2. Preguntas y medio, mala combinación.

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¡Hola buenas! Perdón por no publicar antes, pero entre que ayer tube una fiesta de cumpleaños y que no me entraba la inspiración pues he tardado bastante en publicar uno nuevo, como ya he dicho al no tener mucha inspiración, este puede ser un poco flojo a los otros, pero igualmente espero que os guste. Cuándo puedo volvere a escribir el siguiente. Y ya sabeis: si os gusta dalalaik (votar en este caso) y si quereis decirme algo dejadmelo en los comentarios. Y ahora si: ¡A disfrutar!

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___: Es sobre mi padre... mi padre ha caído en coma. Hace un par de semanas, fuimos al médico y le hicieron unas pruebas, le recomendaron que vigilara ya que le habían observado una anomalia en el hemisferio norte del cerebro, pero mi padre no hizo caso del médico. Hoy he llegado a casa por la tarde, y estaba estirado en el suelo, me he asustado así que he llamado a mi madre y ha venido en 10 minutos. Lo hemos llevado al hospital y el médico nos ha dicho que ha sufrido una embólia y que en estos momentos ha caído en coma. Yo...

Sabaa: ¿Puedo venir? -Cortandola para que dejara de hablar y no llorase- 

___: ¿Qué?

Sabaa: Qué si puedo venir, no voy a consentir que me digas esto por teléfono. 

___: Un momento. -Se oían cuchicheos flojos por lo que no pude escuchar lo que hablavan, pero supuse que le estaba preguntando a su madre si me podía pasar por su casa- Me deja que vengas, pero tengo que bajar... Mi madre en estos momentos no quiere que subas.

Sabaa: Lo comprendo, es normal. ¡Voy para allá lo más rápido posible! ¿Podrías hacerme un favor?

___: Dime.

Sabaa: No llores hasta que yo llegue, porfavor.

___: No voy a llorar.

Sabaa: Pero lo necesitas. Ya estoy saliendo de mi casa, nos vemos ahora. Hasta ahora.

___: Hasta ahora.

*Fin conversación telefónica*

Salí de casa lo más rápdio, dejando atrás a los chillidos de mi madre amenazandome de que me quedara en casa, en mi mente solo tenía a ___ llorando y no lo podía permitir, su tristeza me hacia estar mal a mi, y se me estaba cayendo el mundo al suelo, así que corrí hasta que no coordinava mi respiración con la velocidad en la que corría y me ahogaba. Llegué a su porta, ella ya estaba esperandome. 

Sabaa: Perdón por llegar tan tarde, he tardado lo menos que he podido.

___: No pasa nada, yo acabo de bajar.

No pude evitar fijarme en sus ojos, húmedos por el llanto, en el cuál ahora misma iba a derramar, no lo dudé dos veces y me dispuse a abrazarla, para que tubiera un apoyo en mí, y se sintiera segura, la ví llorar y seguidamente lloré yo, no podía aguantar cómo la única persona que me aceptado tal y como soy, que encima mis sentimientos hacia ella són los que són, llorara enfrente mio. 

Sabaa: Tranquila, todo saldrá bien. Sé que esto es muy duro, ahora mismo no puedo consolarte como me gustaria, ya que no puedo hacer nada para que estés mejor, es una cosa que poco a poco irá mejorando. Ten en cuenta que tu padre, aunque no lo conozca, seguro que es una persona muy fuerte, y va a salir de esta ya lo verás. Ten paciencia, confía en mí.

No dijo nada, solo se quedó en mis brazos llorando, hasta que consiguió calmarse, yo me quedé con ella todo el tiempo que necesitó y cuándo dejó de llorar se incorporó.

___: Sabaa, muchas grácias, de verdad. No sé como hubiése pasado la noche si no hubiése sido por ti.

Sabaa: No hace falta que me las des. Puedes contar conmigo cuándo lo necesites y siempre me puedes llamar. Ahora, sube y ponte a dormir, mañana te vengo a buscar y aver como estás.

___: Vale. Mi piso es el 1º 3ª. Buenas noches Sabaa.

Sabaa: Buenas noches ___. ¡Y descansa!

Antes de irse, ella me abrazó y de dió un beso en la mejilla. Ese beso para mí fue cómo... no sabría describir ese beso, estube empanado hasta llegar a casa. Entre por la puerta y mi madre estaba sentada en la silla, esperandome.

Teresa: ¿Dónde has ido?

Sabaa: A hablar.

Teresa: ¡¿ A estas horas?! Són las 23:30. ¿Cón quién estabas?

Sabaa: No te importa con quien estaba. Estoy aquí, ¿no? pués dejalo ya. Me voy a dormir.

Cerré la puerta de un golpe, me puse el pijama y me tumbé en la cama dispuesto a dormir, pero no podía. Me sentía mal por haberle respondido tan secamente a mi madre, ya que solo se estaba preocupando por mí, pero no quiero decirla que estaba con ___, ya que seguramente hubiese preguntado cosas que no tocaban y se hubiese metido donde no debía. Después empecé a preguntarme como estaría ___. Me quedé dormido pensando en ella.

Mi desperador tocó a las 7:00, hoy más temprano que ayer ya que tenía que ir a buscar a ___. Me vestí, hice la mochilla y salí por la puerta. Llegué a su portal, llamé y me abrió para que pudiera subir hasta su casa. Ella estaba esperandome, apoyada en su puerta, con una sonrisa en la cara al verme. Al ver esa sonrisa, hizo que yo me sintiera mejor en ese momento ya que la conversación corta y fría con mi madre hizo que estubiera un poco cabizbajo.

Sabaa: Buenos días ___. ¿Cómo estás hoy?

___: Buenos días. Mejor, la verdad que después de hablar contigo me sentí mejor así que me dormí al instante, y hoy me he levantado de mejor humor.

Sabaa: Bueno, me alegro que estes mejor. ¿Nos vámos?

___: Sí. Pero que asco, otro día la misma mierda, otra vez al instituto, y al salir igual... Maldita rutina.

Sabaa: jajajajaja. La verdad esque estoy en desacuerdo contigo. Desde que te conozco que mi vida se ha vuelto todo un caos.

Salimos de su casa y nos dispusimos a andar hasta el instituto. Estaba hablando con ella, y por un momento me giré. En una esquina pude contemplar un hombre con gorra y gabardina marrón, que desapareció en un seguno. Esa gabardina y esa gorra me eran familiares, y recordé el sueño que tube.

*Flashback*

Un hombre de pelo marrón oscuro con una gorra negra, una bufanda que le cubría la cara, una gabardina color marrón, con toques anaranjados, una camisa de algodón color Beis, unos tejanos y unas botas. El hombre cuyo rostro no podía observar, llevaba una porra en una mano, y en la otra, una pistola que apuntaba a mi hermano. Cuando me dí cuenta empezé a correr hacia mi hermano, pero el hombre, antes de que llegara a el, disparó.

*Fin flashback*

Al recordar el sueño que tube con ese hombre, me entró pánico al verlo a la vida real. ¿Mi mente me estaba advirtiendo de él, o era solo pura casualidad? De todas maneras, tenía miedo.

My life... My rulesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora