A sweet love 👉Zosan👈

🔸Pequeñas gotas.

Las gotas de agua caían estrepitosamente sobre el asfalto, las personas llevaban su paraguas, con abrigos grandes de colores oscuros, el no llevaba abrigo, le encantaba la lluvia como para hacerlo, su paraguas era transparente, para poder observarla mejor.

Él solo llevaba puesto una sudadera negra con unas letras blanca que decían "Asking Alexandria", una de sus bandas favoritas, la sudadera era de una talla más grande que la suya así que le quedaba un poco grande. Caminaba por un parque, pasos lentos y suaves, sus converse estaban un poco empapados por los charcos de agua, el paraguas descansaba sobre su hombro sujetando lo con su mano derecha y la izquierda dentro del bolsillo de su jeans negro rasgado por las rodillas, dando un toque rebelde, todo lo contrario a su verdadero personalidad.

La lluvia casi cesaba, así que decidió sentarse en un lugar seco y libre de agua, dentro de la bolsa de su sudadera llevaba su móvil junto con unos auriculares y un caramelo. Tomo el caramelo sabor menta y quito la envoltura llevándose lo a la boca, después tomo los auriculares y los conecto a su móvil, hecho esto busco en la carpeta de música y escogió una canción.

La poca gente que pasaba por el parque se veía desinteresada con respecto a lo que pasaba a su alrededor, la música lo tranquilizaba, era reconfortante. Se levantó de su lugar una vez la lluvia acabo junto con el caramelo, decidió dirigirse a una cafetería cercana al parque, su favorita por cierto.

Al entrar, el olor a café y pastel se adentro en sus fosas nasales, dejo el paraguas en un pequeño perchero para estas y se sentó en la primera mesa junto a la ventana, el camarero se dirigió hacia el junto con una pequeña libreta donde anotaba los pedidos de los clientes. Ya que el concurría esa cafetería, el camarero sabía perfectamente lo que siempre pedía, un café Americano {1}.

- Lo de siempre - Decía mientras el camarero asentia con la cabeza, dirigiéndose a la barra para dar el pedido. Mientras, él miraba por la ventana, algunas gotas seguían cayendo por el cristal. Su móvil sono, al parecer una llamada de su abuelo. Contesto.

- Ey, mocoso, ¿donde te has metido?, por lo general sueles estar en tu habitación - Dijo, al otro lado de la línea, la voz del hombre de la tercera edad.

- Estoy en la cafetería cerca del parque a donde siempre voy, sabes que cuando son días lluviosos salgo, viejo -

- Si, lo se, bueno, solo llame para decirte que Nami esta aquí junto con tu amigo de nariz larga -

- Usopp, - Corrigió - y, ¿saben que quieren? -

- Quieren que salgas de tu habitación, hacer vida social, lo mismo de siempre -

- Iré para halla - La llamada finalizó, su café estaba ahí, junto con una nota, dejo el dinero aún lado del café y tomo el pequeño papel, saliendo del recinto y dirigiéndose hacia su pequeño pero cálido departamento.

(...)

Al llegar, vio a una peli naranja junto a un pelinegro sentados en el sofá de su sala, su abuelo, Zeff, en la pequeña cocina, retiro sus converse y dejo las llaves en el buro cerca de la puerta.

La peli naranja fue la primera en darse cuenta de la presencia del chico, se levantó de su lugar cargando con ella una bolsa de papel.

- Sanji-kun, tengo algo que decirte - Mencionó con la mirada más sería de parte de ella, el pelinegro se acerco a ella parándose aún a lado.

- Nami-san, q-quisiera preguntarte sobre que pero, c-creo que sera lo mismo de siempre -

- No, no, Sanji-kun, esta vez es algo que te gustará - Dijo emocionada la peli naranja, se la bolsa de papel, sacó otros tres, al parecer boletos - Se que he insistido mucho con que salgas, pero sólo por esta vez, ven conmigo a un concierto. -

- ¿Concierto? - Ella asintió - Nami-san, no me gustan los lugares con demasiadas personas, es axificiante - La cara de su amiga, demostraba que estaba decaída, ¿cuantos intentos fallidos por que sanji salga de su departamento habían hecho? - S-solo por esta vez, ok -

Nami, brinco emocionada y feliz, por fin había logrado lo que quería. El pelinegro le coloco una sudadera blanca con estampado en las orillas de colores amarillo y verde, lo miro confuso por la acción y este solo le sonrio.

Después de ello, tomaron un té en el departamento de su amigo, al terminar se retiraron despidiéndose con un beso en la mejilla, exceptuando al pelinegro.

Recordó la pequeña nota que encontró junto al café, sacó el pequeño papelito de su sudadera y lo leyó, un número telefónico, atrás de este unas cuantas palabras "Llámame" , tiro en papel con furia, pues tener un cuerpo delgado y un rostro pequeño traía consecuencias, esas consecuencias eran insinuaciones de personas, todas de ella hombres. Ese es el por qué de las sudaderas de una talla más grande que la suya, así, formaría más cuerpo, también utilizaba unos lentes de gipster (no se como se escribe, corriganlo por favor) y gorros.

(...)

Se recosto boca arriba viendo el techo de su habitación, Nami le había dicho que el concierto al que asistiria sería el sábado por la noche, faltaban dos días para ello, mañana tendría clases en la preparatoria, cursaba el segundo año en la carrera de cocina, también tomaba clases por Internet de dibujo, esto, aparte de la música, le relajaba.

A pesar de ser poco sociable, cuenta con varios amigos, Nami, la peli naranja obsesionada por el dinero, Usopp, el pelinegro con gran puntería, Chopper, un estudiante de primer año con cabello castaño, que cursa la carrera de medicina, y Robin, ella es mayor que todos, esta en la universidad, le encanta la arqueología y leer libros de misterio. Un grupo pequeño, pero cuenta con los amigos necesarios, cada uno se apoya de otro y viceversa.

Cayó en los brazos del morfeo, sobre su cuerpo, descansaba una manta color azul cielo, la puerta de su cuarto estaba semi abierta, su ventana de igual manera, dejando entrar el aire fresco que se presentaba por el clima...

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{1} También conocido como café agudo, es una variación sencilla de expreso. El único componente extra es agua caliente. Y se debe poner tanta cantidad como café. Esto, rebaja mucho el sabor, y lo deja más suave.