palabras.
Algo repentinamente la saco de sus pensamientos, sentía unos brazos rodeando su cuerpo
-Con migo siempre estarás bien; a mi lado- Dice Antonio mientras abraza a Maria.
-Padre te quiero, se que siempre contare contigo y tú conmigo- Dice Maria mientras corresponde al abrazo, el cual no duró mucho.
-Señorita, perdone por la interrupción pero la están buscando- Dice una muchacha, haciendo que Antonio se separa rápidamente de Maria.
-¿Se puede saber quién me busca?- Pregunta Maria un tanto confundida.
-El señor Alfred señora- dice su mucama apunto de retirarse.
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Siempre serás mía
FanficEsta es una historia de amor de dos naciones que se quieren, se aman, pero no pueden estar juntos por diversas razones Acompáñame a ver esta historia de USAXMEX En colaboración con Valentina(está historia la hemos creado las dos,crédito a las dos XD...