Channie-ah!

Soplando

Durante su estadía en el festival, Jongdae no paraba de tocar con cierto temor y asombro los adornos de animales hechos de papel, Chanyeol no sabia si sentir algo de envidia de esas figuras o tan solo pensar que la condición de Jongdae impedía que oyera las veinte veces que lo llamó para ir a otro sitio.

Esta vez la envidia ganó. El papel en forma de ave se ganó la mirada de desprecio del alto.

—Jongdae, tenemos que buscar un lugar donde dormir. Vámonos.

No.

Jongdae no hizo caso.

Chanyeol estaba tan irritado que pensó por unos segundos la posibilidad de irse mientras el otro estaba distraído. Si se iba no demoraría mucho en encontrar a Kyungsoo, era una buena idea.

A paso ligero y sin voltear a ver, Chanyeol comenzó a caminar entre la gente silbando una canción, vaya, que fácil habia sido eso. Muy fácil. Ya muy cerca de la entrada su corazón impidió que avanzara un paso más. ¿Por qué la debilidad era tan jodida? Volteo a ver a la feria con algo de tristeza, Jongdae no duraría un día sin el, la inocencia del castaño era demasiado para un mundo tan cruel como el que vivían. Murmurando cosas como: ¨Jongdae idiota¨¨Jongdae mas te vale portarte bien¨¨Espero no demorarme tanto para volver a ver a Kyungsoo¨¨¿Dónde estás Jongdae?¨ llegó hasta el lugar donde había estado antes.

Jongdae no estaba en el lugar donde lo dejó hace un rato. ¡Carajo! Con su corazón alterado comenzó a ver a su alrededor en busca de la cabellera castaña de Jongdae. Sus ojos ubicaron a una pareja comiendo muy amorosamente algo de comida chatarra, la chica le daba de comer con una sonrisa en su rostro, el joven le hacia cumplidos mientras la miraba con dulzura. Las manos de la chica pasaron rápidamente a cojer un abanico cuando vio que su novio había comido demasiado ají por lo visto, ella abanicaba fuertemente con la esperanza de ayudar a su novio, el joven se calmó al rato. Sus ojos miraron hacia un costado de ellos y vio a Jongdae parado mirando a la misma pareja.

Con una sonrisa de alivio caminó hacia el.

—Siempre terminas asustándome niñato.

Chanyeol se paró en frente de Jongdae.

—Channie-ah—Jongdae le sonrió mientras le mostraba en alto una bolsa de comida, la misma comida que comían la pareja anteriormente.

—¿De dónde lo sacaste?—Chanyeol miró por todos lados esperando algún reclamo.

—Mph—Jongdae señaló a la joven que miraban.

—¿Ella te obsequió eso?—La cabeza de Jongdae asintió.—Bien, vayamos a buscar un lugar donde pasar la noche. ¿Agradeciste por la comida?—Jongdae sonrió, Chanyeol aun no se acostumbraba a las palabras silenciosas del más pequeño.

Caminaron por mucho hasta encontrar un buen lugar cerca de un mercado improvisado por gente creyente en horóscopos e incienso. La señora de los collares fue muy amable al prestarles algunas colchas para poder dormir bajo la luz de la luna y al costado de fogotas con gente muy alegre.

—¿Está rico?—Preguntó Chanyeol mirando a Jongdae que comía embarrándose todo, el joven mostró sus dientes superiores mientras mordía su labio inferior. Esa manía que a Chanyeol ahora le parecía adorable.—De verdad está muy rico, hace bastante que no comía algo así—Chanyeol mordió un poco de su hamburguesa—Sabes, la primera vez que comí es...—Chanyeol se quedó callado cuando Jongdae comenzó a darle aire con un cartón viejo—¿Qué haces?—Jongdae solo inclinó su cabeza a un lado con ojos de perrito curioso—No me pica la boca, no lo hagas—Chanyeol trató de detenerlo quitándole el cartón, pensó que con eso pararía pero...—Jongdae, no tienes que soplarme, no he comido ají, ya basta—El menor solo sonrió mientras seguía soplando, Chanyeol suspiró cansado. Tener a Jondae soplándole la cara le incomodaba un poco así que con algo de cansancio tomó el cartón que estaba a su costado y se lo dio—Ten, hazlo con esto—Jongdae feliz de saber que estaba haciendo algo bueno comenzó a abanicar a Chanyeol con una mano mientras que con la otra comía su propia hamburguesa.

Sin duda alguna ese era el momento más raro, inocente y tierno que había experimentado en su vida.