«001»

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Mi respiración estaba acelerada. Corría como si no hubiese mañana. Mi loba me pedía a gritos transformarme pero simplemente no podía. Mi cerebro no respondía. Eché un vistazo hacia la persona que me estaba siguiendo y me pude dar cuenta de que eran 3 lobos de la manada vecina, los cuáles siempre se buscaban problemas con nosotros. Volví la vista al frente y divisé la casa de la manada no muy lejos. Tomé un poco más de impulso y me permití llegar a la entrada. Con la respiración entre cortada logré empujar la gran puerta y entrar. No había guardias afuera por el hecho de que era cambio de turno. Menos mal que nadie se dió cuenta de que....







—¿Mire? ¿Mire estás bien? —mi tío llegó rápidamente hacia mi y tomó mi rostro entre sus manos inspeccionándome. Mi respiración poco a poco se fue haciendo regular, gracias a que puse mis manos encima de mis rodillas y metí la cabeza en un hueco en mis piernas.





—Si, tranquilo tío. Tan solo salí a dar un paseo. —mentí.





"Mentirosa" se burló mi Loba.


"Tú no te metas, que no habría pasado esto si tu no me hubieras dado la idea de ir a explorar.

"Pero a la que van a regañar es a ti, boba."




Corté mi conexión con mi loba por el simple hecho de que siempre lograba salirse con la suya. Está más que claro que mi tío no me creía, por lo cual mostré una sonrisa gigante dándole a entender que no pasaba nada y que era un angelito. Me miró negando con la cabeza y se cruzó de brazos, claramente esperando la verdadera explicación. Hace a penas un momento estaba intentando salvar mi vida, lo último que quiero ahora son las preguntas de mi tío. También sabía de sobra que si le decía la verdad, no me iba a dejar salir jamás.




—Lee Mire Ya, quiero la verdad. —exigió al mismo tiempo que ladeaba a un poco la cabeza dándome a entender que ni de chiste le fuera a mentir de nuevo.



—Digamos que estuve explorando por allí, nada fuera de lo normal.




—Aún sigo oliendo tus feromonas de terror. Rhode, la verdad y es la última vez que....



—¡Bueno, ya! Estaba el bosque. —dije y mi tío me miró mal. —Y por accidente crucé un poquito el territorio. —hice una seña con mis dedos y mi tío abrió la boca para decir algo. —Y me venían persiguiendo unos lobos, pero estoy bien. ¿Eso es lo que importa, no? Bien, creo que eso es todo. —me di la vuelta para irme de ahí pero mi tío gritó mi nombre y no di un paso más. Con una mueca en los labios, me di la vuelta.





—¿En qué estabas pensando? Mireya primera y última vez que haces algo tan estúpido como eso. ¡No puedo creer que cruzaras la línea del territorio, sabes lo que puedes ocasionar! —me miro mal.



—Lo sé, no volverá a pasar.




Giré sobre mis talones y me disponía a comenzar a caminar cuando unos golpes en la puerta me sacaron de mis pensamientos y me detuve en seco. Todas mis emociones salieron disparadas, mi corazón se aceleró de una manera increíble, y mi loba interna comenzó a chillar de emoción. No entendía lo que pasaba conmigo. Mi tío abrió la puerta, y justo en ese momento, una oleada de un aroma exquisito inundó mis fosas nasales, quería llorar de emoción y no sabía porqué. Vi a un chico alto y rubio enfrente de mi tío, jamás lo había visto antes. Podía jurar que estaba enojado, por la forma en que aprieta su mandíbula y hace puños las manos. Escuché que le dijo algo a mi tío, quien de inmediato se hizo a un lado y lo dejó pasar.






Mi respiración estaba entre cortada y no podía entender el porqué. Mi loba chillaba y aullaba de emoción, hasta podía decir que sentía como sollozaba. Aquel desconocido se posó en frente de mí, y ahí fue cuando no me contuve más y lo abracé con todas mis fuerzas. Esto que sentía era porque había encontrado a mi Mate, estaba segura. Sin pensarlo dos veces me puse de puntillas para intentar acercarlo a mi, para así poder enterrar mi nariz en su cuello. Olía a cereza y a un aroma que no podía descifrar, pero era realmente muy masculino. Traté con todas mis fuerzas alcanzarlo, pero el simplemente no ayudaba con la tarea.







Mis brazos rodeaban su cintura, y mi cabeza descansaba en sus pectorales. Pero me di cuenta de que el estaba totalmente inmóvil, sus manos caían por sus costados. Alcé mi mirada para saber que pasaba con él, porque no me abrazaba, y cuando lo hice me di cuenta de que tenía la misma cara de pocos amigos.






—Los dejo solos, chicos. —anunció mi tío y lo escuché irse.





Me separé del chico y ahora pude ver que algo en su rostro había cambiado, ahora tenía una sonrisa socarrona en el rostro. Comenzó a pasearse de un lado a otro por la estancia, mientras yo me quedé en mi sitio sin saber que hacer. Soltó una amarga carcajada para después ir de un lado a otro más rápido, hasta que se detuvo y me miró. Fruncí el ceño pero no me atreví a preguntar nada. Tal vez de la emoción no podía creerlo si, eso debe ser.







—Esto debe ser una jodida broma, una maldita pesadilla de la cual ya quiero despertar. —soltó sin una pizca de humor.






Sentí algo en mi interior romperse, y fue cuando caí en cuenta de que el parecía no querer estar conmigo.




—¿Ocurre algo? —pregunté con un nudo en la garganta.



—Si, ocurres tú . Ocurre que esperé tanto tiempo para conocer a mi Mate y cuando por fin la encuentro, la Diosa de la Luna decide que eres tú. —dice mirándome de arriba a abajo con una mueca de disgusto.




Siento que mis ojos pican debido a las lágrimas que se que no tardarán en salir, pero me las arreglo para tratar de sonar calmada.




—¿Qué hay de malo conmigo?



Me inspeccionó por unos segundos que parecían eternos. Alzó una ceja y dijo;



—No cabe duda que la Diosa de la Luna me odia. —salió de la casa dando un portazo.










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Hola chicas, estoy muy feliz de iniciar esta historia. Espero le den mucho amor.

Gracias por leer

Escrita: 2016
Volviendo a subir y escribir: 2022

OliviaKingdom

Prohibida la copia y adaptación de cualquier obra de mi perfil. Son de mi autoría, mías.

Besos🌷

Luna rechazada  「Kim Taehyung 」 BTS Omegaverse Donde viven las historias. Descúbrelo ahora