Capitulo 1: Un accidente lo cambia todo.

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Hola, yo me llamo Peck, soy una chica de dieciséis años, rubia con mechas violetas y ojos azules. Tengo una vida genial, unos amigos qué casi se pueden considerar hermanos y un montón de primos con los qué me lo paso genial. Tenía una rutina normal, todos los días me levantaba, desayunaba y cogía él autobús al instituto. siempre me sentaba atrás en un sitio particular qué siempre me guardaban mis amigos, exactamente entre mi primo Roy y mi mejor amigo Draco, una vez en él instituto la mañana se pasaba rápido hasta él final de la jornada, luego un par de horas de entrenamiento y pasar toda la tarde con mis amigos en la playa surfeando o en él parque hablando y jugando al fútbol o baloncesto. Pero este no era un día cómo los demás, hoy no iba a haber ninguna rutina a la qué atenerme.

Este día me levanté cómo siempre para ir a clase. Era el primer día del curso y no quería llegar tarde así que me apuré. Cuando bajé a la cocina mi hermano estaba allí con su tazón de cereales, no vi a mi madre por ninguna parte así que pasé por el lado de mi hermano hacia la cafetera y antes de que pudiera preguntarle por nuestra madre me dijo:

- No está. Dejó una nota en la nevera diciendo que cogió el avión hoy por la mañana.

La verdad no me sorprendía, mi madre era una empresaria muy importante. Ya me había acostumbrado a levantarme y que ella no estuviera por varios días. Mi hermano Carlitos y yo vivíamos prácticamente solos.

Miré el reloj y ya daba las ocho así que metí prisa a mi hermano y salimos hacia la parada del autobús, llegamos por los pelos. Carlitos se sentó en uno de los primeros asientos con sus amigos. Yo subí detrás de el y al mirarlo me acordé de hace un par de años cuando iba en tercero de la ESO y me sentaba en el mismo sitio. Seguí hasta la parte posterior del autobús donde se encontraban mis amigos. Me senté en mi sitio y esperé a llegar al instituto. Hasta la tercera clase del día todo fue normal pero a la tercera hora un profesor entró por la puerta y me llamó al despacho de la directora. Me quedé sorprendida, haber ya estaba acostumbrada a ese despacho pero esta vez no había hecho nada así que me dirigí al despacho pensando en que podía haber hecho para que me llamaran.

Al entrar me llevé una sorpresa ya que mi hermano estaba allí sentado enfrente del director. Iba a preguntar que habíamos hecho cuando la directora me mandó sentarme al lado de Carlitos y nos dijo:

-Mirad chicos esto no es fácil de decir pero, ustedes saben que su madre cogió un avión esta mañana ¿no? – los dos asentimos confusos y el prosiguió – no se bien como decirles pero el avión se ha estrellado y por lo que nos han dicho su madre no sobrevivió.

Me quede en shock y mi hermano se echo a llorar. En 15 minutos había llegado nuestra abuela y nos había llevado a su casa. Tenía un mal presentimiento ya que sabía que nuestra abuela no nos podía mantener, no todos tienen dinero como para cuidar de dos adolescentes. Ahí fue cuando supe que todo iba a cambiar y que ya nada sería igual.

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El día siguiente nos encontrábamos en el funeral de mi madre. La verdad es que conocía a casi todo el mundo pero entonces vi a un un hombre que extrañamente me resultaba familiar. Este se acercó a mi abuela y comenzó a charlar con ella.

Al final cuando solo quedamos mi hermano, mi abuela y yo el hombre, este se acerco y nos preguntó:

- ¿Están listos para irse?

- Quirón aun no les he dicho nada – le regañó mi abuela.

- ¿Irnos a donde? – pregunté.

- Con sus hermanos – dijo mi abuela.

- ¿Con mis hermanos? ¿Esos que no veía hace doce años y que Carlitos nunca conoció? ¿Esos que viven con un padre que nunca quiso saber nada de nosotros? – dije claramente enfadada

- Su padre no estará el no vivirá con vosotros – dijo Quirón – bueno ahora tienen lo que queda de día para recoger vuestras cosas, nos iremos por la noche para llegar por la mañana.

Nueva vidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora