Julia Stone era una chica de 16 años callada y tímida que veía como la vida pasa por delante, y veía a los chicos de su edad divirtiéndose y disfrutando. Ella siempre envidio a esos chicos. En clase de historia, Alison, una chica divertida y extrovertida se sentó a su lado. Ali era una chica que le gustaba hablar con todo el mundo, así que empezó a conversar con Julia. Para el final de la clase Julia y Alison habían formado un lazo. Como la siguiente clase la tomaban juntas, decidieron volverse a sentar una junto a la otra. Julia estaba feliz de tener a una amiga como Alison. En un momento de la clase Alison reviso su celular y vio que tenía un mensaje. Al leer el mensaje que decía "Fiesta en casa de Jason" pensó en invitar a su nueva amiga. Julia, al enterarse de que estaba invitada a una fiesta casi no pudo contener su alegría.
Al acabar las clases ya había quedado con Alison que la vería a las 8:00 p.m. en su casa. Al llegar a su casa, Julia, no pudo esperar para preparar lo que se pondría esa noche. Eran las 5:00 p.m. y ya tenía todo listo. Se ducho y se puso lo que había elegido, unos jeans y una blusa amarilla y espero a que fuera hora de verse con Ali. No pudo esperar más y a las 7:00 p.m. salió de su casa y en unos minutos llego a casa de su nueva amiga. Toco a la puerta, espero y Ali abrió la puerta con un vestido muy corto color negro, unos tacones del mismo color y con medio cabello planchado.
- Llegaste temprano – le dijo Alison.
- Si, estuve lista hace tiempo y decidí venir antes, espero no te moleste.
- No, para nada. Espera, ¿has dicho "lista"? ¿Así iras a la fiesta?
- Pues sí, me siento cómoda. ¿Qué tiene de malo?
- Nada, solo si vas a una fiesta para tu hermanito. – dijo Alison sarcásticamente.
- No tengo hermano...
- Como sea. – la interrumpió Ali – Que bien que llegaste antes, ven, veamos si tengo algo que te quede.
- No sé, no estoy segura de que...
- Cállate mojigata, no seas una nena y sube. Es hora de que seas un poco mala.
- Bueno, está bien. Supongo
- Claro que está bien, vamos, tengo un lindo vestido que te esta esperando.
- Nunca he usado un vestido como ese.
- Ni siquiera lo has visto.
- Pero si es como el tuyo, y estoy...
- ¡Ya! No exageres, vamos.
Ambas subieron las escaleras y entraron al cuarto de Ali. Julia se sentó en la cama mientras Ali buscaba vestidos y tacones que combinaban. Al final, Ali le ofreció a Julia un vestido guindo y tacones negros. Julia se puso lo que Ali le presto y se miró en el espejo. Se veía hermosa, nunca se había sentido tan bonita y con tanta confianza. Ali le ayudo a maquillarse un poco y cuanto ambas estuvieron listas, Ali tomo las llaves de su coche y fueron a la fiesta que tenía tan emocionada a Julia.
Al llegar, Julia reconoció a todos los chicos populares de su escuela, y todos saludaban a Alison, y algunos veían a Julia como si fuera la primera vez, algunos sin saber que esa chica estaba en su clase y otros pocos reconocían a la pequeña y tímida chica del fondo de la clase, y se sorprendían al hacerlo, ya que la chica tímida no lucia tan tímida en ese vestido.
En un momento Ali llevo a Julia a que conociera a su novio Roberto, que estaba con su mejor amigo Erik, un chico conocido por ser un cretino y un mujeriego, pero también era el chico que Julia no podía dejar de mirar en la clase de cálculo. Y ahí estaba el, frente a ella y por increíble que fuera, Julia estaba conversando con él y claro, con su nueva amiga Ali y su novio.
Después de un rato Roberto le susurro algo a Ali y ambos se fueron, dejando a Julia a solas con Erik. El empezó a ofrecerle unas cervezas y Julia no pudo evitar aceptarlas, Después de todo era algo que ella había soñado por años y no quería quedar mal con él. A Erick por el contrario no le importaba quedar mal. Después de un par de cervezas, Julia empezó a sentirse mal y un poco mareada, era la primera vez que tomaba y no sabía controlar bien el alcohol, pero Erick le seguía ofreciendo.
Julia, la dulce y tímida chica pelirroja que tan buena había sido, despertó con un horrible dolor de cabeza, tan fuerte que le tomo algunos instantes darse cuenta que la cama en la que estaba no era su cama, y la habitación en la que estaba definitivamente no era su cuarto. Sola y desnuda se levantó de golpe. Busco rápido el vestido que su amiga Alison, con buenas intenciones, le había prestado. Sin saber que sería la causa de la tentación de Erik. Lo encontró, se vistió y salió lo más rápido que pudo.
Avergonzada y arrepentida llego a su casa, sus padres la esperaban.
- ¿Tienes idea de lo preocupado que estamos?
- Mamá, papá, lo siento. Enserio lo siento.
Y no pudo decir más, subió corriendo las escaleras y entro a su cuarto, se tiro en la cama y lloro por horas, sin saber con certeza que había sucedido la noche anterior.
