APÉRITIF ➥ jinkook.

Capítulo 1.

SEOKJIN

11 de julio del 2010.

Se había acostumbrado a mirar los mismos rostros durante todo el mes, los noticieros no hablaban de otra cosa que no fueran las desapariciones de tres jóvenes que comenzaron a ocurrir a inicios de julio.

Todos los días en Osan no se mencionaba algo que no tuviera que ver con el paradero de Park Sunhee, Kang Daehyun y Ahn Sooyoung. Pero no era raro, Osan no era una ciudad que diera de hablar, no había nada interesante en ella hasta que las desapariciones empezaron. Aquella noticia era la única de la que todos comentaban, ya no lo eran sus obras, no por ahora. La gente no quería hablar de arte cuando delante de ellos tenían un problema tan grande. Y le resultaba bastante irritante que por un momento se sintió mal de sus acciones. Quería sentir empatía pero le era imposible, irónico. No lo haría. No dejaría que eso le hiciera sentir mal.

Cada día los periódicos tenían un nuevo encabezado y cientos de lectores curiosos, buscando una nueva nota, nuevas pistas y un sospechoso.

La Policía seguía buscando a las tres chicas y la mayoría en la ciudad fueron voluntarios en la búsqueda. Día tras noche, no hacían nada más que buscar al trío de estudiantes que habían desaparecido sin dejar rastro alguno, sin dejar ninguna pista que las llevara a su paradero. Osan tenía la esperanza de que sus esfuerzos no serían en vano, que tarde o temprano darían con Sunhee, Daehyun y Sooyoung. Sin embargo, sus esperanzas se vieron destruidas tres días después cuando la primera joven apareció. Park SunHee estaba muerta.

Su cuerpo fue encontrado en la entrada al bosque, la Policía de Osan informó que el corazón y los pulmones no fueron hallados. Llevaba días ahí, tenía golpes por doquier. Aún con vida, le habían cortado los músculos risorios de su rostro, para mantenerla con una grotesca sonrisa y su tormento duró aproximadamente una horas cuando finalmente cortaron su cuerpo por la mitad.

"Osan entra en pánico, el caso de Park Sunhee va más allá que un simple asesinato. La Policía pide a los ciudadanos información que ayude con las investigaciones para capturar al asesino..."

Soltó una pequeña risa mientras escuchaba a la conductora terminando de dar la noticia, habían tardado tanto en encontrar a una insignificante persona como Sunhee aún con tantas personas buscándola. Se sentía orgulloso, otra vez había sido más inteligente que ellos. Siempre sería así.

Llevo un trozo de carne a su boca, masticándolo lentamente, degustándose con el delicioso sabor de esta. Sonrió. ¿Cuánto tiempo tardarían en encontrar a Daehyun?

JUNGKOOK

25 de julio, 2010.

El segundo asesinato se registró la mañana del lunes cerca de Seúl. Kang Daehyun fue la segunda víctima. La manera en la que murió fue similar a la de Park Sunhee, con la diferencia de que Kang no mostraba signos de tortura como las que Park tenía. Su cabeza, su corazón e hígados no fueron encontrados por más que buscaron alrededor. Sin embargo, su asesino había sido más suave con ella, o al menos eso parecía.

La gente ni la policía siguió buscando a Sooyoung con vida, la única chica desaparecida que faltaba. Habían tardado tanto en descubrir los otros dos cuerpos que seguramente la carismática joven ya había sido asesinada. Con desgano, buscaban su cuerpo, pero las búsquedas eran en vano, Sooyoung, viva o muerta, no aparecía.

6:22pm.

-Osan no es una ciudad común.- Jaehyun habló de repente.

- ¿Te refieres a los asesinatos? -preguntó divertido-.Si no fuera por eso, sería tan común, como toda ciudad en Corea.

Y era verdad, desde que todo eso pasó Osan se sentía diferente, el aura aburrida de sus calles ahora producían misterio, ahora, la esencia de Osan era sus crímenes. Lo que a Jaehyun le provocaba temor a Jungkook lo entusiasmaba de una manera diferente; no quería ser un asesino, no quería ser el desconocido que estaba atormentado a la ciudad. Simplemente estaba intrigado pero no como los demás, no estaba pegado todo el día a los periódicos o a los noticieros esperando noticias recientes sobre algún sospechoso o nuevas pistas. Sólo esperaba a que el asesino atacara de nuevo, le gustaba pensar cómo sería su nuevo asesinato.

Le gustaba la idea de que Osan fuera un lugar interesante ahora.