Para Amarte - CAMREN

Capítulo X

(Advertencia: no apto para menores de edad!)

-Puedo?- pregunto Lauren tomando mi blusa por las orillas.

Era una decisión importante, pero cada día que pasaba, el sentimiento que tenía por mi chica de ojos esmeraldas crecía y crecía. Me sentía segura con ella, me sentía querida y yo la amaba, sólo que no me era fácil aceptarlo, no cuando has llevado una vida tratando como juguetes a las personas para conseguir sólo una cosa de ellas y después votarlas a la basura, yo era una mierda, pero cuando estaba con Lauren no me sentía de esa forma, no me sentía yo, era como si al estar con ella, yo fuera otra persona, una nueva yo, una persona buena.

-Si- Levante mis brazos para que pudiera quitarme la blusa. -No tengo un gran cuerpo- me avergonzaba mi desnudez.

-A mi me encanta Camz- era tan Dulce

-Y a mi me fascina el tuyo- sonreí, fui sincera, siempre era honesta con ella.

Las dos estábamos en sostén, mis miedos ahí seguían pero preferí hacerlos a un lado, me merecía esto, siempre había querido estar con una chica, poder sentir piel con piel, pero no quería a cualquier chica y Lauren Jauregui no era cualquier chica.

Me levanté de la cama con un poco de temor, me quite mis pantalones frente a ella, ahora sólo me cubría mi ropa interior. Volví acercarme a mi novia lentamente, me coloque sobre ella para tomar su rostro con ambas manos y sumergirnos en un beso profundo, lleno de lujuria y deseo, jamás la había besado de esa forma y eso comenzaba a excitarme, entretenidas con nuestra sección de besos, nada nos importaba más en ese momento que saborear nuestras lenguas, decidí terminar el beso con una mordida tan caliente en su labio inferior para después bajar a su cuello y empezar a chupar cada centímetro de el, lentamente baje los tirantes de su sostén para dejar pequeños besos húmedos en sus hombros, ella intentaba quitar mi brasier pero no le fue tan sencillo así que me lo quite posicionandonos recostadas en la cama ella por debajo de mi, hize un recorrido por todo su cuello para llegar al lóbulo de su oreja y jalarlo con mis dientes para después meter mi lengua dentro de su oído, lo cual ocasionó que Lauren guardará un gemido apretando sus labios, le susurre "no te contengas" y entonces seguí con ese camino de besos húmedos por su clavícula, sus hombros, brazos, mientras con mis manos tomaba sus pechos y los frotaba lentamente, eran tan perfectos, podía sentir como sus pezones se erectaban de la excitación que ella sentía y mi centro comenzaba a humedecerse cada ves más.
Tome uno de sus pechos y lo lleve a mi boca, jugando así con mi lengua su pezón, después me pase a su otro pecho e hize exactamente lo mismo, Lauren comenzaba a gemir, y yo seguía con ese largo camino de besos, pasando por su abdomen y su ombligo, pero ella aún usaba su short, ese corto short que me excito desde que lo vi.

-¿Puedo?- le dije tomando su short por las orillas.
Ella asintió con la cabeza y yo tiré de el para sacarselo en un rápido movimiento con todo y sus bragas.
Acaricie sus torneadas piernas, las apreté y las abrí lo más que pude, comencé a besar sus muslos, su entre pierna y cada ves que me iba acercando su espalda se arqueaba, tenía tantas ganas de probarla que no me resistí más; pase mi lengua por toda la extensión de su vagina, una y otra ves pudiendo sentir ese ligero sabor salado en mi boca, tome su clítoris y lo chupe, seguía metiendo mi lengua en su centro haciendo movimientos rápidos con mi lengua, ella ya estaba muy exitada, sus gemidos cada ves eran más frecuentes y su espalda ya estaba arqueada, parecía como si estuviera apunto de llegar al orgasmo, yo quería sentirla llegar en mi boca pero también quería hacerla mía, así que me levanté y me quite la ropa interior que me quedaba, me levante hasta donde estaba ella para estar de frente y la bese para que pudiera probar el sabor tan embriagante de su vagina, su lengua estaba entrelazando la mía, sus dedos recorriendo mi espalda haciendo un camino hacia abajo hasta llegar a mi culo, lo tomo con ambas manos y lo apretó lo cual provoco que yo diera un fuerte gemido al instante, ella era todo en lo que yo podía pensar, mi mente no podía viajar más allá de la realidad que estaba viviendo en ese momento, nuestros cuerpos desnudos, abrí sus piernas y me metí entre ellas para moverme lentamente, su clítoris rozando el mío, nuestras vaginas están muy húmedas, podía sentir la fricción que estas hacían cada ves que me movía, cada ves más fuerte, más rápido, me estaba perdiendo en ella, pero comencé a lastimarla al ser agresiva, me aparte un poco y le di un tierno beso en los labios pero ella metió su lengua en mi boca, el beso comenzó a tomar de nuevo esa intensidad, la quería hacer mía, baje mi mano hasta su centro y comencé a trazar pequeños círculos por toda su extensión, Dios ella estaba tan húmeda que dejo mi mano llena de sus fluidos, sabía que estaba lista para recibirme así que abrí sus piernas y metí lentamente mi dedo medio.