Dragon of War: Rage of the Spartan

Caidos, Demonios y Espartano

En una ciudad llamada Kuoh, podemos ver a un joven caminado por las calles con un uniforme escolar, su cabello castaño y ojos dorados, tenia una buena musculatura adecuada para su edad, su mirada solo era indiferencia total y parecía que siempre tiene el ceño fruncido

Su nombré Hyodou Issei, tenia 16 años, vive con sus padres no muy lejos de la academia donde asiste, que hace poco era solo para mujeres pero ahora se volvió mixta por lo tanto había mas mujeres que varones

El sueño de todo chico asistir a una escuela donde las mujeres son muchas en cantidad y lo mejor es que son bellas

El castaño llega a la academia, donde todo el mundo lo empieza a mirar mal

Todo por que sus mejores amigos era un par de pervertidos, solo por que sea amigo de unos pervertidos no significa que el también lo sea. Aun que lo es un poco, no significa que lo empiecen a catalogar como un gran pervertido

Como si ellas tan poco se queden como tontas al ver a chico guapo o los demás varones al ver a alguna de sus compañeras en traje de educación física

Issei llega hasta su salón y deja sus cosas en su asiento para luego sentarse con sus pies en su escritorio y sus manos atrás de su cabeza, esperando a que las clases comiencen

-¡Hola Issei!-

El mencionado gira la cabeza para ver a sus mejores amigos, aunque pervertidos, pero son sus amigos

Matsuda y Motohama

-Hola chicos-les saludo con una pequeña sonrisa casi ni se ve, el no era de sonreír mucho

-Oye Issei ¿quieres ir a ver a las chicas de kendo cuando se estén cambiando?-preguntó Motohama con una gran sonrisa enorme

-Si vienes te daremos el privilegio de ser el primero-dijo Matsuda con la misma sonrisa

Issei deja escapar un suspiró. Siempre lo mismo una y otra vez, no va a negar que las chicas del club de Kendo eran hermosas pero ¿llegar hasta ese punto de perversión?

Además cuando ve a unas sus compañeras, sentía como...melancolía, como si su corazón le apretara fuertemente y en su mente ve a una mujer con una niña pero no podía ver sus caras, solo sus sombras

¿Pero por se sentía tan triste?

Issei borra eso pensamientos y mira a sus amigos con seriedad

-No, gracias chicos-

-Esta bien mas para nosotros-dijeron con una sonrisa aun mas grande 

Después los tres se quedaron conversado hasta que llego la hora de iniciar las clases. Pero nuestro querido Issei parecía mas distraído o mas pensativo. Todo el tiempo hasta que tocó la campana de la hora del recreo

Issei sale de su clase y se va a un lugar apartado de los demás, cerca de un viejo edificio, comiendo y también observando las nubes que pasaban, aun pensativo

Siempre fue alguien un poco antisocial, no es que nadie le hable o se ha cerca a el (Aunque ahora que lo tacharon de pervertido nadie se le ha cerca) mas bien el lo quiere hací, le gusta estar solo, tenia a Motohama y Matsuda le gustaba estar alejado y en paz

De la nada Issei escucha los gritos de sus amigos y ve como son seguidos por unas chicas con unas espadas de madera por toda la escuela. El castaño deja escapar un pequeña risa

Toma toda sus cosas y empieza a marcharse, pero en su nuca siente un cosquilleo y  se da la vuelta para ver en una ventana del viejo edificio estaba una joven de cabello rojo como la sangre, ojos azules y un cuerpo muy bien desarrollado