La Infección

Capitulo 8. Historia alterna: Alejandro.

Después de que alan dijera que fuéramos al supermercado nos dimos prisa para llegar lo mas temprano posible. El combustible era de la mitad así que fuimos a una gasolinera mas cercana y como ya no hay mucha vida en el planeta tierra o tal vez nada más en México.

Nadie lo sabe.

El supermercado, bueno era una plaza comercial, no estaba un poco lejos de donde estaba el colegio así que llegamos después de media hora después de haber salido.

Durante el transcurso del camino Jesús y Carlos platicaban sobre videojuegos. Creo que ellos si sobrevivirían en este Apocalipsis zombie ya que su mundo se basaba en videojuegos.

Llegamos y para entrar a la plaza comercial teníamos que pasar por el expedidor de boletos para estacionamiento. Así que agarramos el boleto que salía de la maquina y entramos en el estacionamiento, este era muy grande al igual que la plaza comercial. Pero el estacionamiento era al aire libre, como eran días de plaza por la tarde no habían muchos coches. Lo estacionamos rápido y bajamos del coche y empezamos a caminar hasta la puerta del plaza comercial esta era automática y de cristal. Lo raro fue que se abrió y se suponía que el mundo se detenía en Apocalipsis.

Entramos y aun era como la habíamos recordado, era de dos pisos la plaza.

Caminamos un rato para llegar al supermercado que estaba del otro lado de donde nosotros nos encontrábamos y justo cuando dimos vuelta para llegar al centro de la plaza y justo ahí había una gran manada de zombies agachados como comiendo, peleaban para poder comer un poco así que no nos veían.

Aun lado estaba Jesús en shock, y a su lado estaba Carlos con miedo.

-¿Donde están las armas?- susurre.

- En el auto.- susurraron los dos.

- ¿y por que no se las trajeron?- pregunte.

-Pensamos que no seria necesario.- dijo jesus.

-Te tengo noticias nuevas, si las necesitamos, ahora dense la vuelta y regresemos por las armas-. Susurre.

Dimos la vuelta y para nuestra sorpresa algunos zombies se acercaban.

Voltee hacia los lados y ahí estaba nuestra salvación, una entrada, se me había olvidado que habían varias puertas de cristal y aun enfrente de esta, habían unas escaleras que iban a la segunda planta.

-¡Corran! A la escalera.- dije.

No tuve que volver a repetirlo para que hicieran lo que dije.

Corrimos, cuando llegamos a la escalera subimos todos los escalones y empezamos a correr hasta llegar a marti que se encontraba en la segunda planta.

Habían zombies en la segunda planta, pero no tantos como en el centro. Eran fáciles de esquivar asi que no nos preocupamos. Seguíamos corriendo. Cuando llegamos la tienda estaba cerrada. ¿Y ahora que hacemos? Claro, romper el cristal.

No lo pensé 2 veces y de una patada rompí el cristal. La alarma de la tienda empezó a sonar. Se suponía que no tenia que tener energía la plaza. Genial, la alarma iba a atraer a los zombies.

Entramos rápido a la tienda, Jesús y Carlos se pusieron a buscar cosas importantes para sobrevivir. Mientras yo me quede vigilando.

-Rápido- grite, algunos zombies se empezaban a juntar en el crital,fui a buscar en la tienda y agarre un medio guante que solo cubría mi palma de la mano y lo demás lo dejaba desnudo.

Agarre un vidrio roto que era largo y puntiagudo y a los zombies que estaban cerca les clave el vidrio en el cuello y algunos en el cerebro.

Se acabo el filo de este y regrese a la tienda.

Carlos y Jesús ya tenían armamento en una maleta de las que se llevaban al gym, una grande y larga.

La abri rápido y encontré cartuchos de armas, desarmado res, y eso era todo. En serio?

-¿Tanto tiempo para esto?.- dije mientras agarraba un desarmador.- vámonos aun tenemos que ir al supermercado.

No dijeron nada.

Corrimos, llegamos al final de la plaza donde daba vuelta para regresar, la plaza era un gran ovalo.

En el final, estaban las escaleras, así que bajamos por ellas, cuando íbamos bajando nos dimos cuenta que no habían muchos zombies, que extraño.

Aun con el desarmador en la mano continuamos bajando, el supermercado estaba cerca, bajando las escaleras y dando la vuelta hacia la izquierda, el supermercado era grande, como cualquier otro, este si estaba abierto, el sonido de la alarma de Martí no se oía donde nosotros nos encontrábamos.

Entramos y eduardo y todos ellos se dirigieron a la área de comida, tenían que llevarse latas de comida y cosillas así.

Esta vez fui a traer los sleeping's, que estaban en el área de acampar.

Como era un pasillo muy pequeño entre rápido, solo agarrando eso y justo saliendo vi algo, un rifle, debo tenerlo me dijo mi subconsciente.

De igual manera, le di una patada al vidrio, se rompió y la agarre, era de cacería esta.

Apresure el paso y esquivando todos los pasillos llegue a donde estaban ellos, ellos estaban en el área de dulcería, agarraron de todo tipo de dulces y los metieron en la maleta que llevaba, esta ya se estaba llenando. Todo era silencio.

Se lleno y de repente. Carlos saco otra, ¿de donde la saco?

Pasamos a lo del cereal y se llevo 2 cajas. ¿Latas de comida? Se llevo una por cada cosa. Se llevaron muchas cosas.

-Vamos por medicinas, las necesitamos, nunca sabremos cuando alguien se enfermara.- dijo Carlos.

Fuimos y al llegar parecía que asaltaba la farmacia. Llevaron muchos medicamentos.

Se lleno de nuevo su segunda maleta.

-Es hora de irnos-. Dije.

Salimos del supermercado. Todo iba bien, ellos siguieron caminando, pero algo me llamo la atención, mire hacia la puerta de cristal y vi exactamente como entraba alguien a una camioneta y en la parte trasera de ella decía "Evil" en rojo.

Al que vi llevaba como una correa y de ella estaba un zombie lo subieron a la parte trasera de la camioneta donde habían mas zombies.

Entre en shock, me paralice. Vi, como salía otra camioneta tras la que decía Evil.

Continúe caminando, ya iban un poco adelantados, corrí y los alcance. La arma era un poco pesada. Y empezamos a escuchar ruidos, detrás de nosotros venían zombies, estos no eran normales. Estos corrían, para matarnos.

Nos pusimos a correr, la plaza era enorme y teníamos que llegar al otro extremo.

-¿alguien tiene dinero?- dije.

- ¿pides dinero en medio de un Apocalipsis zombie?- dijo Jesús.

- toma- Carlos me dio el dinero.

Lo tome. Seguíamos corriendo. Llegamos al fin, me detuve, tenia que buscar el boleto para poder salir de la plaza.

Lo encontré y lo deposite en

La maquina, 3 pesos por el estacionamiento. Lo deposite y rápido salió el boleto.

Ellos se habían adelantado, un zombie me alcanzaba. Vi como subían las cosas y rápido entraron.

Seguí corriendo, llegue. El zombie estaba cerca.

Abrí la puerta y encendí el coche. Lo puse en marcha y salimos, deposite el boleto en la ranura de la maquina que nos dejaba salir. Nos pusimos en marcha y en media hora ya estábamos llegando al colegio.

Cuando llegamos vimos a todos agrupados.

Carlos dijo algo y conteste. Me encamine y ahí estaba Sebastián muerto.