Capítulo 3.

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   《Flashback

25/06/2016
Desperté y miré la hora, 5:30, gracias a dios había dormido temprano la noche anterior.
Mire hacia la ventana, genial, era un día soleado, esos para mi eran los más tristes.
Me paré de la cama y entré al baño con un ojo cerrado todavía, me hice una coleta y me lavé la cara, me cepillé los dientes y me bañé, cuando salí de la ducha, me dirigí a mi armario haciendome la misma pregunta de todos los días ¿Que me pondré? Me decidí por una playera blanca lisa, unos jeans ajustados y mis botines de siempre, no fue difícil esta vez, igual nadie me ve en el trabajo.
Deje mi cabello suelto y me maquillé un poco, no quería que pensaran que me preocupaba tanto por eso a las 6:30 de la mañana, tomé mi bolso y me miré una vez más al espejo, me reí de mi misma y tomé mis llaves antes de salir de casa.

-Buenos días cariño- me saludo la amable señora de la limpieza en la cafetería

-Buenos días señora Elizabeth- sonreí amable y abrí la puerta para que ambas entráramos

Entré a la cocina y tomé mi delantal, me lo puse y amarré mi cabello por 'higiene' aunque realmente nadie respetaba eso. Un rato después llegó Zac, el chico que lavaba los platos y Tim, el cocinero.

-Buenos días- Zac era tan tímido que a veces creía que se desmayaría antes de terminar de dar los buenos días

-Buenos días- sonreí

Entró rápido a la cocina y yo me quedé limpiando la barra

-Maldito tráfico, si no fuera por que necesito mantener a mi hija y a una mujer histérica, te juro que estaría en cama todo el día- entró Tim echo una furia, tomó su delantal, y tallo su cabello con fuerza

-Tim, si nadie necesitara dinero, ni yo vendría a trabajar, pero tanto tú cómo yo lo necesitamos, así que entra ahí y has lo que haces todos los días- le di un leve golpe en el brazo y el sólo puso los ojos en blanco y rió

Un rato después la cafetería estaba casi llena, estaba corriendo de un lado para otro y la gente estaba desesperada, demonios, ¿Acaso no entienden que tengo más gente que atender? Estaba tan apurada que no me fijé que venía un chico frente a mi y le tiré todo el café encima

-¡Diablos! ¡Está caliente!- se quejó

-Dios mío, disculpeme, no me di cuenta, estoy apurada y hay mucha gente, yo.. lo siento en serio- Me tapé la cara de lo apenada que estaba

-Está bien, no hay problema, yo estaré por ahí- señaló una mesa vacía- Tú atiende a la gente y quiero que cuando no tengas nada más que hacer, me atiendas a mi, y no te preocupes, puedo esperar mientras mi playera se seca un poco

-Espera ¿Qué?- Fruncí el seño

Sonrió y se fue a sentar a la mesa que había señalado, no entendí nada, pero no me iba a parar a pensar en eso con lo apurada que estaba.
Cuando ya toda la cafetería estaba en calma y ya no me quedaba más que esperar a que la gente se vaya para limpiar las mesas y la barra, me acerqué a su mesa acomodando un poco mi cabello que parecía un nido de pájaros.

-Lo siento por tardar, has visto lo ocupada que estaba ¿Que te ofrezco?- sonreí con mi pluma en una mano y mi libreta de pedidos en la otra

-Sólo hay algo que puede compensar lo que pasó hace rato- sonrió y apoyó su barbilla en ambas manos

-Puedo pagarte la tintorería- sonreí nerviosa

-No seas tonta, la camisa no me importa, quiero tu número- sonrió y dejo ver su dentadura perfecta

-Mi..¿Mi número?

-Así es- me miraba a los ojos y yo me ponía cada vez más nerviosa

-No le doy mi número a desconocidos- dije sin mirarlo a los ojos

-Bien, entonces tráeme un café, y esta vez lo quiero en una taza, no encima de mi ropa- hizo un guiño y sonrió

-Enseguida- me di la vuelta y me fui de ahí.

                   《Fin del flashback》

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