Darling [Evak,Skam] [IsakyEven]

Final. Capítulo 19:

¡Quedaros hasta el final del capítulo que tengo cosas importantes que decir!

Una hora después a este capítulo subiré el epílogo😈😈.

Dejé a Isak dormir. Después de trece horas de viaje -pese a que se pasó como unas ocho durmiendo- y todo lo ocurrido aquí en Korgen respecto al tema de Mikael por una parte y luego Jonas, estaba exhausto. Así que lo dejé descansar y en todo momento acompañé como él hace cientos de veces por mí cuando estoy en uno de mis episodios.

Isak es de esas personas a las que le gusta en todo momento que la mimen y protejan. No se que tan mal lo puede haber pasado con el tema de su madre pero antes de yo llegar no aparentaba ser muy alegre. Lucía triste todo el rato y creo que, llenándolo de amor lo estoy salvando poco a poco.

-Even puedes irte a dormir.-Murmura con voz ronca tapándose hasta arriba con la sábana.

-No hasta que tú te duermas, cielo.-Estiro mi brazo con pereza y acaricio su pelo con suavidad.-¿no tienes calor con la sábana?-Niega con la cabeza.

Dejo de hablarle para que pueda dormir y yo pueda observar cada gesto con toda tranquilidad mientras él está dormido.

-¿Vas a quedarte ahí parado mirándome como un poseso?-Sonrío de lado.

De vuelta a las frases de las películas.

-Podría pero espero a que te duermas para poder hacerlo yo.-Isak voltea hacia mí. Tiene todo el pelo revuelto y una cara de sueño que no puede con ella.

-¿Conoces la cucharita?

-Duérmete ya, pesado.-Reímos un poco pero lo abrazo solo por complacerle. Beso su mejilla varias veces.-Te amo.

Isak solo se limita a asentir e intenta formular la palabra de vuelta pero se queda dormido conmigo encima.

Entre la manta y mi cuerpo yo no me explico como no tiene calor.

A la mañana siguiente me levanto temprano, ni siquiera el sol se situaba en ningún lugar del cielo visible para mis ojos. Isak sigue durmiendo tirado sobre mi cuerpo con la cabeza apoyada en mi pecho y sus piernas enredadas a las mías. Sigo sin explicarme como lo hace sin despertarme.

-Bebé...

-No...¡déjale!

-¿Eh?-lo miro ceñudo. Sigue con el ceño fruncido, en la misma posición de antes y, de repente ha empezado a sudar, su rostro a llenarse de lágrimas y a convulsionar.

-¡Que lo dejes!-Solloza y comienza a respirar muy agitado.

-Isak, despierta.-Le pido suavemente y lo sacudo un poco.-Bebé...-Acaricio su pelo, sus mejillas y de nuevo vuelvo a sus rizos.-Estoy aquí...

-Even...-Murmura no sin antes mirar a los lados en busca de algo o alguien. Sus ojos delatan el miedo. Debe de haber sido una pesadilla.-¿Donde está? ibas a dejarme por él.

-¿De que hablas?

-¿Donde está Mikael?

-Cielo, estabas soñando.-Le aclaro para que no siga pensando en el tema.-Tenemos cosas mejores que hacer para que pierdas tiempo en él.

A Isak no le gusta Mikael, lo peor es que ahora me doy cuenta del daño que puede llegar a hacerle su presencia en mi vida, así que lo mejor es que las cosas se queden como estaban desde el principio, tampoco me importa mucho si está o no, con el tiempo he aprendido a vivir sin sus locuras religiosas volotear cerca mío. Ya no me hace falta como antes tenerlo cerca para subsistir.

Ahora tengo a Isak.

-Recuerda que hoy hemos quedado en ir al parque acuático.

-¿los dos solos?