Capitulo 3: El plan

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Llegue a mi casa corriendo y cerré la puerta de un golpe, me me apoye en ella y respire... hasta que caí sentada en el suelo; el piso estaba helado, había polvo por todas partes lo que me pareció extraño ya que la casa siempre estaba limpia... mi mamá estaba obsesionada con la limpieza lo que ha veces me irrita un poco.
De pronto sentí que las lágrimas luchaban por salir de mis ojos, mi rostro rojo y mis manos empezaron a sudar repentinamente haciendo que el polvo del suelo se pegara a ellas.
Mi mamá salió de su cuarto, estaba despeinada así que era obvio que había estado durmiendo... tenía ojeras lo que era muy extraño porque ella siempre fue una mujer llena de energía que dejaba luz por donde pasaba pero hoy fue la excepción.
Me vio y en su rostro se formó una sensación inexplicable... creo que fue de espanto y a la ves de preocupación... por verme con los ojos llorosos, la cara roja y en posición fetal (no me di cuenta en qué momento me puse de esa manera, pero ya estaba así... mirando a mi mamá con cara de cachorro abandonado.)
De pronto esa expresión se volvió en tristeza, se acercó y me dijo:
-¡Amor! ¿Qué haces sentada en el suelo? (Preguntó)
-Mami, estoy un poco cansada... ¿puedo ir a descansar?
A mis padres y a toda mi familia les gusta que antes de hacer las cosas pregunté, supuestamente demuestra respeto y pues yo lo hago con tal de no ganarme un regaño y verlos feliz... aveces siento que no puedo tomar mis propias decisiones y que dependo mucho de mis padres.
-Claro hija, una niña tan linda tiene que descansar- mi mama piensa que tengo 10 años... aveces me da ganas de decirle que no soy una niña y que ya caí soy mayor de edad.
-Gracias mamá ( le dije, estaba un poco incómoda)
Subí corriendo las escaleras mientras pensaba en como le podía entregar eso a mis padres... se sentirían decepcionados de tener una hija mal criada y para el colmo irresponsable.
Me eche rápidamente en mi cama y me quede mirando el techo durante unos segundos, estaba nerviosa pero tenía dos opciones:
La primera no tan confiable pero con una buena dosis de suerte resultaría. ;)
1.Firmar la papeleta y presentarla como si mis padres la hubieran firmado.
La segunda, me ganaría un buen regaño y también un castigo pero sería los más justo y tendría mis merecido... eso creo.
2. Entregar la famosa papeleta de conducta a mis padres y que ellos decidan que será de mí por el resto de mi vida (no soy exagerada pero mis padres si... y mucho.)
Analizando detenidamente esas dos opciones llegue a la conclusión de que si les doy la papeleta a mis padres ellos harían un pequeño teatro y una charla para no volverme a portar de esa forma y son capases de meterme a un internado... de eso estoy segura; así que la segunda opción descartada, tendré que usar la primera, arriesgando mi libertad y mi tiempo.
Saque la papeleta de mi maleta, donde estaba escondida en un bolsillo muy pero muy oculto... por si a caso mi mamá se le daba por revisarme la maleta.
También saque un lapicero de tinta liquida color azul que usaba solo para casos especiales como este; lo destape y empezar a garabatear en la hoja de atrás de mi cuaderno de matemática (esa hoja en donde todos los adolescentes como yo hacemos tonterías como: dibujar personas hechas de palitos, mándalas o escribir su nombre y el de otra persona más encerrados en un corazón deformado)
Seguí intentando e intentando hasta que se me salió lo más parecido a la firma de mi papá , que era la más fácil entre él y mamá.
Agarre la papeleta con mis manos sudadas (no se porque pero en estos días mis manos han estado sudando mucho, lo que era muy extraño porque yo no era una chica nerviosa y no una decidida.) e intente hacer la firma los más parecida posible.
Después de que la papeleta ya estuvo firmada la volví a guardar en él mismo lugar de la maleta, mis manos habían dejado de sudar pero había dejado una manchas en la papeleta que antes se encontraba muy limpia... creo que era porque casi ninguno de los profesores y menos el director las usaba.
Agarre mi laptop y la puse sobre mi cama; me puse la ropa de dormir y me deje caer sentada sobre ella, abrí la laptop y entre rápidamente al Facebook... tenía 23 notificaciones de comentarios en mis fotos lo cual no la tome importancia porque ya me imagina lo que decía en los comentarios... y no es lo normal de: linda, hermosa churra, etc, etc... si no eran: que fea la rara, deberías ponerte un emoji en la cara o trataste de hacerte tu cirugía facial en 10 minutos cuando necesitas 10 años... eso duele, por eso prefiero no ver nada.
Entre a Messenger y no había nada nuevo... me sentí extraña ya la ves feliz porque no encontré ningún mensaje ofensivo de Brianna o de sus sombras Lorena y Meli.
Esas tres brujas me vuelven loca... siempre paran haciéndome la vida imposible... supuestamente porque soy una rara.
Me dio un poco de sueño y decidí salir de mi cuenta de Facebook, apagar la laptop y dejarla sobre la mesita de noche que estaba al lado de mi cama y me eche a dormir.

Nota de autora .
Hola gracias por leer, espero que les guste este capítulo.
Subiré hoy el capítulo 4 :3
Gracias <3

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