Intercambio Paralelo

Capítulo 1

Me llamo Max, no me gusta repetirme por lo que no diré las cosas dos veces, por eso de no remover la mierda. Me desperté a las 7:00 a.m desayuné, me vestí, cogí la mochila y  salí de casa, a esa hora era el único que se encontraba todavía en casa mi madre, ella ya se fue a trabajar y mis hermanos se fueron antes para quedar con sus amigos el primer día de carrera. Some Kind of Drug, esa era la canción que estaba escuchando de camino al instituto, la escuche como unas cinco veces antes  de llegar. Cuando entramos nos hicieron pasar al salón de actos para echarnos la misma chapa de siempre, los horarios, las actividades extra escolares y los campamentos de inversión lingüística, después nos llevaron cada uno a su clase correspondiente. No me había dado cuenta hasta ese momento de que por suerte había caído con mis mejores amigos, Natalie y Christian, los salude con la mano y ellos me hicieron un gesto invitándome a sentarme a su lado, cosa que yo acepte con mucho gusto. Eran mis mejores amigos desde que tenía memoria no había nada que no nos contásemos, bueno casi todo, nos dejaron marcharnos y decidimos irnos al Starbucks de la esquina y no, no nos tomamos un frapuchino o de fresa por si alguien se lo preguntaba. Me encantaban nuestras reuniones en petit comité, ya eran las 2:30 p.m pasadas por lo que nos despedimos y nos fuimos cada uno para su casa. Cuando llegué mi madre estaba terminando de hacer la comida, le dí un beso en la mejilla y me fui para la ducha, esta tarde tenía psicólogo.

 - ¿ Vas a tardar mucho con el agua caliente?- era  Josh, el gemelo mayor. 

- Ya salgo- me quedaba solo secarme el pelo, era la primera vez después del verano que volvía a ver a Katrina, mi psicóloga y quería estar presentable. 

- Recuerda que es a las 18:00 p.m

- Si mamá, no es la primera vez que voy- estábamos todos sentados en la mesa comiendo en absoluto silencio con el señor del tiempo de fondo. La mayoría de días solían ser así a no ser que a alguno de nosotros nos pase algo interesante o que alguno se quejase de la peste que desprende la pecera de Chad. 

Pero hoy era especialmente silencioso, por la tarde venía nuestro padre para ajustar cuentas con mamá por motivo de nuestros gastos y necesidades. La última vez que lo vi fue después de nuestra estancia en Ibiza este verano pasado, la mayor parte del tiempo lo pasamos en la playa al lado de una de las tiendas de helados más grande que he visto en mi vida. 

17:30 p.m 

Mi padre llamó a la puerta de mi cuarto en señal de que nos íbamos, cogí mi móvil y mi ordenador los metí en na mochila y me monté en el coche.  

- ¿ Qué tal el primer día de clase?

- Papá hoy solo nos han presentado.

-  Que soso eres hijo mío

- Joderr

- Esa boca - frunció el ceño pero lo hacía de una manera tan rara y peculiar que me entraba siempre la risa.

- Esa palabrota es la única que mamá permite en casa ya deberías saberlo - llegamos justamente al parking del psiquiatra.

- Ya está, quieres que después te recoja.

- Creo que se ya como volver.