No quiero regresar a "casa" con Taylor ●▂● .. ●︿● .. ●ω● .. ●﹏● .. ●▽●

892 35 5
                                    

Capítulo 44

El olor de bosque y tierra mojada, inunda mis fosas nasales. El clima es un poco húmedo en una mañana nublada. Posiblemente llueva hoy. Cuestiono en mi mente. Doy una respiración profunda y comienzo a estirar los músculos; Abajo, rodilla arriba, los dedos, estirar los brazos, el cuello e infinidad de cosas más.

Mis pies comienzan a moverse lentamente por la tierra café, espumosa, que le adornan unas cuantas hojas secas de diferentes tonalidades de, café, rojo y naranja. Mis zapatillas de deporte se hunden un poco entre la tierra, pero cuando miro el piso y lo que he recorrido –casi 100 m- me doy cuenta que no dejo las huellas tras mis pisadas.

La naturaleza se expande en su esplendor. El día estará un poco gris, pero eso no les impide a las avecillas cantar a todo pulmón y las rojillas ardillas recolectar sus nueces.

No quiero regresar a "casa" con Taylor. Sé que me atacara de preguntas, sé que no podre responder sin romper en llanto y... Mierda ya me ha visto llorar. ¿Extraño? Bastante, no quiero decirles y hacerles pensar que soy la fuerte de aquí, pero a partir de los 12 años, cuando me he dado cuenta que no importaba lo que ocurría conmigo, nadie. Nadie. Incluso Kate me ha visto llorar. ¿Por qué no lloro? Bueno, eso es simple. Claro que lloro soy una persona y siento... aunque mi "familia" no lo crea. La razón es fácil de adivinar y difícil de comprender. Lástima. ¿Quién no ha sentido lastima por alguien llorando, incluso si esta persona te cae pésima? Exacto. Eso trato de evitar, y ya sé que seguro piensan que eso no es verdad y me dirán una y mil razones. Pero hay que pensar con lógica. Cuando un niño llora, mama le da lo que este quiere para que deje su llanto atrás. Lo mismo con los mayores. Si alguien llora, incluso, aunque le odies, no le hables o lo que sea, tienes una mínima duda de porque llora; pero si hay más gente reunida te da más curiosidad y así aumenta dependiendo el número de personas que están a su alrededor. Y si, si me desahogo y lloro, pero en mi habitación a las 2 de la mañana, con las luces apagadas y con las cara contra la almohada.

Así que, tú decide si quieres llorar, pero no cuestiones mis razones.

Miro atrás y ya no hay rastro de la casa. Algo en mi interior – La lógica tal vez- me dice que regrese, pero otra parte de mí que es mucho menor me aconseja quedarme y no contestar el cuestionario.

Me siento al pie de un árbol y observo a un gusano, tal vez oruga, tratar de subir el árbol. Es magnífico. Este pequeño intenta subir un tronco mil veces superando su tamaño y largo. Decido que debo enfrentar a Taylor, y a sus estúpidas preguntas.

***

Entro a la casa. La voz de John Lennon inunda el lugar. Miro a todos lados y no encuentro a Taylor. Me dirijo a la cocina por un batido y ahí está sentado de espaldas a mí y moviendo los brazos y la cabeza al compas de la música. Solté una gran risa, supongo que nunca a prendí a reír femeninamente. Pero vamos, si vieras a este hombre asiendo esos movimientos también romperías en carcajadas. Se giro y me miro. Sus ojos estaban abiertos y me causo aun más gracia. Se levanto del banquillo y se acerco.

-Mucha risa no?

-Viéndote a ti? Cualquiera.

-Graciosa, bastante. Ya has regresado.

-No. Soy producto te tu imaginación.

Decía mientras agitaba las manos enfrente de él, como "un espejismo".

-Así que un espejismo... -Se acerco a mi- Supongo que puedo hacer lo que sea con este... emm... ¿Espejismo?

-Aléjate Lautner.

Sus ojos se iluminan y unas comillas, se asoman en las esquinas de sus labios.

-Que piensas Lautner?

I Love You♥Donde viven las historias. Descúbrelo ahora