Darling [Evak,Skam] [IsakyEven]

Capítulo 13:

—¿Qué?—Digo extrañado ante la pregunta de Even.—Un segundo.—Tapo el micrófono.—Jonas para el coche.

—¡No puedo hacer eso y mucho menos en plena...

—Que pares el puto coche.—Ordeno y consigo lo que quiero.

El coche frena bruscamente. Todos me miran extrañados mientras yo salgo del coche. Camino lejos de allí.

—¿Even, por qué preguntas? ¿A que viene eso?

No entiendo como se ha podido enterar.

—No, quiero que tu me lo digas. ¿Te sigue gustando Jonas?

—Pues no, claro que no ¡si estoy contigo! ¿por qué me tendría que interesar otro?

—¡No lo sé, dímelo tú!

—Even cálmate y escúchame.

—¡No puedo calmarme cuando sigues saliendo con él como si nada!

—¿Como debería salir con él? ¿Quien te ha contado que me molaba?

La respiración pesada de Even me provoca desesperación por que hable, por que se deshaogue ya, sea lo que sea solo quiero solucionarlo cuanto antes.

—¡Eso no importa!

—¡Claro que sí!

—¡Me da absolutamente igual y a ti también debería!

—Even...—Decido hablarle despacio y con suavidad.—¿Estas teniendo un día malo?

—¡El peor de todos con diferencia!

—¿Quieres que hablemos sobre ello? No me mola Jonas.

De nuevo el silencio se apodera de la llamada.

—He vuelto a consumir y no tienes ni idea de lo arrepentido que estoy.—murmura.

Lo noto triste y realmente arrepentido. Se de sobra que dice la verdad.

—¿Por qué lo has hecho?—Le pregunto con suavidad.

—¿Te acuerdas cuando me preguntaste por...—Suspiro. Ya estaba dándome largas.—como me fue mi russ bus?

—Si, ¿tiene que ver algo con los..

—¿Con los chicos? Están aquí. Se me acercaron, yo...

No se por qué, pero ya quiero golpearlos.

—¿Te hicieron daño?

—Solo querían hablar, pero yo...

Me fijo en que Jonas mira hacia mí con recelo de brazos cruzados a mi espera.

Solo quiero irme ya para poder tener cerca a Even cuanto antes.

—Even...

—¿Qué?

—Jonas quiere que nos vayamos ya, ¿te importa que sigamos hablando dentro del coche?

—Jonas, siempre tiene que ser lo que diga Jonas.

—Even no empieces con eso porque no.

—Siempre lo que diga Jonas tiene que ir a misa.

—Even.—Repito aumentando mi tono de autoridad.—No te comas la cabeza con eso porque no hay nada. Jonas y yo somos amigos. Punto.

Bufa.

—Isak...esto no está...nosotros no estamos bien.

—¿Perdona?—Digo incrédulo.