Silent Killer «Kookmin»

01

Cuando por fin logré concibir el sueño, me interrumpen.

Tock-Tock

Puta mierda, ¿quién en su sano juicio se atreve a tocar mi puerta a esta hora?

Con mucho trabaje me destape de las cobijas y me dirigí a paso lento a la puerta para girar el picaporte.

Obviamente por producto del sueño, no reconocí a la persona parada frente a mí. 

- Hola.

- Adiós.

Cerré la puerta con fuerza, no caminé ni 3 pasos cuando esta había sido tocada de nuevo. 

- ¿Qué quieres? - pregunté con tono molesto y esta vez con los ojos abiertos.

Santa mierda de Taehyung.

Frente a mi se encontraba un chico castaño, ojos oscuros, alto y con buena materia. 

Si fuera testigo de Jehová sería un gusto que tocará mi puerta todos los días.

 Estaba tan inmerso en mis propios pensamientos que no escuché lo que aquel chico había dicho. 

- ¿Perdón? ¿Qué dijiste? - intenté sonar lo más calmado para no asustarlo.

- ¿Tú eres Park Jimin?

Incluso mi nombre sonaba hermoso saliendo de sus labios.

- Eh... - me quedé helado. Solo era una simple pregunta, ¿por qué me ponía tan nervioso? Carraspeé e intente adoptar una posición firme para responder. - Sí, soy...él.

- Soy Jungkook, tú nuevo compañero de cuarto. - dijo amablemente mientras estiraba su mano hacia mi.

Tu nuevo compañero. Mi nuevo compañero.

Respondí a su saludo tomando su mano. Sentí los escalofríos subir por todo mi brazo para acabar en cada mi cuerpo, todo eso con un simple tacto.

Tendría que acostumbrarme a vivir con erecciones diarias de ahora en adelante. 

- Mucho gusto. - dije hasta que todo se convirtió en silencio con puro contacto visual y yo asintiendo como idiota. Me estaba cagando de los nervios que estaba sintiendo. - Emm... necesitas ayuda con tus maletas?

Jungkook llevó la vista hacia donde estaban aquellas, eran cuatro, demasiadas para mi gusto, pero podía aprovechar para poner a la práctica mis habilidades para levantar cosas pesadas. Necesitaba mostrar mi gran masculinidad.

- Oh, no gracias. - dijo sonriendo mientras sus lindos dientes de conejo sobresalían. - Puedo cargarlas solo. 

Jungkook en un solo movimiento subió dos de las maletas sin ruedas a su espalda, mientras tomaba las otras dos con sus manos.  

Mierda. Este chico era más fuerte de lo que pensé. 

Me aparté rápidamente de la puerta para darle paso a la habitación. Fui detrás de el y me senté en mi  cama mientras observaba cómo Jungkook dejaba una de las maletas sobre la que ahora sería suya, y las otras tres las metía debajo de esta. 

- ¿Siempre cargas con muchas maletas? - rayos, otra vez hablé con voz de enano.

- Sí. En dos tengo ropa y en las otras solo cosas... personales. - dijo seguido de un suspiro. - Por cierto, puede que suene grosero pero odio que toquen mis cosas, asi que abstente de hacerlo.

- Anotado. - contesté rápidamente. Me sentía como un idiota, y lo era . 

- De acuerdo... estoy cansado, dormiré. Buenas noches, Jimin.